De pequeña, el amor lo eran: las mentiras de papá a mamá y las escapadas de mamá a -según ella- al trabajo.
Entonces crecí y me pregunté qué era realmente el amor ¿El invento de un escritor? ¿Alguien alucinando? ¿Era acaso un objeto?
Y lo conocí, con una hermosa sonrisa y ojos extrañamente profundos. Desde entonces, esa fue mi definición de amor.