Las chicas no son para mi...

INVIERNO

H.

Cuando tocaba tu alma me sentía tan pequeño, amaba acariciarte así aunque me rompías pues en ese momento todo cobraba sentido.

Recuerdo a mis amigos y amigas decir que estaba equivocado, pero yo solo quería que dejaras de llorar, como, como se supone que te iba a echar.

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Me sentí tan pequeño muchas veces mientras tú llorabas en mi cama, tratando de respirar "las chicas no son para mí". Si tan solo me hubieras contado Lou, yo hubiera hecho de todo por salvarte.

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Al llegar diciembre estaba emocionado, tu cumpleaños se acercaba.

Pedí que nos viéramos ese día, te negaste, querías estar con tu familia.

Prometimos vernos un día después, antes de partir me besaste con lágrimas en los ojos

"Los chicos son para mí y eso me hace feliz, gracias Haza"

Fui tan feliz, pues en la última semana tú y ella no se vieron, creí que ahora eras solo para mí. Incluso bromee contigo

"suelta mi mano o no podré irme bebe, prometo llegar a tiempo mañana" – Es lo último que te dije.

Poco después de que desaparecieras de mi campo de visión recibí un mensaje tuyo.

"Tus manos y labios me ayudaron en el pasado, siempre estuviste conmigo. Gracias a ti descubrí que las chicas no son para mí. Recuerda que te amo pequeño Hazza"

Estaba tan feliz, reiterabas nuestra promesa de amor. Reafirmabas que ella no era nada para ti.

"Cariño nos veremos después. Solo sigue caminando, mira las estrellas, respira, brilla como solo tú sabes, pero sobretodo vive, vive por el que no lo hará"

Creí que hablabas de algo diferente, nunca supe lo que tus palabras siempre escondían, sobre lo que siempre mentían.