epilogo

1.3K 48 6
                                    


Epilogo

Ocho años después

Rachel se encontraba sentada en un sofá. Estaba viendo a sus dos hijas jugar. Charlie quien tenía 8 años jugaba con su hermana menor, Michelle. Esta última que tenía cuatro años. Y se debe de decir que había sido Quinn quien había dado a luz a la niña, pero con un ovulo de Rachel. Por lo que se parecía a la morena y a Charlie.

La segunda hija del matrimonio Faberry se divertía con su hermanita. Y la menor estaba feliz. Ya que el poder jugar con sus hermanas le gustaba. Y como no, ya que era consentida por ellas.

Mi- mami, quiero helado.- dijo la menor a su madre.

R- no Michelle. Hace una semana te dio tos.

La niña al escuchar a su madre se levantó. Y fue directo a donde su madre.

Mi- pero ya no tengo tos. Solo un poco mami.

R- no Michelle...- no pudo terminar de hablar ya que Charlie la interrumpió.

Ch- si mami, solo un poco de helado. Y yo también quiero.

R- s ti te puedo dar un poco.

Ch- no mami. Si Michi no come yo tampoco.

Rachel se enorgulleció de su segunda hija. Pero no podía darle helado a su hija menor. La niña se acaba de salir de una tos que duro más de lo normal. No quería que se enfermara muy seguido.

Pero Rachel no sabía que dos rubias las miraban desde la puerta. Una de las dos rubias era su hija mayor. La rubia que tenía 16 años trataba de contener sus risas. Ya que en una bolsa llevaba un bote grande de helado de fresa que era el favorito de sus hermanas, como de ella. La otra rubia era su esposa. Quinn Fabray. Que no podía ver lo sobreprotectora que podía ser Rachel.

Q- amor puedes darle solo un vaso con helado.

R- hola amor.

Q- hola amor.- y beso a su esposa.

R- pero con lo del helado no puedo Quinn. Y si pasa como con...

Q- no va a pasar. Solo tuvo un resfriado.

Y es que Beth al tener 10 años se enfermó. La pequeña rubia había contraído un parasito. Lo que provocó que su salud decayera. Las madres de la pequeña rubia buscaron a los mejores médicos. Pero a pesar de tener la ayuda de los mejores doctores. La recuperación fue de un año. En el cual la pareja vio a su hija sufrir.

R- lo se pero no quiero que pase nada malo.

Q- y no va a pasa. Confía en mí.

R- está bien. Confió en ti amor. Bueno puedes darle helado, pero que lo coman en la cocina.

Q- si tranquila.

R- y no importa que Michelle se ensucie la ropa o la cara. Le toca baño.

Q- bueno niñas. Ya escucharon a su madre, les voy a dar helado.

Las dos niñas gritaron "si" y siguieron a su mamá.

Pero una rubia de 16 años se quedó.

Be- mami sé que tienes miedo con la tos que tuvo Michi. Pero no le pasara nada. Ya no está enferma.

R- lo sé. Es solo que tengo miedo.

Be- no pasara lo mismo que me paso. Y si pasara, sé que mi hermanita no estar sola ya que tiene dos excelentes madre y dos hermanas que la aman. Cuando me enferme nunca estuve sola. Ya que tenía a las mejores madres.

La madre de mi hija (FaBerry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora