Capítulo 1

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"RING RING RING"

La alarma ya estaba sonando como cada día de la semana desde que había aceptado hacer ese estúpido trabajo para ganarme un poco de dinero y así poder irme de vacaciones sola, sin mis padres. La idea que habían planeado mis amigos era tan tentadora que no esperé más y empecé a buscar algo enseguida, pero ahora que tengo que madrugar y estar toda la mañana de un lado a otro colocando vasos y platos sucios, no me hace tanta gracia.

Me quedé en la cama con los ojos cerrados, disfrutándo de unos pocos segundos antes de levantarme. Suspiré y me froté los ojos, me senté en la cama y a paso de tortuga me empecé a vestir. Unos pantalones cortos vaqueros y una camiseta de tirantes blanca sería suficiente para no pasar tanto calor, ah, y una rebeca por si refresca, que seguro que lo hace, total, son las 7 de la mañana y aún ni ha salido el sol.

Me puse mis bambas, desayuné un café bien cargado, terminé de arreglarme y me dispuse a salir por la puerta.

Pasaron 20 minutos hasta que llegué al bar del tío de Cleo.

- ¡Hola Esperanza! Buenos días, guapa. ¿Preparada para llevar el bar hoy? -Paco, el dueño, siempre tenía una sonrisa, ¡incluso por la mañana bien temprano! ¡No me lo explico!

- Buenos días, Paco. ¿Llevar? ¿Te vas a algún lado?-

- No me digas que te has olvidado... Hoy tengo que ir al almacén a por más bebida y como sabes, está en Zaragoza y llegaré por la noche.-

Se me había olvidado totalmente que iba a tener que estar toda la mañana sola y tendría que aguantar a más de un pesado. ¿Por qué justo hoy que quería hacer un poco el vago?

Puse mala cara.

- Es verdad... Bueno, pues me encargaré de llevarlo hoy.

- Venga, ¡no me pongas esa cara! Que como sé que estas noticias no te gustan un pelo, le he dicho a Cleo que se pase un poco a ayudar, ¿te parece?

Almenos no me aburriría tanto...

- Ah, ¿sí? Pues genial. Y ¿a qué hora viene?

- Vendrá en una media hora, le he dicho que madrugue un poco.

Empezó a despejar el maletero del camión en las puertas del bar y se subió.

- Bueno, Esperanza, ya sabes, si aparece alguno que aún no se haya acostado, intenta echarle amablemente, no quiero líos.

- Claro, Paco. Buen viaje.

Me dio las gracias y nos sonreímos mutuamente.

A la media hora, como dijo Paco, aparece en la puerta una cabellera larga y morena, Cleo ya estaba aquí y tenía la misma cara que yo cuando he venido. Es decir, muerta de sueño.

- Ey, cari. ¿Qué tal?

- Hola Cleo, ya veo que te han obligado a venir, menuda cara tienes. -Me reí un poco.

- Sí, jajaja. Esque es muy pronto, pero ya sabes, que si es para ayudarte, estoy aquí enseguida.

Me sonríe, tan dulce como siempre. Y esque era monísima, no me explico cómo no tiene novio. Morena, de pelo y de piel y un cuerpo muy delgadito. No digo que yo no sea guapa, para nada, creo que soy mona, tengo mis curvas, alta, también soy morena y ojos verdosos. Aunque por ahora, de novios nada. No quiero ninguno, me reservo para que este verano pueda hacer lo que me de la gana. Sin preocupaciones.

- Ois, mi Cleo. Bueno, ¿qué tal ayer?

- Nada tía, salí de la fiesta sobre las 12 y me fuí a casa, pero un chico muy mono me pidió el número y, nosé, se lo dí, no quería arrepentirme...

- ¿Cleo dando el móvil a un chico? ¡Eso sí que no me lo creo!

- Pues sí, yo también estoy sorprendida, pero ya ves.

- Tía, qué raro, pero bueno, si estaba bien, a ver si te llama y tiene algún amigo para mí, jajaja.

- Jajaja, claro, claro. Yo le pregunto cuando haya confianza... si me llama, que esa es otra.

- Venga, seguro que sí. No te pediría el número para luego no darte un toque.

- Bueno, a saber. Tenerlo lo tiene, asique ya sabrá lo que hace.

- Que sí, ya verás. Bueno, venga. Vamos a colocar un poco esto antes de que llegue la gente.

Terminamos la mañana agotadas. Eran las 2 y media y se supone que dentro de poco vendrían las de turno de tarde, así podríamos salir de aquí.

- Oye, te apetece que encuanto salgamos, ¿vayamos por ahí a comer? Aviso a Ainhoa y que también se venga.

- Sí, me parece bien. Podemos ir al burguer. Díselo ya, porque por ahí vienen las otras camareras.

Yo asentí, saludamos a las dos chicas que se encargarían del bar y salimos.

Le mandé un whatsapp, estaba conectaba.

"Hola, guapa. Te vienes a comer con Cleo y conmigo?? Acabamos de salir del bar y ya estamos cerca del centro"

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Bueno, hola guapos. Esta es mi primera novela, ya sé que el principio es un poco rollo, pero según vaya avanzando la historia habrá amor, líos y personas nuevas.

Gracias a los que leaís la historia, que serán 3 contados pero bueno, jajaja.

Un beso!!

En plena adolescenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora