Sentía los ojos pesados; hizo un esfuerzo por abrirlos pero fue inútil, intento moverse pero era como si su cuerpo estuviera hecho de piedra impidiéndole realizar cualquier acto que tuviera pensado y, por la razón que fuera, al poco tiempo pudo doblar levemente los dedos de una mano lo cual, de alguna forma, fue un alivio saber.
Escuchó una voz femenina a su costado, aunque no fue capaz de reconocerla, y tampoco de entender en lo absoluto las palabras dichas por esta.
Sintió como un pequeño pellizco en su brazo derecho y, después de unos segundos, comenzó a sentir su cuerpo más ligero.Reintentó el abrir los ojos lo cual logró; lentamente empezó a ver todo blanco, cegandolo un poco en el momento.
-Doctor- volvió a escuchar la voz femenina la cual era propiedad de una enfermera que se encontraba a su lado.-le acabo de aplicar el suero.
-Parece que ya despertaste, Cómo te sientes?- giró lentamente la cabeza a la izquierda, buscando con la vista a la persona que le estaba hablando- tienes sueño?
-...Si...- dijo con toda la fuerza que le fue posible, su voz sonó debil, similar a un susurro.
-No te preocupes y descansa- le acarició la cabeza, pasando los dedos entre su cabello, cerró los disfrutando del tacto, quedándose dormido al poco tiempo.
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-Señor y señora Matsuno- los mencionados se pusieron de pie, en espera de alguna instrucción- Me gustaría hacerles algunas preguntas.- comenzó a caminar en dirección de su oficina pero se detuvo repentinamente aunque no se giró- me gustaría hacerles algunas preguntas también a los hermanos del joven si no es mucha molestia- siguió su andar sin esperar respuesta, siendo acompañado de toda la familia.
Paredes blancas, tres sillas, dos de madera y una giratoria, un escritorio, un computador, un archivero y varios estantes llenos de una gran variedad de libros, en eso consistía la oficina del doctor encargado del chico brillos Matsuno.
-bien, seré directo, Qué tan buena era la relación que mantenían con el joven ? - cruzó los dedos de ambas manos sobre la mesa, paseando la vista en todas las personas frente a él.
-Amo mucho a mis hijos sin importar nada, Karamatsu es un buen chico, me ayuda mucho en la casa y me a pedido que le enseñe a hacer varias cosas- la mujer sonreía mientras hablaba, como si recordara algo, con nostalgia- por ello hay mucha confianza entre nosotros, pero, Porqué? Qué sucede doctor? Mi hijo le dijo algo?
No dijo nada pero comenzó a observar a cada uno de los presentes; la pareja sostenían sus manos entrelazadas como un apoyo mutuo, los hermanos mantenían la cabeza gacha, con la vista en ningún punto en específico y eso llamó su atención.
-No se preocupe, ahora él está descansando, por cierto, Ustedes... será que cada quien tiene un color que lo identifica? Cómo un distintivo al ser sextillizos- los mencionados alzaron la mirada.
-Así es, es como que, si nos acomodamos de cierta manera, creamos un hermoso arcoiris... pero Todomatsu la caga- apuntó con el pulgar al susodicho que se encontraba a su lado.
-Oye!
-Es la verdad! Solo soy un hombre realista
-Y estúpido... - susurró el de verde.
-Entonces, sino me equivoco, la sudadera es de su color representativo, por lo tanto, el color del joven Karamatsu-kun es el azul, cierto?
-Si~ - respondieron en unísono, provocando que el doctor sonriera como consecuencia.
-Escuchen, me gustaría pedirles algo, no usen ropa igual, no importa su color, solo no usen el mismo estilo a la vez, esta bien? - nuevamente no esperó respuesta y prestó toda su atención a los padres que todo el tiempo estuvieron escuchando en silencio- Supongo que tienen espejos en su casa, no?- el hombre asintió con la cabeza, afirmando su hipótesis - podrían ya sea quitarlos o cubrirlos por favor?
- No hay problema, pero, porqué?- se escuchó por fin la voz del señor de familia.
-Solamente me gustaría probar algo, sería como un experimento, ya que, si el joven no los recuerda debe de ser por algo, tal vez su mente se lo prohíbe y, hasta que tengamos en claro el porqué, no hay que atosigar su mente con pensamientos que lo atormentan al no comprenderlos, hay que mantenerlo lo más tranquilo y sereno posible ya que no se ha curado por completo, ni física ni psicológicamente.
~~~~~~~~~
Llevaba un rato desde que despertó, se encontraba sólo en la habitación por lo que solo se dedicó a pensar.
Cómo había llegado ahí?
Recordaba haber estado en la sala de su casa con su padre y su madre estaba en la cocina ya que iban a festejar que fue dado de alta....
Fue dado de alta, eso significaba que había estado antes hospitalizado, pero, porqué estuvo hospitalizado la vez anterior?
-Maldición...- se estaba comenzando a exasperar- Qué es lo que sé? Veamos~ - alzó una de sus manos en puño, posicionandola frente a su rostro - primero, me llamo Karamatsu - levantó lentamente un dedo , comenzando con una cuenta- segundo, mi familia está constituida por mi madre, mi pa-
La puerta se abrió, sorprendiéndolo al instante.
-Perdona por no tocar, al parecer despertaste otra vez- El doctor cerró la puerta después de entrar y luego se sentó en su camilla, a un lado de él- Cómo te sientes? -otra vez puso la mano en su cabeza, era relajante de alguna manera.
-Después de dormir me siento mejor- respondía con los ojos cerrados ya que disfrutaba de la suavidad con la que lo tocaba.
-Bueno, te haré un examen físico y unas cuantas preguntas y después te puedes retirar, esta bien? - retiró su mano y se levantó, observando al chico.
-Está bien- le sonrió, de alguna forma era agradable su compañía- Por cierto, le puedo hacer unas preguntas doctor?
-No me he presentado pero soy el doctor Fukushima, y sí, claro que puedes preguntar,- se acercó a la camilla a ayudarlo ya que vio que se quería sentar, moviendo lo lentamente para que no se lastimara- como que clase de cosas quieres saber?
-Bueno, puede que suene raro pero... Porqué estoy aquí? Qué me sucede?- jugaba con la sábana entre sus dedos-
....Quién soy exactamente?~0~0~0~0~0~0~0
Y aquí lo dejo porque si.
Qué les pareció?
Gracias por ser pacientes con este joven y sensual chico (?)
Gracias por leer
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Quien Soy? (Pausada)
FanfictionVacío. Eso era. Un contenedor vacío. Nadie miraba su interior porque el contenedor no llamaba la atención suficiente. O eso creía él... No era importante para nadie, verdad? Y... Si desaparecía? Alguien lo buscaría? Si se iba del mundo... Alguien l...