La Apuesta

Capitulo 07

Hyuk Jae (POV)

-Es en la casa blanca de dos pisos- le digo a Dong Hae

Ya pasan de las 11 de la noche, se nos hizo tarde subiéndonos a todos los juegos mecánicos, pero debo aceptar que me divertí mucho. ¿Quién iba a pensar que Dong Hae sería buena compañía para éste tipo de lugares?

Estaciona el auto justo en la acera de mi casa. Estoy a punto de abrir la puerta, pero apagar el motor y eso me hace girar a verlo un poco confundido.

-Pensé que podríamos conversar un poco...- me dicen mientras me sonríe

-¿Conversar?- frunzo el ceño sin entender muy bien

-Sí...- de pronto una de sus manos se posa sobre mi pierna- hablar un poco de ti, de mí- poco a poco se inclina hacia mí

-¿Cómo que cosa?...- empiezo a sentirme un poco nervioso

-No sé... dime, ¿te divertiste?-

Su mano sigue en mi pierna, pero lentamente empieza a deslizarla de arriba hacia abajo acariciándome. No puedo evitarlo, un leve cosquilleo recorre mi espina dorsal hasta mi cuello. Puedo sentir los vellos de mi cuerpo ponerse de punta.

Su rostro está demasiado cerca del mío, por más que intento, no hay manera de que pueda hacerme más hacia atrás, tengo completamente pegada mi espalda al respaldo del asiento. Su mano libre de pronto mueve el cabello de mi frente.

De pronto me doy cuenta de que mi corazón está latiendo muy fuerte.

-Dong Hae...- digo su nombre un poco ansioso cuando su mano quita los lentes de mi rostro

-Te ves mucho mejor sin ellos- susurra demasiado cerca

-...- no sé qué contestar

Estoy intentando pasar saliva, pero empiezo a sentir mi boca seca. Dong Hae no hace nada, simplemente se mantiene demasiado cerca de mí. No sé porque, pero me descubro bajando la mirada hacia sus labios.

Su labio superior es más delgado, pero muy bien definido. El inferior es más grueso, carnoso. Mi mente se desvía a aquel día en que me besó. No es que lo recuerde muy bien, estaba demasiado sorprendido y asustado.

Doy un brinco muy sorprendido e intento pegarme ahora a la puerta del auto cuando la mano que estaba sobre mi pierna, llega más allá de mi muslo. Ha rozado mi entrepierna, demasiado cerca, y ha apretado lo suficiente para hacerme ver que no ha sido por error.

-No tengas miedo... relájate...- susurra, su mano sigue moviéndose y ésta vez sin pena la pone sobre mi pene por encima de la ropa interior

-¡¿Qué haces?!- pongo mi mano sobre la suya para intentar retirarla

-Relájate Hyuk... solo déjate llevar...- vuelve a susurrar antes de pegar por fin sus labios a los míos

Esto es más de lo que esperaba, estoy muy nervioso, mi corazón se ha acelerado demasiado. Su boca está sobre la mía, succionando, su lengua delineando mis labios buscando que lo deje explorar.

Su mano, ha comenzado a masajear mi pene por encima de la ropa. No es que sea de palo, así que por naturaleza no puedo evitar sentir las caricias, es decir, prácticamente está provocándome.

-Nnnh...- gimo sintiéndome avergonzado

Puedo sentir que los labios de Dong Hae se curvan en una sonrisa al escucharme gemir. Y es como si le hubiera dicho que lo que está haciendo me está gustando, porque entonces su mano desabrocha mis pantalones lo suficiente para sacar mi pene.