Yūgao estaba sorprendida, una parte del examen Chūnin que el Hokage nunca menciona es que en este mes se tiene que estudiar a sus adversarios para que pudiera pasar aunque no ganaran, muchos de los Genin en los últimos tiempos no lo hacían, solamente veían su propia fuerza y no les importaba nada más.
Y aunque era bueno estar preparado de ese modo, también tenían que tener información que podría hacer tu trabajo más fácil, después de todo eran ninjas y su principal trabajo era conseguir información que la gente no quería que otros supieran.
– ¿Y has estado saliendo en citas con ella solo para eso? – preguntó nuevamente divertida porque Naruto no viera lo que de verdad estaba haciendo, sabía que el pobre chico no había sido educado correctamente y desconocía algunas cosas básicas sobre la interacción entre dos personas, en especial entre personas de diferentes sexos, pero no esperaba que tanto.
El pelirrojo se sonrojo y abrió la boca para responder aunque enseguida la cerro nuevamente – ¿hemos estado saliendo en citas? – preguntó asombrado.
La chica se rió escandalosamente mientras veía al pelirrojo volverse del mismo color que su cabello – creo que has estado teniendo citas con todas las chicas desde hace un par de semanas, pero parece que Temari está ganando terreno rápidamente.
Naruto abrió los ojos y boca otra vez – no eran solo salidas para distraerse – se quejó al ser burlado de ese modo.
– Estaba más que claro que no eran simples salidas para despejarse – mencionó la chica divertida – bueno las que hemos salido todos juntos, esos sí, pero cuando vas solo con una chica, eso en una cita.
Abrió la boca para responder y se quedó quieto asombrado – he salido en citas con Sakura-chan – susurró en éxtasis – y ella no se quejó.
Yūgao rodó los ojos, sabía que la peli rosa llevaba la delantera en ganarse el corazón del chico desde hace tiempo, pero parecía que Naruto había dejado de lado esos sentimientos, por eso Sakura se esforzaba tanto en llamar la atención del despistado chico que Naruto otrvez ledava la ventaja .
Pero ahora parecía que en verdad Naruto solo estaba intentando que sus sentimientos no se notaran para hacer feliz a la chica, todas sabían que tanto Sakura como Ino antes estaban desagradablemente obsesionadas con el Uchiha.
– Bueno tengo que volver a la sede AMBU, supongo que nos veremos en la final, vamos a comenzar a duplicar rondas para mantener la seguridad en la aldea – luego sonrió macabramente – intenta invitar a las chicas formalmente, nos vemos.
Desapareció en una nube de polvo y hojas mientras se reía de la cara de Naruto. Se quejó un momento con la cara tan roja que podía servir de fogata y comenzó a caminar pensando en lo que había aprendido, la sensación de que problemas se avecinaban siendo ignorada por el momento.
Tosió un par de veces mientras se ajustaba el chaleco de la aldea para conservar el calor, ese día no le tocaba el turno nocturno pero había apostado con su amigo y había perdido, por lo que no había más remedio que trabajar doble turno sin paga.
Para empeorar las cosas se suponía que ese era el último día tranquilo de su novia y no podía pasar con ella por estar en el frio vigilando que nada que perjudique a la aldea suceda.
Más aún cuando cinco aldeas ninjas estaban allí, podían estar con permiso dentro de la aldea pero eso no negaba el peligro que representaban.
Por un par de meses habían tenido que estar en completa guardia, por lo menos nada había pasado y parecía que las cosas terminarían bien para todos, con unos cuantos Genin muertos gracias al examen, pero era bastante normal en un pueblo ninja.