Leyes de Newton:
Para hablar sobre el movimiento de un cuerpo, es básico conocer los tres pilares fundamentales de este: las gloriosas leyes de Newton. Basándose en estas y trabajos de Galileo Galilei se pudo sentar las bases de la mecánica clásica, rama que estudio las leyes para cuerpos macroscópicos, en reposo y que presentan velocidades bajas, comparándolas con la velocidad de la luz (300.000 km/s)
Primera ley o ley de inercia:
En ausencia de fuerzas externas, un cuerpo tiende a permanecer en su estado de reposo o movimiento rectilíneo uniforme, (MRU) que es lo mismo. Esto se debe a la inercia (manifestada por la masa) que es la resistencia que ofrece un objeto a cambiar su estado ya sea este de reposo o movimiento. Al mover objetos, notemos que en algún momento terminan frenándose. Galileo propuso que esto se debía a diversos factores externos como el rozamiento con el suelo o con el aire y hasta la fuerza de gravedad que modificaban el estado del cuerpo. En ausencia de todos estos factores, el objeto permanecería en su estado original
Segunda Ley o ley de fuerza:
Esta ley es fundamental en dinámica y establece que cuando un cuerpo no se encuentre en reposo, es porque sobre él están actuando fuerzas. Estas son las interacciones capaces de cambiar el estado del objeto y dependen de su masa (por lo cual también dependen de su inercia) La relación establecida en esta segunda ley queda plasmada en la ecuación
F= m.a
Siendo F fuerza, m masa y a aceleración
Tercera ley o ley de acción y reacción:
Esta ley es, de las tres, probablemente la más famosa. Determina que cuando un cuerpo A ejerce una fuerza sobre un cuerpo B, el A recibe una reacción de igual intensidad y dirección pero diferente sentido. Mejor explicado con gráficos y ejemplos, pero no aburrirnos con lo técnico. Si me subo a unos patines (cuerpo A) y empujo una pared (cuerpo B) , es muy probable que me mueva hacia atrás (como muestra la foto) En este caso, yo sobre los patines me encuentro ejerciendo una fuerza en dirección a la pared y a su vez la pared manifiesta una fuerza de igual intensidad y sentido pero en dirección hacia mí.
(No encontré gráficos en Internet así que tuve que hacer este. Insultos hacia las proporciones de los brazos del pobre patinador o revoque dela pared, abstenerse)
Actualmente se sabe con certeza que todas estas leyes y las cálculos que conllevan son meras aproximaciones, lo suficientemente buenas como para llevarnos a la Luna, pero no exactas. La razón es la siguiente: en sistemas que se mueven a velocidades cercanas a la de la luz, las leyes no se cumplen al pie de la regla y se necesitó nueva física para describir estos acontecimientos
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Física clásica (Dinámica de los cuerpos)
AléatoireUn poco de física clásica, lo bastante buena para llevar al hombre a la luna pero no exacta.