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Unos estruendos se oyeron en todos lados, los gritos de dolor, las lágrimas todo aquello causaba un gran alboroto apretó los ojos y se llevó las manos a la cabeza para después abrir sus ojos azules se paró y vio a su alrededor estaba en la enfermería del domus Flao se sentó no había nadie con ella pero recordaba contra quien debía pelear a quien debía asesinar pero ahora que el había jugado con su corazón no sabía si lo iba a lograr vencer, se puso de pie pero al instante cayó al suelo se sentía débil y mareada pero sobretodo aquello estaba acabando con su cordura no sabía cuanto más podría soportar las lágrimas empezaron a bajar ya no podía aguantar más aquello no entendía como todo se había arruinado en un abrir y cerrar los ojos, tal vez todo hubiera sido diferente si jamás se hubiera separado de su madre, de su amado Fairy Tail sin embargo ¿que decisiones podía tomar una niña espantada? Se intentó parar una vez más para salir, para enfrentarlo y terminar con aquello, se puso de pie por completo y se tomó del brazo para evitar caer y al mismo tiempo sentir sus temblores no sabía que estaba pasando afuera pero si estaba segura que no podía ser nada si se quedaba ahí como una niña espantada
-Esperenme muchachos iré con ustedes pronto- dijo Dan mientras salía de la enfermería.
Layla volvió a saltar teniendo cuidado de no acabar con su poder mágico ya que se podía poner en riesgo, esquivo una ráfaga de oscuridad que la demonio lanzó y Leo le lanzó una ráfaga de luz la demonio dio un salto a la izquierda y con su cola tomó a Lucifer y lo lanzó hacia Layla quien dio un salto para evitar que Lucifer le hiciera dañó al mismo tiempo que lo sujetaba para evitar que se estrellara en la pared
-¿Estas bien Lucifer-san?- le pregunto este sólo asintió y se puso de pie
-¿Que necesidad de seguir peleando sólo dense por vencidos?- dijo Kuya mientras movía su cola y veía a sus contrincantes
-Tu no lo entenderías sólo estas siendo manipulada además no entenderías la voluntad de un humano- le dijo Layla mientras corría hacia ella junto a Loke y Lucifer quienes la venían protegiendo
-¡Alguien como tu no entendería que significa ser fiel a sus amigos!- Loke rodeó sus manos por una onda de luz y Lucifer activo una aura oscura que lo rodeó por completo
-¡No entenderías lo que significa proteger a los que amas y dar la vida por los mismos porque no entenderías la voluntad de nosotros los humanos y nuestros camaradas!- Leo y Lucifer supieron que aquello lo decía por ellos dos, la demonio abrió sus palmas que se llenaron de oscuridad y luego la lanzó Loke y Lucifer con sus poderes destruyeron las esferas de oscuridad y dieron paso a Layla quien con su látigo lanzó un golpe de tal forma que capturó a Kuya para después lanzarla por los aires
-¡Tu no entenderás jamás que nosotros sentimos la tristeza de nuestros compañeros, su alegría y su ira!- Kuya se estrelló en la pared y vio mal a Layla quien suspiró y le regreso la mirada al mismo tiempo que hacia desaparecer a sus dos espíritus, su mirada se nubló
-Y ahora lo que siento son las tristezas de Dan, siento como sus lágrimas van cayendo poco a poco- Layla camino hasta la dirección donde se habían ido sus compañeros tiró su río de estrellas y cuando vio una sombra a máxima velocidad pasar sonrió
-Siento su dolor por no podernos proteger por dejarnos atrás incluso siento el miedo de que jamás la vayamos a querer- se dio la vuelta y sonrió mientras veía a la demonio y una luz dorada la rodeaba
-Y se que alguien la ayudará a vencer sus miedos y ese alguien no seré yo- después de eso calló y susurro unas palabras la demonio tuvo suficiente y fue hacia ella pero cuando le tomo del cuello Layla había terminado de recitar el hechizo
-¡Uranio Metria!- grito todas las estrellas atacaron a la demonio y la estructura del túnel y todos los escombros cayeron sobre ambas Layla sólo lanzó sus llaves fuera del peligro y los escombros le cayeron encima
"Pelen por siempre" pensó antes de quedar inconsciente no sabía cuanto tiempo le daría a sus amigas pero con el poco tiempo que les diera era más que suficiente para que ella sonriera.
Cierto pelinegro veía todo a su alrededor parecía como si todo se fuera a caer en cuestión de segundos y los magos que participaban en los juegos mágicos estaban sacando a los civiles, protegiendo a la familia real o continuaban pelando contra los demonios que los invocadores llamaron, su gremio era el que más peligro corria y eso cualquiera lo sabía, había oído el grito de dolor de uno de los miembros de Alma negra vio como aquella que se transformaba había caído vencida, observó que el príncipe de Bosco estaba luchando con todo lo que tenía, aquella muchacha que dominaba el veneno ya había regresado de haber escondido a la albina quien al parecer conocía la situación y conocía al maestro del gremio Red Hole de manera muy especial suspiro mientras caminaba su pelea había sido fácil después de todo un alquimista de hierro no era la mejor idea contra un dragón sleyer de hierro pero al menos eso pensaba el ya que sus pies se quedaron quietos bajo la mirada y observó que unos grilletes lo tenían pegado al suelo volteo y sus pupilas se dilataron por la sorpresa aquel alquimista estaba de pie trago en seco y vio al mago
-Se supone que te venci ¿como es que estés de pie?- Ukio sonrió y vio a Gale
-Digamos que sólo me estaba adaptando a tu poder pero ahora estoy bien- en su mano había una espada de hierro y la lanzó Gale temió lo peor no se podía mover.

Próximo capítulo
Gale vs Ukio
La huida acabo
 

Los hijos de Fairy Tail Donde viven las historias. Descúbrelo ahora