Nuevo Comienzo [EunHae + 18]

6. Nuevo Comienzo

Donghae POV

Despertar junto a ti, pero se siente tan diferente ésta vez. Ése lugar que siempre te ha correspondido sigue intacto, nunca logré llenarlo en tu ausencia y me parece impresionante cómo consigues que la cama deje de estar vacía, ya no siento que me ahogo en un espacio inmenso que jamás iba a ser llenado con mi pura presencia. Lo primordial es que ya no está presente esa horrible sensación, ésa constante opresión en el pecho, has vuelto a llenar el espacio más importante que te otorgué desde el primer día que conversamos, ése que siempre te corresponderá sólo a ti, el espacio en mi corazón. No voy a mentir diciendo que me siento perfectamente, es muy rápido para eso, pero creo que al fin voy por buen camino, a diferencia de lo terrible que estaba cuando me aventuré a vivir sin ti.

Anoche nos quedamos conversando hasta pasado la una de la madrugada, así que nos fuimos a dormir relativamente temprano. Siento que contigo aquí, al fin tuve un sueño reparador, -cómo jamás logre tenerlo durante todo el año- por lo mismo ya me desperté, mi cuerpo está descansado por haber dormido las horas necesarias.

Te estoy mirando fijo, hace tanto tiempo que no te veía dormir, siempre has sido el más bello a mis ojos, siempre he dicho que tus labios lucen aún más hermosos y apetecibles cuando recién despiertas, no puedo contenerme más y guiado por mis impulsos te beso. Mi corazón corre desbocado y dichoso.

Justo cuando termino de besarte te despiertas y murmuras: —¿es un sueño o me estabas besando?—

Te aventuras a abrir un ojo y me ves sonriéndote. Una sonrisa verdadera al fin, es un acto reflejo, esa alegría que recorre mi cuerpo porque extrañaba tu voz adormilada, porque he extrañado todo de ti por demasiado tiempo y me estremezco por comprender cuán inmenso es mi amor por ti. Quiero llorar de felicidad, saltar y bailar todo al mismo tiempo porque estás de vuelta y me has prometido luchar por nuestro amor. Pero en vez de eso, me acerco a ti y beso tu nariz tiernamente.

—No era ningún sueño. Tus labios siguen siendo los más irresistibles para mí al despertar—.

Me miras con avidez, ése brillo que no tenías hace unas horas frente a mi puerta, ahora es más palpable que nunca. No alcanzo a aburrirme de hundirme en esos ojos que me hipnotizan, cuando estás sobre mí besándome como si se te fuera la vida en ello. Incluso sin abrir los ojos siento que estas sonriendo entre el beso. Es un beso tierno, cálido y apasionado, es nuestro momento lleno de magia. Cuando nos detenemos por aire y me disponía a comenzar un nuevo beso yo ésta vez, me susurras a tan solo centímetros de mi boca:

—Te amo— y me lo repites una y otra vez mientras me besas por todas partes como si con cada beso estuvieras adorándome con los labios y sanando mis heridas.

—No nos separemos nunca más— y sólo ahí detienes tu camino de besos, haciendo que abra mis ojos. Haces una pequeña pausa para mirarme directamente y decirme: