Las clases iniciaban, Temari se encontraba en la oficina del director.
- Quiero que me regresen a Suna
- No, usted cumplirá los 5 años del contrató, le faltan 3, no podemos dejar que nuestra mejor maestra de Literatura se vaya.
- Señor Kakashi, cumpliré con el plazo, sólo que ya no quiero alargarlo - golpeó con su palma, el escritorio.
- Si es lo que desea, veré que puedo hacer, no puedo obligarla - cerró los ojos. - Puede retirarse.
- Gracias - salió de la oficina.
Shikadai por otro lado, en lugar de esperar a su mamá decidió dar un paseo, ya que sus clases iniciaban la siguiente semana.
Sin esperarlo notó como todo era diferente, no recordaba el caminó, unas lágrimas comenzaron a salir de sus lindos ojos. Si hubiera obedecido a su madre eso no estaría pasando.
Temari lo buscaba como loca, se suponía que el pequeño se quedó afuera en una banca, ya que ella no tardaría mucho.
Mientras tanto Shikamaru entró al plantel, sorbía tranquilamente su café, antes de llegar a su salón escuchó que alguien lloraba. Así que se encaminó su dirección.
- ¿Estas bien? - preguntó mientras se acercó.
- Yo.. No .. Obe.de.ci a ma..má y ahora.. No ..la encuen..tro - apenas se entendía.
- ¿Que haces aquí?- lo que más le causaba curiosidad era saber como un niño había entrado a esa universidad.
- Mi ma..má tra..baja aquí - sollozaba.
- Te ayudaré a encontrarla - no están muy seguro.
- ¿En serio? - había dejado de llorar - Gracias - secó los residuos de lágrimas.
Al levantarse, Shikamaru pudo observarlo mejor, aquel niño hacía sentir algo en él, cómo si su deber fuera protegerlo, cuidarlo, ayudarle en lo necesario. Además eso no era todo, parecía como si Shikamaru se viera reflejado en el niño, su aspecto, su forma de hablar simplemente todo, a pesar que sus ojos le recordaba a Temari.
- ¿Qué edad tienes? - fue lo primero que se le ocurrió preguntar.
- 5 años, mi mamá dijo que cuando cumpla 6 conoceré a papá - sonrió el pequeño.
- ¿Cuál es tu nombre? - no sabía tratar con niños, pero él era especial.
- Me llamó ... - fue interrumpido.
- Dai ven tu mamá te esta buscando como loca - era Kurenai.
- Lo siento, ya voy - el niño comenzó a correr.
Había algo que no encajaba, no podía seguirlo ya iba tarde a su clase. Comenzó a caminar, su mente no sacaba al chiquillo, le pareció extraño, hace 5 años él se había ido, hace 5 años nació el pequeño.
Entró a su primera clase, no estaba concentrado ese niño tenía algo que parecía familiar. Dai al parecer su nombre era ese, podía jurar que si no fuera por sus ojos esmeralda aquél pequeño era un clon. Pasó rápido el tiempo.
- Bien nos vemos la próxima clase - salió del salón.
Shikadai por su parte caminaba en el patio, su abuela salió ese día pero volvería pronto, su mamá tenía clases así que hicieron un trató para no volver a llevarse un susto.
- Hey - Shikamaru se acercó.
- Hola, Kunerai-san me llevó con mi mami gracias por ayudarme - sonrió el niño.
- Mi nombre es Shikamaru Nara- se presentó, el niño soltó una carcajada.
- Que problemático - mencionó al calmarse - Mi nombre también inicia con Shika - el niño era listó a pesar de su edad.
- ¿Cuál es tu nombre? - las cosas cada vez iban más raras.
- Shikadai, ¿puedes ser mi tío Shikamaru?- preguntó inocente.
- Claro, me gustaría conocer a tu mamá - todo sería más claro.
- Esta ocupada, tal vez luego - pensó el niño - ¿Usted conoce a papá?
- ¿Porque habría de conocerlo?
- Pues... Pues ... Tía Ino lo conoce, pensé que usted también
- Ino así que la conoces - recordó que le debía una disculpa.
- Sí es muy amiga de mamá, también de papá - suspiró el pequeño - Me alegraría que mi papi sea cómo usted
- No lo creó, solo me has visto una o dos veces
- Shikamaru debo hablar contigo - Kurenai se acercó. - Dai juega en el otro patio - decía dulcemente, el niño sólo asintió para luego alejarse.
- ¿Qué pasa?
- No puedes casarte, en serio, digamos que hay algo que no sabes, es importante, yo no soy la indicada para decirlo debes esperar esa persona se esta preparando - estaba molesta - Sabes muy bien que no amas a esa tal Shion, tu bien me lo dijiste "estoy enamorado de Temari jamás me sentí así".
- Temari es cosa del pasado, no creó volver a verla, no entiendo porqué todos están en contra de que me casé
- Sabes te faltó "que problemático", con Shion estoy casi segura que no eres tú, cambias tu forma de ser - se dio la vuelta - Si quieres hablar con Temari esta más cerca de lo que puedes pensar, es más te puedo asegurar una cosa - comenzó andar - esta semana te toparás por error con ella.
- Aunque la encuentre nada cambiará- bostezo- porqué todo el mundo creé que si vuelvo a verla cambiará todo
- No creemos, lo aseguramos
Kurenai se alejó del Nara, tenía muchas cosas en que pensar, está dijo que Temari estaba cerca, sólo podía significar una cosa, ella se encontraba en Konoha.
En cualquier momento la encontraría, para poder olvidar el pasado debía enfrentarlo. Sólo que temía una cosa, sus labios, quería volver a sentirlos cómo la primera vez.
Temari esa rubia volvió adueñarse de su mente, de hecho jamás la pudo olvidar. Si ella fue la única persona que lo hizo creer que el amor, recordó él día que amaneció junto con ella, por un pequeño instante pensó lo hermoso que seria si ella fuera su futura esposa. De nuevo comenzó a soñar.
- Que problemático - aquella frase olvidada volvía a sus labios.
Lo primero que se le ocurrió fue volver a buscar al niño, tenía una hora libre, fue a donde Dai se había dirigido pero ya no estaba.
Vago por el patio lo que restaba de la hora, una cabellera rubia se le hizo familiar, ¿no podía ser ella o sí?.
- Temari - gritó sin pensar, la rubia volteó a verlo.
- Shikamaru lo siento - en definitiva era ella - No me vuelvas a buscar, si quieres ser feliz no lo hagas
- Que problemático - suspiró - Pero tengo de muchas cosas de hablar contigo
Capítulo nuevo... Ehh
Gracias por su paciencia. También por sus votos y comentarios, al acabar esta historia reanudare una pendiente de llama 'Doctora Corazón'.

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Tal Vez ... #NarutoAwards
FanfictionPorque tal vez sólo tal vez ella se había enamorado Shikatema ... Ella no sabía lo que sentía por aquel vago, intentaba llenar su mente de excusas diciendo que no sentía nada, pero ese día lo cambió todo; el día que despegó ese avión. Agradezco la p...