Camila POV Lauren y yo nos alejamos un poco después del beso y, ¡Dios! Jamás me había sentido así de feliz en mi vida
-Eso fue...- Dijo ella
-Wow...- conteste
-Supongo que, bueno, deberíamos volver ya
-¿Por qué?
-Es solo que.. Se está haciendo tarde
-Lauren, ¿hice algo mal?
-No, Solo que...- Se quedó pensando un segundo y después me miró.- Vámonos, ¿si?
Lauren comenzó a tomar las cosas que estaban sobre la arena y se colocó los zapatos. Yo hice lo mismo y comenzamos a caminar devuelta a la moto.
Todo el camino hubo un silencio algo incómodo y yo no podía dejar de pensar que había arruinado algo con Lauren. Pero no entendía porque, quizás el beso había sido realmente malo, pero era mi primer beso; no tenía experiencia en eso, así que era razonable.
Pero si había sido tan malo ¿por qué Lauren sonrió cuando nos alejamos? ¿Y por qué sus ojos brillaban de esa forma? ¿O acaso me lo imagine todo? Quizás así era.
Al llegar frente al edificio de mi departamento, baje de la moto y espere a que Lauren hiciera lo mismo. Pero solo se quedo sentada en la moto con la vista al frente.
-¿Lauren?.- Le hable sacándola de una especie de trance al que había entrado.
-¿Eh?
-¿Estás bien?
-Claro, estoy genial.
-¿Quieres pasar?
-No, nos vemos el lunes, ¿de acuerdo?
-Lauren yo...
-Adiós, Camila.- Me interrumpió y se fue.
Subí y entre a mi apartamento algo... no, algo no, demasiado confundida. ¿Qué demonios había pasado?
-¿Mila? ¿Eres tú?.- Gritó Dinah desde la cocina
-Eh.. Si
Dinah salió con un delantal y se dirigió a donde me encontraba hasta ponerse frente a mí.
-¿Por qué traes eso puesto?
-Bueno, estaba viendo un programa de cocina y quería intentar preparar lo que estaban cocinando.
-¿Y qué tal?
-Bueno, quizás necesitas ordenar un nuevo extintor y comprar unos sartenes nuevos
-¿Enserio?
-¡Oye! Soy solo una chica linda y popular, tampoco es que sea una experta en todo.
-Lo sé, hasta el agua terminas quemando cuando estás en una cocina, y pensaba que eso era imposible
-Pues ya vez que todo es posible.- Le di una sonrisa débil y debió haber notado que algo andaba mal- ¿Qué tal tu cita?
Baje la cabeza y suspire, comencé a caminar y llegue a la cocina, me senté en un banco que había a un lado de la barra.
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