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«El amor es una debilidad. Vulnerabilidad y desasosiego. Todo mi mundo siempre girara alrededor del tuyo. La pregunta es: ¿Podrá algún día, tu mundo girar alrededor mio?»
– Holly Williams –
Jin se mantenía inerte frente a la puerta. Se debatía internamente por tocar o salir de ahí.
En su vida le había rogado a una mujer. No tenía que mover un dedo para poder tenerla, sin embargo con Holly desde un principio fue diferente.
Ella no mostró signos de interés cuando se conocieron, fue cuando la tuvo entre sus brazos por primera vez, que ella comenzó a mover su muy tranquilo mundo.
La vio mirarle con otros ojos cuando salían ocasionalmente a reuniones de trabajo. Ya no era la misma Holly, se mostraba más amable y dedicada, lo que llego a asustar a su delicado corazón, se había prometido no amar nuevamente a una mujer y en cambio solo utilizarlas como algo pasajero, pero no duradero.
Fue cuando comenzó a ver en los ojos de Holly más que agradecimiento que tuvo miedo de enamorarse, infringiendo reglas en cada encuentro 'solo sexo, pero jamás amor' ella había aceptado todo y él aun sabiendo sus sentimientos hacía su persona decidió ignorarlos y continuar, sin saber que en algún momento alguien más le arrebataría su amor.
Inspiró fuertemente y ejerció presión sobre el timbre sin más rodeos.
Una. Dos. Tres veces y ella no abrió.
¿Acaso estaba con él? ¿No había funcionado el haber revelado su secreto ante Nam Joon?
Se maldijo internamente al pensar que posiblemente ellos de nuevo estaban juntos.
※
Su mente divago de nuevo en aquellos recuerdos que intentaba borrar de su mente.
Ella entre sus brazos, gimiendo su nombre en cada movimiento de sus caderas sobre las suyas.
Era tan hermosa, tan ardiente cuando se lo proponía.
¡Detente! ¡Basta!
Se reprendió a si mismo nuevamente. Luchaba por mantener la poca cordura en su interior.
No debía desearla como lo hacía. ¡No debía! pero le era imposible sacarla de su mente.
Había probado su cuerpo, sus besos y su manera de amar. Ella le volvía loco y odiaba el hecho de que sabiendo, que era una mujer prohibida la tomó entre sus brazos. La hizo suya y no se arrepentía de ello.
En ese momento ella esperaba por él. Pero, ¿Podría en verdad dejar a un lado sus prejuicios por una noche de pasión? ¿En verdad podría?
