Es aquel que cuando me acuerdo de él, sonrío y mucha gente pensará que estoy loca.
Que por lo menos, una vez al día, lo recuerdo
Que cuando lo leo, lo siento; siento sus susurros, su mirada, sus caricias, su sonrisa...
Que cuando hablo de él, las personas sonríen y piensan, eso... eso es amor puro!
Pero cuando me preguntan sus defectos yo me entristezco por un momento, luego alzo la mirada y sonrío.
Y mi respuesta es, ése hombre perfecto, solo existe en papel y en mi mente.