capítulo 3. Pizza, queso y sus labios.

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Había pasado una semana de aquella noche en el bar, y la intriga de Nick, sobre que había pasado con Amanda y Benjamin camino a su departamento, lo estaba volviendo loco. Por supuesto que no pasó de dos copas en el departamento de Amanda ya que ambos trabajarían al día siguiente y aunque los labios de Amanda eran tentadores, Benjamín se despidió con un beso en la mejilla y una pregunta en su cabeza
*¿Quien es esta mujer?*

—¡Oye! ¿Donde estas? —Fin preguntó a nick cuando el ya hacia perdido en sus pensamientos.

—¿Que? —Nick preguntó sacudiendo su cabeza.

—¿En dónde viajabas? —Fin se rió con descaro.

—En Rollins... —Salio de un suspiro haciendo levantar las cejas de fin.

—¡Hey amigo, calla! — Fin se empezó a reír fuertemente — No quiero saber sobre las fantasías que tienes de mi compañera.

—No es lo que crees fin, por favor — Nick dijo y se levantó hacia la máquina expendedoras.

Al entrar a la sala no pudo evitar sonreír al ver como Amanda luchaba por su barrita de cereal.

—¿Puedes? — Nick dijo caminando hacia ella.

Amanda lo miró con una sonrisa seductora —Si...— Dio un fino y directo golpe a la máquina haciendo que devuelva más de lo que le pertenecía por su dinero tragado.

Ella toma una barrita y la lata que salió demás y se la entregó a el. —¿Venias por esta? —Ella dijo moviendo sus pestañas hacia el. Claro que nick no había pensado en su bebida energética, pero no le venía mal y sobre todo con el día tan largo que habían tenido.

—Así que... —Nick intentó hablar mientras estaba perdido en los ojos de ella, en su boca, su cara ... —¿Esa es toda tu comida de hoy? —El preguntó.

Amanda miró su barrita que no se veía tan bien y luego lo miró a nick con una mueca de desagrado —Eso creo.

—¿Que te parece chino? No sé si se compara con esa— El dijo señalando a aquella barra de cereal sin abrir.

—Descuida. Yo puedo con esta. —Ella sonrió a su propuesta de comida china.

—¿Pizzas?—Nick dijo sonriendo.

—¡Hecho, tu pagas! —Amanda no se puede negar a esas pizzas, a su sonrisa y aunque sabía que el iba a pagar le dejó bien en claro su 'no cordialidad'.

—Claro... — Dijo sonriendo porque que ella acepto. Antes de que ella salga por la puerta Amanda dijo "Te aclaro, no es una cita"

"¿Tu que crees Rollins?" Nick dijo con otra sonrisa seductora y Amanda le mostró su dedo medio. Ouch

*¿por qué eres tan especial, Amanda?

Media hora después,  luego de despedirse de fin y aclararle que solo iban a meter un poco de comida en sus estómagos mientras pasan un buen rato,  ambos se encontraban en un pequeño resto-bar.  Nick se había perdido en Amanda saborear el queso de la pizza que había en sus labios, y por el contrario de Amanda, ella profundizaba el sabor en su paladar. Definitivamente ella ama la pizza y nada se le compara, pero eso es porque no ha probado el sabor de los labios de Nick Amaro.

—Mmm...

Amanda dejo escapar un sonido de aprobación cuando dejaba su rebanada en el plato,  solo para poder saborear sus dedos con huellas del alimento anterior.  Algo que a Nick le excitaba era ver, como ella con sus deseables labios y su tenaz lengua, hundían sus deseos en ellos. Amanda chispeo el dedo meñique con su lengua haciendo que Nick salga de sus pensamientos, los cuales,  había entrado sigilosamente y sin ningún permiso.

—Nada mal ¿eh?— El dijo en un tono creído. 

Nick tomo una rebanada de pizza y se la entregó a ella,  la cual,  con gusto acepto, pero al tomarla Amanda,  nuevamente, se lleno de queso en los dedos.  Nick pensó que sobreviria viendola lamerse los dedos toda la noche y sin ninguna duda. El vio como empezaba a deborarla con rapidez y sonrió al pensamiento de que solo iba a degustar de esa barrita de cereal si no fuera por el.

Nick mordió su pizza. Ups

Así pasó el tiempo, compartieron algunas palabras sobre el trabajo y luego se limitaron a sólo mirarse el uno al otro mientras hablan de pequeñas ocasiones en las que estuvieron felices.

Nick había pagado la cuenta ya,  ambos decidieron caminar por la calle en dirección al vehíco, caminaron en silencio. Un silencio incomodo. Ellos caminaban cerca del brazo del otro con el frío chocando sus caras, haciendo que el pelo de Amanda baile en el viento y que Nick no deje de mirarlo, a cada rato sus manos rosaban y podían sentir su piel al tacto de la otra. Se habían detenido en una esquina al frente de un edificio donde estaba estacionado el auto. El viento,  que soplaba con suavidad, con una ligera brisa que agitaba sus mechones y dejaba expuesto su rostro, sus ojos azules brillantes haciendo que Nick no pueda evitar que su mano llegue hasta un mechón suelto y correrlo  tras sus oreja, algo que hizo a amanda enrojecer, luego se detuvo dejando que su mano deposite una leve caricia en su mejilla haciendo derretir las piernas de ella. Ambos sonrieron al otro, pero el silencio los vivió a invadir.

Nick se aproximó sin apenas respirar y ella bajo su mirada a sus pies, 
un escalofrío de deslizó por toda su espina dorsal cuando Nick rozo sus labios y su corazón empezó a latir con una intensidad como la de un bajo en un grupo de heavy metal.

¿Realmente estaban allí o era sólo su imaginación?

Amanda pudo saborear  el queso de la pizza y un aroma fresco, en la boca de Nick. Ella se entregó al suave beso, pero el calor intensificó el momento, y sus lenguas danzando entrelazadas necesitaban aire. Ambos cortaron el beso a merced de oxígeno.

En el momento en que se habían separado, el quería y necesitaba volver a besarla. Ella tenía la misma expresión de calor, que le daban ganas de sentir sus labios de nuevo, pero dos palabras salieron al unísono.

—Deberíamos...

—Deberíamos...

Ambos comenzaron y luego sonrieron el uno al otro, Nick hizo un gesto hacia ella para que ella hablara primero.

—Hay que ir... —ella le dio una sonrisa tímida, se dio la vuelta algo nerviosa y sin esperar a que el respondiera cruzo la calle. Nick la quedo mirando y luego pensó los contra de volver a besarla, eran miles, pero los mando al carajo y tomo una respiración profunda, corrió tras ella. Amanda estaba a punto de abrir la puerta del pasajero principal cuando sintió como nick la sujetara de la cintura y arinconara entre el y la puerta del auto.

—¿Nick?— Amanda dijo en busca de aire con su corazón latiendo, como un terremoto.

El no necesito decir una palabra, la tomó de la cara besando sus labios con intensidad  y ella se lo devolvió con un beso, aún, más caliente.

Esta vez cuando se separaron fue solo para abrir la puerta del pasajero de atrás. Nick con suaves besos en el cuello la recosto en el asiento y ella tiro de el más cerca y una vez la puerta cerrada Nick comenzó con la liberación de su camisa y ella de su tapado. Ambos se miraron y la lujuria se apodero de ellos, lo dijeron todo.

Corazón Delator...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora