Diecisiete

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Después de que la Mini me maquillara dignamente me puse en marcha para la casa del Nico; mentalmente ensayaba lo que le diría

"No pude decirtelo antes, el que me gusta eres tú"

Oh cosas así, súper cursis. Mi corazón se aceleraba a medida que daba un paso en dirección a la casa del Nico, fui lento por el nerviosismo, pero igual llegué, obviamente.

Toqué la puerta y esperé, pero al segundo me arrepentí porque se me hacía, pero ¿que sería lo peor que podría pasar?, ¿que esté con la Claudia o con el Jaime?

Oí que la manilla de la puerta se daba vuelta y mis ganas de salir corriendo se apoderaban de mi, pero me pude controlar y miré al Nico que se asomó al abrir la puerta.

¿Qué haces aquí?—preguntó, que frío—.

Vengo a aclararte algo.—respondí—. ¿Podemos seguir hablando?

Estoy ocupado ahora, pero ya hablamos, discutimos lo que teníamos que discutir.—dijo mientras se entraba poco a poco—. Chao.

Iba a cerrar la puerta pero puse el pie, evitandolo y empujé la puerta para entrar por las malas, pero no me gustó nada lo que vi.

_______, estoy ocupado con la Claudia.

Mi mundo se derrumbó.

POV Nico

Puta que me sentía mal, esta mina lo único que había hecho era confundirme, parecía que le gustaba y después que no, no sé si tengo pena porque no le gusto, rabia por confundirme, alivio porque por fin le pude decir lo que quería, pero me siento mal. Llegaré a mi casa y me encerraré todo lo que queda de día... Ah no ser...

Nico—oí al llegar fuera de mi casa y subí la mirada—.

Claudia, ¿qué pasa?

Necesito hablar contigo.

Abrí la puerta y la hice pasar, nos sentamos en el sillón que quedaba más alejado de la puerta de entrada.

¿De qué tenemos que hablar?—pregunté, ella se mantuvo unos segundos en silencio—.

De todo esto... No sé si no te dabas cuenta o no te importaba, todos esos días en el liceo trataba de llamar tu atención, acercarme a ti... Reunía mucho valor para poder hablarte, y... Nico tu me gus...—golpearon la puerta, interrumpiendola—. Ve a abrir no más—bajó la mirada—.

Me paré como perkin y aweonao que soy y fui a abrir, ¿quien podría tocar justo ahora?

¿Qué haces aquí?—solté al ver a la _______ parada frente a la puerta—.

Vengo a aclararte algo.—respondió—. ¿Podemos seguir hablando?

La pensé, pero me acordé que estaba la Claudia, no soy tan maricón.

Estoy ocupado ahora, pero ya hablamos, discutimos lo que teníamos que discutir.—dije mientras iba cerrando la puerta—. Chao.

Casi la cierro del todo y la _______ puso el pie, evitándolo, y empujó la puerta con la fuerza suficiente para abrirla y pasar, si igual no le puse tanta resistencia, en una de esas le reviento la pata. Entró y quedó petrificada al ver a la Claudia.

_______, estoy ocupado con la Claudia—dije acercándome a ella—. Después hablamos.

Bajó la mirada y se puso una mano en la cara, retrocedió un poco hasta que quedó fuera del rango de visión de la Claudia y se arregló el pelo con ambas manos.

Me gustai—dijo de repente con la voz temblorosa, me está weando—.

-¿Y ahora...

-Pero bueno ya da lo mismo, olvidalo, adiós.

Se dio la vuelta y salió rápidamente por la puerta así sin más.
¿Qué hago?
¿La sigo y dejo a la Claudia?, ¿me quedo a escuchar lo que me estaba diciendo?

Claudia—dije asomándome donde ella estaba-, Vengo altiro, no te vayas.

Finalmente salí corriendo tras la mina que sólo me confundió, jugó conmigo y me hizo ilusionarme. La alcancé fácilmente y la tomé por el brazo, pero se resistió a mirarme.

Sueltame Nicolás Ignacio—dijo tratando de soltarse-.

Diciéndome así no lograrás que te deje—le respondí atrayendola hacia mi—.

Ya po, sueltame...—dijo resistiendose cada vez menos..

Si de verdad quisieras que te soltara ya lo habrías hecho—dije y mantuvo la mirada hacia abajo, pero pude darme cuenta que las lágrimas que estaba reteniendo—.

Ya te dije, ahora dejame sola—dijo tapándose los ojos con la manga de su brazo libre—.

Repitelo—le dije, no respondió así que volví a decírselo—. Repitelo.

Ya te escuché conchetumare—sutil—, si ya lo dije, ¿pa que que querí que lo repita? tú sólo vete donde la Claudia, te merece más que yo, se la ha jugado por ti —la voz se le quebraba—, el Jaime tenía razón cuando decía que la tenías que escoger a ella.

_______, porfavor ya para...

—Y más encima la dejaste sola weon, por una weona como yo, ella no se merecía esta wea —había coherencia en las weas que decía—, no entiendo como no estai corriendo donde ella...

Repite la wea que dijiste en mi casa— la interrumpí y se destapó los ojos, las lágrimas comenzaban a caerle rápidamente..

¡Que me gustai! ¿¡por qué tengo que repetirtelo!?

Y ahí fue cuando le chanté el beso.






















La próxima actualización es el final.♡

Just the girl《Nicolás》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora