Mente Criminal©

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Ayuda

Louis dejo su plato en la mesa del comedor de su departamento, mientas Gideon estaba sentado en la misma mesa con el pequeño Eddie en sus piernas.

—Tienes tus ojos—Habló sin dejar de mecer al pequeño.

—Eso dicen...—Louis alzo las cejas mientras servía ensalada en los platos.

—A nadie le dicen como ser padre, Louis— Lo miro—. Sé que es difícil pero aprenderás a quererlo.

—Sí lo quiero, sólo no me acostumbró a tener alguien que depende de mi al 100%, apenas puedo con migo mismo.

—Tiene mucho que no cargaba un bebé, son tan inocentes... Un bebé que apenas respira, que apenas tiene sensibilidad en sus miembros no sabe nada de la muerte.

—Siempre tienes alguna frase inspiradora—Ambos sonrieron.

Louis le dio el plato a Gideon, tomo a el pequeño Eddie y lo colocó en la cuna portátil que estaba a su lado.

Louis suspiro y se preparo para decir—: ¿Porqué dejaste la UAC?

—Reid ya te lo dijo.

—Pero quiero que me digas tú, ¿porqué volviste a ayudarme con este caso si querías alejarte de ello?

—Porque tanto tú y Reid son como mis hijos, necesitas todo la ayuda posible. No quiero que te pase lo que a mí, que te involucres, que alguien a quién quieras salga herido.

—¿Porque no te apareciste cuando Spencer sufrió lo de Maeve...? ¿O cuando paso lo de Haley?— Preguntó, pero sonó más a un reclamo.

—No me dijieron nada. No los llamé, ni ellos a mí, le deje la carta a Spencer porque, simplemente... a él le afectaría más.

—Ya había perdido un padre, él cual ni siquiera dijo adiós— Termino Louis.

—Tanto como Hotch, Reid y yo sabemos que es perder a nuestro amor a causa de nuestro trabajo...

—No dejabas de ver a Sarah desde ese día.

—Sí... y jamás lo olvidaré—Suspiró—. No quiero que pases por eso. Frank Breitkopf me arrebató algo muy importante, ya no sabía si valía la pena. De una u otra manera he lidiado con éste trabajo por más de 30 años, me sentía enfermo, demente... Tal vez cuando tus manos dejen de sentirse frías, significa que es hora de partir...

Louis asintió triste, miro hacía su derecha dónde su pequeño intentaba torpemente sostenerse de pie, mientras tenía un chupón en la boca. Louis le sonrió.

—Todo esto lo hago por él, para que cuando crezca no tenga que lidiar con alguien como ése ignoto, ahora que es pequeño tengo que protegerlo, tengo que atraparlo y asegurarme que no salga nunca de prisión.

—Y así será, Louis.

...

Louis bebía su café mientras seguía ordenando el papeleo en su escritorio.

—Es extraño no ha venido J.J con un nuevo caso—Habló Reid.

—Sí, tal vez los asesinos seriales están de vacaciones—Bromeo Morgan.

—Nosotros también merecemos unas— Chillo Louis mientras daba vueltas en su silla.

—No te emociones, hijo— Morgan arrojó su vaso de café al bote de basura—. Desde que entre no hemos tenido unas vacaciones decentes, y la última vez decapitaron a alguien e intentaron inculpar a una de nuestras agentes.

—¿A la agente Grenawey?-Preguntó Louis.

—Sí... ¿Qué seria de ella?—Preguntó Reid y Morgan se encogió en hombros.

—Tenemos caso—Habló J.J con unos archivos en la mano, todos salieron a la mesa redonda.

...

Louis llegaba de un caso, recogió a su pequeño de la casa de su madre, y fue con el menor a la cafetería a comer antes de ir a su departamento. Él bebía su café mientras el pequeño dormía cómodamente en su porta-bebés. Una mano toco su espalda y volteó.

—Oh, hola, Harry...

El rizado le sonrió de la manera tan deslumbrante que solo el acostumbra hacer y se sentó frente a él.

—¿Acabas de llegar de un caso?—Preguntó.

Louis sintió y le sonrió.

'Que bien, yo tengo tarea aún—frunció el seño—¿Se quedó dormido el pequeño Freddie?—miró con ternura a el bebé.

—Mamá dijo que no se estuvo quieto toda la mañana.

—Es un bebé con mucha energía—sonrió— ¿Que paso con lo de tu..?

—¿Mí...?

—¿Ex novia...? ¿Ex concubina...?, no se como llamarle—Pensó—... Bueno, tú me entiendes, la madre de Eddie.

—Oh, ella... sí puso la demanda—Tomo otro trago de su café, Harry abrió los ojos.

—Esa mujer tiene muchos problemas—Negó en desaprobación— ¿Qué harás?

—Puse la contra—demanda, nos iremos a juicio.

Harry hizo una mueca.

—Y... Estaba pensando....—Empezó Louis.

—¿Qué?—alentó el ojiverde.

—Pensé... Bueno, llevamos estos 5 meses hablando y conociéndonos, te tengo confianza, así que pensé que si tú además de Hotch y Rossi me ayudarán con esto, eres un buen abogado...

El rizado sonrió con la cabeza gacha, sus mejillas se sonrojaron y asintió.

—Eres muy amable, Louis. Me encantaría ayudarte, tu hijo se quedará contigo.