Ambos se volvieron a encontrar en el camino.
Esta vez dejaron el mundo de lado, su propio universo y sin pensarlo dos veces, corrieron a encontrarse y abrazarse.
—¡Te necesito!
Se escuchó al unísono mientras lágrimas rodaban por las mejillas de la rubia. El abrazo duró más que la eternidad.
Habían pasado años desde que no habían estado así. Era una sensación innovadora. Sentir su calor, sus rostros tan cerca, ahora se sentían llenos de vida. Se sentían completos.
—Perdóname, por todo lo que dije, lo que hice, ¡te traté como si fueras nada! Perdóname. Perdón, perdón, perdón, perdón...
Repetía una y otra vez en su oído, eso provocaba que las lágrimas de la chica no cesaran.
—No... Tú perdóname a mí, no me di cuenta de el cómo te estaba haciendo daño, ¡soy yo la que tiene la culpa! Fui yo la incapaz de tener un hijo —soltó con amargura, citando las palabras que alguna vez él mismo le había gritado a la cara.
—¡No te culpes por eso! —le gritó con euforia—. Sé lo que te dije, pero jamás fue en serio, no me importa si puedas o no, ¡solo quiero volver a tenerte! —la abrazó con delicadeza mientras recargaba su cabeza en su hombro—. Solo quiero que todo vuelva a ser como antes.
—Yo también —le respondió en un susurro.
Sin pensarlo, se besaron, con mucho cuidado primero. Él le sacaba las lágrimas con una mano, mientras con la otra la acercaba más hacía sí. De repente, el beso se tornó desesperado y apasionado.
Se necesitaban y lo sabían. Querían estar juntos otra vez, sin que ya nada los detuviese.
Aquella falla que tuvieron en el pasado fue sólo una prueba de que, a pesar de todo, estaban destinados a estar juntos.
Porque lo único que ahora deseaban era comenzar de nuevo y esta vez, se quedarían para siempre. No importa cuántas veces se vuelvan a tropezar, siempre estaría la mano del otro para levantarse y seguir con una vida que sería feliz, esta ocasión.
Mabel, quien los observaba de lejos, lloraba de felicidad, hace tanto tiempo que quería ver a su hermano feliz.
Así, ese bosque fue el espectador y confidente de un amor que solo los protagonistas entenderían.
—Esta vez comencemos de cero y por favor, déjame volver a enamorarte —le susurró en el oído a su chica.
—Solo si prometes que jamás volverás a dejar que te extrañe.
—¿Es un trato? —bromeó él extendiendo su mano.
—Hasta el final de los tiempos —respondió volviendo a besarlo.
Ambos partieron a la cabaña, donde solo ellos saben lo que sucedió esa noche.
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• START AGAIN • | [DIPCIFICA]
Cerita PendekDonde Dipper y Pacifica comparten un desgarrador pasado con errores que se interpusieron en el camino de ambos. Pero ahora, ellos solo quieren empezar de nuevo. SEPTIEMBRE 2016