me desperté a las 5:00 tenía clases a las 8:00 pero debía largarme a mi departamento y alejarme de toda la mierda que me ha provocado estar cerca de Khun. Me duche me cambie, saque todas mis cosas y las guarde en el auto.
Khun venía a despedirse pero no le daría gusto al ese maldito bastardo, así que subí al auto lo encendí y arranque sin dejar que se acerque, eche un vistazo por el retrovisor y vi a Khun con una sonrisa ladeada e irónica despedirse como si supiera que regresaría de algún modo, pero no lo haría.
Una hora después de conducir por la ciudad, me estacione frente al edifico lleno de departamentos le dije al portero mi nombre, me dio la llave baje todas las cosas del auto las subí, abrí la puerta y entre.
El edificio por fuera da muy mala apariencia pero sabía que Khun no es de gustos suaves, el departamento era amplio, tenia muebles grandes color blanco, una mesa frente al los muebles un plasma gigante y alrededor muchos anaqueles para colocar mis libros, a pesar de ser un cabrón sabia exactamente lo que necesitaba. Me dirigí a las habitación era grande, las paredes tenían color marfil, un balcón amplio con dos muebles y una mesita, la cama era muy grande como para una persona, me reventaba la paciencia la ambición y excentricidad de Khun pero tenía que acomodarme de todas maneras no tenía mucho dinero y tampoco quería aceptar el dinero sucio y sangrante de Khun.
Acomode las cosas y para entonces ya eran las 7:30 me puse una polo negra unos jeans y mis botas, guarde las cosas en la mochila tome mi chaqueta y salí, arranque en el auto llegue 8:00.
-CABRÓN!, entonces ya eres libre hermano?- me dice Jano mientras estampaba su mano contra la mía para luego medio abrazarme, se aleja y asiento en respuesta a su pregunta.
Ingresábamos por el pasillo hasta que Jano ingreso al aula dónde íbamos a recibir clases. Iba detrás de Jano buscando asiento hice un paneo completo del aula, y mi vista se congelo en una chica que estaba en la esquina extrema del aula, estaba sola leyendo un libro con audífonos, no miraba a nadie ni a nada solo a su libro.
Me senté junto a Jano pero vuelta volví a ver a la chica, Sus facciones era interesantes, su piel clara, cabello largo color violeta, sus ojos azules, sus pestañas y cejas bien pronunciadas, sus labios era finos y muy marcados, no reflejaba ningún sentimiento u emoción en su rostro, mas que la concentración en el libro. De pronto su vista se dirigió al frente luego a un lado para al final posar sus ojos en los míos, quede congelado porque jamás había visto unos ojos tan brillantes y tan vacíos al mismo tiempo, ni los mismos narcos y asesinos con los que me he lidiado han tenido esa combinación en sus ojos, ella no quitaba su mirada de la mía hasta que de pronto solo rodó sus ojos sin ningún tipo de expresión de vuelta al libro, se acomodo en el asiento y por algún motivo me sentí estúpido.
-Hola- dice Cira la novia de Jano- Hasta que al fin estás en el mundo real?
-Cira- advirtió Jano
Cira es una chica muy guapa de buen cuerpo, facciones muy femeninas tiene ojos verdes, cabello rojo fuego, labios rosados y blabla. tu sabes la típica chica guapa pero la distinguía su personalidad podría ser muy guapa pero no se daba el lujo de pisotear a todos por eso.
-Está bien, es solo la bienvenida al estilo Cira, ya sabes- dijo- te vi viendo a mi amiga- dijo con una sonrisa de lado.
-La conoces?
-Si, ella es amiga mía desde inicio de colegio, se llama Aneu.
-ANEU!- Dijo Jano sorprendido y con voz burlona- Sus padres la odian o que?
-Cállate!, Jano, no es que digamos un nombre común. - le escupió Cira defendiendo a su amiga- Si quieres te la presento después de clases- dijo dirigiéndose a mi de nuevo
-NO!, no es necesario.
-si, claro!- dijo Cira deslizándose a su asiento incorporándose hacia el frente para atender clases mientras ingresaba el profesor al aula.
Hola, soy Shateur, su profesor de Psicología Experimental, nuestras clases serán Talleres y poco teoría. Como verán son cuatro horas de clase así que procederemos a presentarnos y luego a realizar el primer taller de este semestre.
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ANEU
Teen FictionEl yin y el Yang se consumen uno al otro, pero también se refuerzan mutuamente. Así se resume la vida de Aneu, una chica de 18 años confundida completamente por causa de su yin, Aunque parezca que lleva una vida completamente normal. Hasta que cono...