Cap.3

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Marry despertó estaba en la misma habitación del inicio solo que esta vez no había sangre, ni muñecas, ni ese gato extraño.

Marry:- Entonces ¿todo fue una pesadilla?, pero... todo se sentía tan real.

Se colocó las manos frente a su cara y dio un suspiro.

Marry:-Tengo que encontrar a alguien que me diga en donde estoy o que hago aquí.

Marry se levantó de la cama un poco mareada y con un fuerte dolor de cabeza;
Al investigar la habitación e inspeccionar mas a fondo, se dio cuenta de que en el cuarto, misteriosamente había desaparecido la puerta y las ventanas.

La niña obviamente estaba sorprendida y empezó a asustarse, sin tiempo que perder comenzó a revolotear toda la había en busca de una salida.

La niña reviso todo lo que pudo debajo de la cama, en el armario hasta en todos los cajones en busca de alguna herramienta que la ayudara a escapar, al final no encontró nada y como último recurso Marry comenzó a gritar.

Marry:- ¡AYUDA ALGUIEN, NO PUEDO SALIR!

Pero al poco rato se dio cuenta de que nadie más que el aire la escuchaba; De repente de por debajo de la cama comenzó a salir un gas de color morado.

Por alguna razón instintiva, Marry presentía que era peligroso y sus sospechas fueron confirmadas, cuando un pequeño ratón salio de por detrás del armario.

El ratón al sentir la presencia de Marry salio corriendo, el pobre desdichado se ha cerca a cada vez más al gas, aunque fuera un animal, de seguro hubiera preferido millones veces ser devorado por un gato, que por lo menos eso acabaría rápido con su sufrimiento rápidamente.

Y así Marry contemplo como el ratoncito se acercaba cada vez más y más hasta que se topó con el, antes de que pudiera reaccionar el ratón lanzo un chirrido ensordecedor y se tiró al suelo.






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