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- ¡Aaaalan, que llegas tarde al Instituto!- grita mi madre.

Otro día más para esta vida.
Me dirijo al baño y miro mi reflejo en el espejo que hay encima del lavabo. tengo mi pelo negro enredado, mis ojos verdes hinchados por el sueño y mi tono de piel es lo único que hoy esta igual que siempre: pálido.
Me pongo una sudadera roja, unos pantalones vaqueros y unas deportivas.

Después de desayunar me voy al instituto. Si no recuerdo mal hoy es 14 de Septiembre: primer día de instituto.
Llego a clase y en menos de dos minutos estamos todos sentados. Yo estoy situado en una mesa del fondo. La puerta se abre y entra el profesor acompañado de lo que parece ser una alumna nueva. De repente se hace el silencio.
Es pelirroja y unos ojos parecidos a los míos y tiene pecas por toda la cara; parece distinta a los demás pero no me puedo hacer demasiadas ilusiones ya que puede evitarme como cualquier otra persona.

-Os presento a vuestra nueva compañera de clase: Daniela Alison. ¿Quieres decirles algo a tus compañeros?- pregunta el tutor dirigiéndose a Daniela.
-No- dice con una sonrisa.
-Vale, puedes sentarte.

Daniela se dirige hacia mí, no sé por qué, a lo mejor quiere hablarme, pero sólo venía hacia mí para sentarse a mi lado, en la única mesa vacía.
De repente empieza a mirarme, yo intento centrarme en la clase pero no puedo ya que ella intenta llamar mi atención. Parece que no ve muy bien la pizarra.
-¿Qué pone ahí?-dice en un tono bajo.
-Me parece que pone " Es uno de los más importantes"- le respondo tímidamente.
-Ah.

La clase transcurre lentamente y por fin suena el timbre que indica que la clase ha acabado. A la salida noto que alguien me agarra del brazo.
- Gracias por lo de antes- me dice Daniela con una sonrisa.
- Ah, no hay de qué Daniela.
-Prefiero que me llamen Dani. Y ¿cuál es tu nombre?
Antes de responder miro a mi alrededor porque se ma hace raro hablar con alguien.
-Eh, Alan.
-Y ¿cuál es tu apodo?
-No tengo. Los apodos los ponen los amigos y ,bueno, yo no tengo.
-Pues a partir de ahora te llamaré Al.
-¿Al?¿Como el de Divergente?
-¿Tú también has leído ese libro?¡Es mi preferido!
-También es uno de los míos.
-Mira, ya tenemos algo en común. Esta tarde podrías venirte a mi casa y hablamos de nuestras aficiones, gustos, es decir lo que hacen lo amigos.
Me sorprendo al escuchar la palabra "amigos",nunca he tenido uno y se me hace raro, más aún refiriéndose a mi.
-Hmm... ¿Sobre qué hora sería?- pregunto.
- Pues... A las 17:00, si te parece bien, y ya de paso me explicas cosas del Insti y tal.
-De acuerdo.
Ella me da su dirección e intercambiamos nuestros números de teléfono.

Llego a casa y cuento los minutos hasta que llega la hora de irme a casa de Daniela.

Me encuentro delante del telefonillo de su portal. Marcó el 2A y espero.
-¿Al?

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