THOMAS ABIGAIL
<<¡Maldito!>> Era lo único que podía pensar mientras era victima de una horrible resaca.
<<¿Por qué le dije quien soy a un tipo en quiebra? ¿Por qué no he reportado las tarjetas? ¿Por qué no he llamado a la policía? ¿Por qué no puedo odiarlo? ¿Por qué lloro tanto?>> No podía dejar de preguntarme lo mismo, pero esas preguntas no tenían respuesta, por mas que la buscara. Lo de ayer parecía tan real, el solo recordarlo me estremecía, pero todo fue una mentira, una mentira para usarme y aprovecharme de mi. Si, parecía real, pero no fue así, ¿Cómo me deje envolver por el? Y ¿Por qué aun no hago nada?
Ya se fue del hotel, pago su cuenta anoche, con mi dinero por supuesto y se fue, lo supe por un room service, a quien le ofrecí una buena propina. ¿Era cierto que le gustaba? Seguramente no. Entonces, ¿Qué evita que llame a la policía ya mismo?
Eso es fácil de responder, en USA el numero de emergencias es 911, aquí no se si sea el mismo, y esto no es una emergencia, en todo caso tendría que levantar una demanda en el ministerio publico, pero me da pereza. ¿Por qué no reporto las tarjetas? Solo es una llamada. No lo hago por que quiero creer que alucine y que cuando despierte nada de esto habrá pasado y Víctor estará conmigo. ¿Por qué no le ofrecí mi ayuda? tal vez la hubiera aceptado y no me hubiera robado en cuanto tuvo la oportunidad. No lo hice por que soy un maldito egoísta que solo piensa en mi, en que el me gustaba, ni siquiera intente comprenderlo mejor.
Debo admitirlo... no me duele del todo lo que hizo, ahora mismo el dinero no me interesa mucho, de hecho me da gusto que intente recuperarse a toda costa, eso es de esperarse de alguien fuerte como el. Me alegra saber que de alguna manera conocerme pueda mejorar su vida. Lo que duele de verdad es que... lo extraño.
Es raro extrañarlo, apenas y lo conozco. Pero lo que paso entre nosotros fue único, nunca me había sentido así con ninguna de mis parejas, ni siquiera con mi primer amor. Recuerdo mucho su aroma, y espero recordarlo siempre, ya que no creo volverlo a ver. Mi pijama aun tiene ese aroma, quiero olerla todo el día. Como quisiera volver a verlo.
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La homofobia no existe
RomanceEl protagonista es Dante, un chico que trabaja en un hotel y que nos cuenta algunas anécdotas, sobre todo de los huespedes, esos amores prohibidos de los que pocos sabrán, aparte de los lectores, incluso, y poco a poco entre cada episodio, el suyo p...