Si me vas a amar, ámame. Si vas a jugar con mis sentimientos, mejor ni te acerques.
Eso solía decirte aquella noche, en dónde solo éramos tú y yo, entregados en un sólo cuerpo, olvidados en el firmamento, atrapados en la agonía de nuestros besos.
Tu piel y la mía no encontraban lugar, sólo el deseo apagaba ese fuego que nos ardía por dentro haciéndonos estallar. Las caricias nunca nos llegaron a faltar, los cuerpos sudados y estremecidos por el placer llegaron a ser nuestra única salida, esa en dónde nuestra esencia y la luz de la luna eran más que testigos.
Te amo. Se escuchaba en susurros. Tu aliento cálido y de aroma agradable hacía vibrar cada partícula dentro de mi ser. Tus besos eran de esos, que quemaban, te juro que sí llegué a quemarme, y no sólo con tus besos que sanaban mis partes rotas, sino también con esos ligeros toques que me hacían volar hasta lo más profundo del inmenso firmamento. Me encantabas, de eso no había duda.
Dime pasión ¿A dónde te has ido? ¿A dónde te lo has llevado, dulce amor?
Con mis partes aún rotas, sigo recordando aquellos momentos en los que nos llegamos a sentir vivos, es imposible olvidarte, no sé si lo sabes.
Profundos sentimientos encarcelados y envueltos en la nada, son los que ahora me acompañan, dulce amor.
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Sintiendo el Sentimiento
PoetryEmociones atoradas, palabras mudas, sentimientos rotos. Letras nunca antes escritas, y pensamientos que se han ido lejos con el viento, pero que aún los llevo tatuados en el corazón. Una entrega más de mis cursilerías, no me culpes, así soy yo. ...