Cada una de las cosas que odias sobre ti mismo, a mí me vuelven loca.
Y es tan triste pensar que ahora tú estás bien con alguien que te puede dar lo que yo no fuí capaz de darte y yo aún esté pensándote, en cómo va tu vida, en los conciertos a los que nunca fuí y a los que no iré, en esos poquitos proyectos que teníamos juntos y en ese hueco emocional que me dejaste.
Aún te quiero, y no quiero saber a quién besas con esas manos calientitas, ni a quien abrazas en las noches frías ni con quién te quedas hasta las dos de la mañana hablando por teléfono.
ESQUE ESO ES LO QUE HACÍAS CONMIGO.
Quiero que sepas que no voy a intentar remendar mis errores porque lo hecho hecho está, pero tengo que mostrarte y decirte o escribirte que voy a estar ahí, y si en algún momento llegas a leer esto quiero que sepas que eres el único que ha roto mi corazón de la forma más delicada pero más cruel posible.
No sé cómo puedo odiarte y amarte al mismo tiempo, me estoy muriendo.
Al fin y al cabo este amor fué un juego, pero yo salí perdiendo.
