ODIO AMARTE

2.

Mañana es el gran día, me voy a Estados Unidos, Martina está mucho mas emocionada que yo.  Desde que le conté lo que pasó esa noche con mi padre, se ha encargado de ayudarme en toda la organización del viaje. La verdad la voy a extrañar mucho pero ya llegó la hora de perseguir nuestros sueños y ambas queremos cosas diferentes. 

 - Oh Dios Pia jamás me imaginé que ibas a salir de Europa, siempre pensé que te irías a Londres. pero ¿USA?  estoy supeeer emocionada por ti- chilla Marti. 

Pongo mis ojos en blanco. 

- Marti, no has parado de decir eso desde que te conté del viaje; además todos estos años que voy a vivir allá tienes que ir a visitarme, prometelo 

-Lo prometo pi, sabes que me harás mucha falta- nos dimos un caluroso abrazo.

-Pero bueno, no nos pongamos sentimentales porque sino mañana no te dejo subir a ese avión 

Al terminar los últimos detalles nos quedamos dormidas.

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En un par de horas estoy volando hacia el otro lado del mundo, estoy en el aeropuerto con mi padre, hermanos y Martina.  Tengo una sensación de felicidad pero al mismo tiempo de melancolía, al dejar a mi familia y a todas las personas que quiero, la ciudad que me vio crecer pero, regresaré llena de éxitos.

Cuando mencionan mi vuelo, me despido rápidamente de todos, mi padre y Alexandro intentan no llorar pero al abrazarme ambos sueltan pequeñas lágrimas, Fiorella me abraza fuertemente mientras me dice "te amo pi" y por último Martina me abraza diciéndome que me llamará cada día...

***
Después de diez horas de viaje por fin he llegado al apartamento que mi padre me ha regalado, la verdad es muy espacioso para una sola persona, pero tiene una vista hermosa de la ciudad,  especialmente el balcón de mi habitación,  a pesar de que físicamente soy muy parecida a mi madre mi personalidad es idéntica a la de Roberto Aiani mi padre, nos encanta tener un buen balcón con una buena vista para pensar, leer o tomar fotografías.

Cuando llego al sitio me recibe una señora muy educada y me hace saber que es la encargada de los quehaceres.

Ahora estoy en mi habitación, todo es pulcramente blanco y me alegra porque así puedo pintarlo cuando quiera y pegar mis recuerdos y fotografías nuevas; el baño es espacioso con espejos y una gran tina; el closet es gigantesco también; a pesar de la diferencia horaria y que acá en Cambridge ya anocheció, me tiro como un costal de papas en mi nueva  cama y caigo profunda...

Sonrío cuando estoy a punto de dormir con la esperanza de que mi vida cambie para bien y que deje esta tristeza que me llena el corazón. 

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El curso de verano empezó hace algunas semanas, al principio me costó acostumbrarme al cambio curricular y a la gente.  Pero gracias a Dios ya tengo compañeras de estudio, aún no las considero amigas, sus nombres son Jazmín y Helena.
Ambas han sido muy amables conmigo, además me han enseñado la ciudad.

Hoy es un día muy soleado por lo que me decido por unos jeans ajustados blancos, una blusa corta azul y tenis cómodos, junto a eso agrego un poco de maquillaje a mi cara y me hago una coleta alta. Salgo rápido del apartamento pues voy tarde a mi clase de fotografía. Ya sólo falta una semana para que acabe el curso de verano, la siguiente es de descanso y la que sigue empiezo las verdaderas clase.

La clase de hoy, es en los jardines del campus pues el profesor nos ha pedido unas tomas al aire libre, la verdad estoy sentada debajo de un árbol gigante, no veo algo que me guste hasta que escucho a alguien hablando o mas bien gritando del otro lado del árbol, cuidadosamente me levanto del césped y me asomo para ver quien es el causante de esos gritos, al verlo mis ojos se abren de asombro, él es ...wow, tiene su mandíbula apretada supongo que por su enojo, me quedo unos segundos embobada viéndolo y luego no dudo en coger mi cámara y tomarle una o mas bien unas fotos: gritando a su celular, su mirada dura, metiéndose un cigarro a su boca, expulsando el humo...bueno debo verme como una maníaca pero no puedo evitarlo, él es tremendamente sexy, estoy viendo las fotos para hacer una ultima toma e irme al salón de fotografía cuando en eso alguien me habla y yo me paralizo. 

- ¿Te han dicho que no puedes tomarle fotos a la gente sin su consentimiento ? pequeña loca 

Oh Dios estoy jodida, me ha pillado. Lo miro un momento y sus ojos son oscuros,tanto, que dan miedo, el tiene un aura tenebrosa. ¡Muy bien Pia,ahora va a creer que eres una loca acosadora!

-¿Entonces? ¿no piensas decirme porqué me estabas tomando fotografías? 

-Ehh ehh.. yo, yo estoy en clase de fotografías y me pidieron tomar fotos en el jardín del campus pero no encontraba nada interesante. 

Él sonríe maliciosamente y se toma la barbilla. - Ohh osea que ¿te parecí interesante?- 

Siento mi cara explotar de lo roja, ¡¡¡Dios que le digo!!!   - La verdad solo quiero llevarle algo diferente al profesor, pero tu solo eres un chico, no tienes nada en especial- 

Él suelta una carcajada, y al calmarse me dice - siendo así, te ordeno que borres mis fotos.- 

- ¿Disculpa? claro que no lo haré, en quince minutos debo entregarlas. 

- Te dije que las borraras pequeña loca 

-¿ Por qué?

-Porque si y ya. 

No las voy a borrar, debo entregarlas, así que se me ocurre una maravillosa idea. SALIR CORRIENDO!. Atravieso todo el jardín, miro hacia donde estaba él y ni siquiera hizo el intento por perseguirme, simplemente estaba allí de pie riéndose de lo tremendamente ridícula que soy; estoy en shock, así que solo me voy al salón de fotografía. 

Hace algunas horas salí del campus pero no he podido sacarme a ese chico de mi cabeza, ojalá que no estudie en la universidad, y si lo hace deseo de todo corazón no encontrármelo nunca más.