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El nombre elegido

        Ya había transcurrido mas de una semana desde el nacimiento de la niña, y sus padres ya habían decidido el nombre que le iban a poner, fueran tantos los acontecimientos posteriores al parto, que los dos no habían tenido tiempo de llegar a un acuerdo, pero cada uno por separado había elegido un nombre y después de mucho dialogar habían decidido que se llamaría Norma Cristina.

     Norma proviene del latín, significa modelo y Cristina es originario del griego, la variante femenina de cristo, ellos habían elegido Cristina por que la niña había venido al mundo el mismo día que el creador." Norma Cristina el modelo de cristo".

      NC era la cuarta hija, ya de por si un numero marcado por muchos enigmas , según todo lo relacionado a las  supersticiones el cuatro podría ser tan macabro como el trece y si fuera poco, había lo de la maldición, la niña era hermosa, y muy inteligente, dueña de una mirada acaparadora, pero algo no encuadraba, era como si hubiera una nube negra  sobre su cabeza, que hacia con que todo a su alrededor fuera mal, la pareja no había pasado por nada semejante con ninguno de sus anteriores hijos, pero sus padres tampoco habían relacionado las desgracias con el nacimiento de la niña, para ellos los hijos eran una bendición, y fueran bendecido muchas veces.

     NC era el orgullo de su madre, una niña muy precoz, empezó a andar antes mismo de cumplir un año, y a los 2 años ya era capaz de dialogar como una niña de cinco, tenia una contestación para todo, y opinaba de forma muy coherente para su corta edad, sin embargo su infancia fue de lo mas normal, hasta que su madre se quedo embarazada, para eso entonces Norma tenia siete años y el embarazo de su madre desencadeno un serie de acontecimientos, haciendo con que el mal que la niña llevaba enraizado dentro, en el mas profundo de su ser empezó a aflorar.

   Los cielos y el miedo de perder el amor que le propinaba su madre, hizo con que Norma odiara a esa criatura que aun mismo antes de nacer ya monopolizaba el amor de su madre, abarcando así lo que era antes suyo por derecho

  Con el pasar de los días Norma empezó a mostrarse rebelde Y reacia ante la posibilidad de perder todo lo que ella conocía, a medida que el vientre de su madre desarrollaba, mas crecía el odio de la niña, Norma era incapaz de aceptar la idea de que este niño le iba quitar el amor de su madre  ya le estaba arrebatando su atención, sus demás hermanos nunca fueran para ella una preocupación, no había ni siquiera un ápice de rivalidad entre ellos, para todos ella era su princesita, al ser la pequeña recaía sobre ella todo los mimos de la familia, sus padre y sus hermanos le adoraban, pero ahora todo giraba entorno del bebe que su madre esperaba, todos estaban ilusionados y NC se sentía en un segundo plano. 

      La familia llevaba un par de años intentado salir del agujero negro que se habían metido, José llevaba trabajando como un poseso para sacar su familia y el negocio adelante, con una familia tan numerosa el estaba dejando la vida en el proceso, trabaja de diez a doce horas por día, estaba exhausto,  pero ahora no era el momento mas propicio para tirar la toalla, tenia un nuevo ser a camino, creando forma en el interior de su mujer, y eso era justo el impulso que él necesitaba para seguir adelante, esa criaturita dependía de él y nada le hacia mas feliz como saber que era importante que de su trabajo y esfuerzos dependían otras personas.

    José parecía haber logrado estabilizarse económicamente, pero a cuesta de mucho trabajo y sudor, para él eso era algo normal, había luchado desde pequeño para salir adelante, nunca tuvo una figura paterna para ayudarle así que todo lo que el aspiraba era dar el mejor para su mujer y sus hijos, ni que para eso tuviera que pasar muchos días fuera de casa, en viajes de negocios, le costaba demasiado estar alejado de su familia, pero el como el cabeza de la casa, era él el que tenia que porvenir el sustento de todos.

    Arantxa estaba en la fase final de su embarazo, y con el paso de los días le hacia cada vez mas insoportable la tripa, el calor y si fuera poco tenia que estar a cargo de cuatros niños, aunque la única que le estaba dando trabajo era Norma, su marido llevaba 3 semanas en el exterior, había viajado a Brasil para habilitar la la creación de una nueva franquicia, su vida laboral había dando un giro de 360 grados, se encontraba  en un momento profesional muy prometedor, Brasil había sido electo entre los demás países de Sudamérica por estar en su apogeo en materia de desarrollo, con la economía de Brasil en ascensión era considerado por los inversores una verdadera mina de oro.

   Pero lo único en lo que José podría pensar, era en su mujer, en su embarazo, quería estar cerca y acompañar paso a paso, sabia que Arantxa estaba en la fase final y el no quería perder este momento, mal sabia el lo que le esperaba, después del nacimiento de norma la matrona le había aconsejado a no tener mas hijos, pero nunca supo el motivo por lo cual la mujer le dijo eso, nunca tuvo la oportunidad de hablar con la mujer, ya que la misma había llegado a óbito después de sufrir un infarto,  el y su mujer habían ido a varios médicos y ninguno de ellos revelaran algún problema o enfermedad que imposibilitara a el y a su mujer tener otro niño, pero desde el momento el que su mujer le notifico el embarazo, él no pudo dejar de hacerse preguntas y una de ellas era si su mujer tendría o no complicaciones en el parto. noooo..se dijo para si mismo, y  se deshizo de estas ideas antes mismo de que ellas cobraran forma, pero tenia un mal presagio algo pasaría y eso le asustaba, pero lo mismo había sentido con el nacimiento de NC, seria solo preocupaciones de padre,  preocupaciones sin fundamentos.