Unexpected dreams - Larry Stylinson

Capitulo 17.

Narra Harry.

Me desperté por el ruido que provenía de abajo. Abrí los ojos como pude y revise mi móvil por si mi novio me había enviado algún mensaje, pero ni siquiera eso. Supuse que se había quedado sin batería y me despreocupé un poco.

- Buenos días, hijo- mamá besó mi frente.

- Buenos días. Louis no me ha enviado ningún mensaje- me senté en el sofá- Seguro que no tiene batería.

- Harry, sobre eso...- se sentó a mi par.

- ¿Qué?

- Acaban de llamar de Doncaster. Louis tuvo un accidente en la carretera...

- ¡¿Qué?!- grité  y comencé a llorar.

- Harry, mantén la calma. Por favor...

- ¿Por qué a Louis?- lloré aun más y mi madre me abrazó consolandome.

- Te llevaré a verlo. Empaca tus cosas.

No podía creer lo que había pasado. No a mi Louis, no a él. No se merecía que nada malo le pasara. Él se merece todo lo bueno en la vida, no lo malo. 

Desearía despertar y que todo haya sido un mal sueño.

- Harry, despierta. Hemos llegado- mamá me movía el hombro de un lado al otro esperando a que yo despertara.

Cogí mi mochila y me adentré en el hospital. Me acerqué a la recepcionista.

- Buenas tardes, ¿en que habitación se encuentra Louis Tomlinson?- pregunté nervioso.

- Aguarde un momento, por favor- comenzó a teclear en la computadora- ¿Podría decirme su nombre?

- Harry, Harry Styles.

- El paciente se encuentra en el segundo piso, habitación 104- sonrió.

- Muchas gracias- dije apurado y fui hacia los ascensores. 

- Apúrate, apúrate- murmuré al ascensor que tardaba en subir.

- Tranquilo, Harry- mi madre me sonrió comprensivamente- Yo te esperaré en la sala. Si necesitas algo estaré allí.

Segui por los enormes pasillos del hospital. Miré puerta por puerta.

100, 101, 102, 103...

104.

El corazón me latía muy fuerte. Golpeé la puerta despacio. Escuché pasos acercarse. La puerta se abre y aparece Johannah. Se le notaba triste, de todas formas me sonrió.

- Harry, adelante- se movió a un lado para dejarme pasar- Los dejaré solos. Iré a la cafetería.

Johannah salió y me acerqué a Louis.  Él se encontraba con tubos que entraban y salían por todos lados. Al parecer, el choque fue muy grave. Me senté en una silla que se encontraba al lado de la cama y tomé la mano de mi novio entre las mías.

- Lou...- unas lagrimas comenzaron a salir- Lo siento tanto, Louis. 

Le hablé a Louis mientras intentaba no llorar más. Minutos después me acerqué a él y dejé un beso en sus labios. Justo entró Johannah y sonrió ante el acto. 

- Lamento decirte esto, Harry, pero debes irte. Ya finalizó el horario de visitas.

Me levanté y me dirigí a la madre de Louis para abrazarla. El doctor entró y en su mano tenía unos papeles.

- Buenas tardes- saludó. Johannah y yo sonreímos y esperamos a que hable- Louis mejorará, pero no será rápido. No sabemos cuanto tiempo seguirá en coma. Puede estar así unos días, semanas o incluso meses. No está grave, pero tardará en recuperarse. Es cuestión de esperar.

Ambos asentimos y me despedí. Mi mamá me había enviado un mensaje que se encontraba esperándome en el coche, ya que la habían echado.

Al llegar a mi casa, subí las escaleras y me encerré en mi habitación. No quería cenar; no tenía hambre y tampoco quería hacerlo. Estaba hecho pedazos. Lo único que necesitaba en ese momento era estar con Louis.

Tres semanas ya habían pasado del accidente de Louis y, Harry no salía de su habitación. No iba a clases, comía muy poco, estaba en la cama todo el día y apenas veía a sus amigos.

- Harry, cariño. Savannah vino a visitarte- mi amiga entró a mi habitación y mi madre salió.

- Hola, Harry- se sentó en la orilla de la cama.

- Hola.

- No puedes estar así para siempre...

- ¿Así como?- la miré.

- Así, tan depresivo. Louis se recuperará, lo dijo el doctor. Debes tener paciencia.

Volví mi vista al techo y Savannah siguió hablando.

- Harry, joder. Mirame-la miré con los ojos llorosos- escucha esto que te voy a decir, ¿de acuerdo?- asentí y ella continuó- el mundo te romperá el corazón de todas las formas imaginables. Eso está garantizado y yo no puedo explicarlo. La vida nunca es justa pero debes afrontar los golpes y seguir adelante. Y cuando tengas el corazón roto tendrás que volver a construirlo. A pesar de todo esto, aunque la vida rompa todas tus ilusiones debes seguir soñando, ¿sabes por qué? porque si no te ilusionas, porque si no sueñas, porque si no amas, ¿que clase de vida estarás viviendo? ¿para que quieres una vida si no la estas aprovechando? No se puede vivir con miedo toda la vida. La vida es así: te caes, te levantas y te vuelves a caer. Pero, si ni siquiera te mueves por temor a caerte, en realidad ya te has hundido.

Las palabras de Savannah me dejaron con la boca abierta. Me senté y la abracé mientras lloraba. No había persona que me entendiera más que ella, ademas de Louis.