N o

83 1 0
                                    

Hablábamos diariamente, cada vez creía que te conocía un poco más, y luego nos volvimos a ver, para ver una peli de terror. Al momento de sentarnos en la sala fuera del teatro, te observé. Solo eso. Me fijaba en el largo de tus pestañas, en el café de tus ojos, en tus manitos pequeñas, en el rojo pálido de tus labios. En todo. JUEPUTA, te extraño tanto.
En medio de la película te besé. No sentí una descarga eléctrica o mariposas en el corazón, me concentré en no cagar el beso. Era un poco ácido, pero tu boca se sentía suave, el resto ya lo sabes.
Caminamos de vuelta a casa, y me sentía tan completa que podría haberme largado de casa ese día y estar bien.
Contigo estaba bien.
Contigo era yo misma.
Contigo...contigo podía vivir.

Testamento de amor.Where stories live. Discover now