Mi Harem Inverso [Cancelada]

-Capitulo 2-

-Buenos días-Dijo mi madre con su respectiva alegría de siempre- Venia por la inscripción de mi hija soy la señorita-

-Oh si, la estábamos esperando-Dijo cambiando un poco su rostro de odio mientras abría mas la puerta- Por favor entre

-Gracias-Dijo con una sonrisa y luego se giro a mi-¿Vienes conmigo o te quedas aquí afuera?

-Eh...No gracias me quedare aquí afuera-Dije retrocediendo -Ademas, si le tiras las ramas al director no quiero estar hay para verlo-Le hable en susurro a lo que mi dicha madre puso sus ojos en blanco y entro en la oficina.

Gire sobre mis pies encontrándome con una banca, obviamente era el lugar de espera, con alegría de aplastar mi trasero me deje caer sobre el dichoso asiento.

Saque mi teléfono y comencé a mirar vídeos graciosos de animales, esas cosas peludas siempre me matan de gracia con sus locuras, allí vi unos cuatro o cinco vídeos.

Hasta que volví a mi aburrimiento.

Guarde mi teléfono en mi bolsillo trasero de mi pantalón al pararme, camine hacia la ventana que se encontraba cerca.

Afuera había un cielo precioso ademas que los rayos del sol entraban por la ventana produciendo una sensación de calidez

-Madre-Dije en susurro hacia la puerta- ¿Puedo ir a caminar por el instituto? ¿Que si? Gracias- Con una sonrisa en mi rostro comencé mi caminata por los pasillos lleno de alumnos.

Pude ver que había una cafetería muy grande, muchas mesas dispersadas por todos lados, y alumnos que se encontraban sentados sobre ellas charlando.

Seguí mi camino y encontré un laboratorio, espero poder usarlo...

Y así seguí hasta llegar el patio supongo yo, la campana sonó alertando a los alumnos que ya era hora de las clases. Se podía ver algunos rostros que expresaban miedo al entrar, ese tiene examen, otros que mostraban fastidio de entrar, tiene la materia o al profesor que odia a la primer hora, y algunos que entraban como si nada, obviamente no le importaban ya que estaban contando un chisme o se la pasaban todo el día hablando como si nada.

Como aun no era alumna pasaba junto a los que odiaban su vida con una gran sonrisa en mi rostro mostrando que aun no entraba a la cárcel. Soy una buena persona lo se.

Al ya no quedar alumnos seguí con mi caminata hasta pasar al patio trasero del instituto, era muy bello. El jardín estaba muy arreglado, habían flores por todos lados ademas de los arboles con hojas bien verdes que pareciera que recién salen de su capullo.

Pero uno me llamo mas la atención que los demás, uno en particular, no tenia nada fuera de lugar, no llevaba flores, no era el mas grande de todos. No era distinto  en nada que los demás arboles pero al verlo junto con el reflejo de los rayos cálidos de sol hacen que la imagen sea perfecta.

-Debería tomar una foto-Dije, tome mi teléfono, coloque la cámara y buscaba la posición ideal.No lograba el correcto y si usaba el zoom se estropearía así que di unos pasos hacia adelante completamente atenta a la imagen

-¡Oye!-Escuche al sentir como mi pie derecho pisaba algo duro

Retrocedí por el susto y me encontré con un chico que se encontraba tirado en el suelo como si nada.

-Lo siento-Dije al segundo.

-¿No ves por donde caminas?-Dijo mientras sobaba su mano al parecer pisada por mi.

-Ya lo siento, ademas ¿Que haces hay tirado ?

-No hay una regla que indique no dormir en el césped-No dije nada, solo puse mis ojos en blanco