Del odio al amor.

Capitulo 6

Ash, no ¿Enserio? ¿El es su mejor amigo?

—Mira Luis ella es Brooke, mi mejor amiga. Brooke, el es Luis —Nos presenta la rubia con una sonrisa, estrecho su mano.

—Mucho gusto —Sonríe el chico de ojos color avellana que se encuentra frente a mi.

—Lo mismo digo —Le regalo una sonrisa.

—Ohh... Lauren el es mi mejor amigo —Dice Luis señalando al chico que se encuentra a su lado, el chico solo se limita a sonreír, después voltea conmigo y me dedica una mirada molesta, llena de irritación. Odioso

Lauren voltea conmigo y sonríe picara yo solo rodó los ojos. Giu, lo hace por ese chico odioso, no me gusta, o sea no.

—Pues vamonos —Después de un silencio incomodo Luis habla.

—Emm... yo tengo muchísima tarea, en verdad me encantaría acompañarlos pero... —Lauren me interrumpe.

—¡Vamos Brooke! No seas enfadosa —Hizo un puchero, no me quedo mas que aceptar.

—Esta bien —Sonreí.

Luis le pidió su mochila a Lauren y la cargo hasta su auto, caminaban frente a mi juntos, demasiado pegaditos diría yo. ¿Era enserio? ¿Lauren me dejaría sola durante todo este tiempo? El odioso ese solo iba caminando con su celular en la mano como si solo existiera el, claro es un egoísta.

Narra el chico:

Odiaba cuando alguien me detenía y no me dejaba hacer lo que quería, la odiaba a ella, era tan odiosa ¿por que se metía en mis cosas? que solo me dejara hacer lo que quería y se ocupara de sus cosas, que no se metiera mas en mi vida.

Decidí ignorarla, era lo que se merecía después de hablarme así, no entendía el por que había defendido a ese tonto. Se interesaba por los demás, era buena pero ahh odiaba que se metieran en mis cosas.

—¿Que quieren comer? —Pregunto Luis cuando ya estábamos en el auto.

—Sushi —Dije sin apartar la vista de mi celular, estaba hablando con una chica, Aubrey.

—Giu —Voltee a verla y tenia una cara de asco ¿era enserio? ¿a quien no le gustaba el sushi? era la cosa mas deliciosa que podría existir en la tierra.

Al final todos quisimos sushi excepto ella.

—¿Que van a pedir?—Pregunto un chico acercándose a la mesa en donde nos encontrábamos.

—Nada—Respondió ella aun molesta, aun continuaba con esa cara de asco.

—El sushi es lo mejor que podría existir en este mundo —Dije sonriente, realmente me agradaba el hecho de que le diera asco y solo lo hacia para hacerla enojar, se veía linda cuando se enojaba.

¡No! ¿Pero que estas diciendo? Tanto amor aquí me esta provocando volverme loco, y es que si. Luis y esa chica no se dejaban de ver, jugueteaban, eran tan cursis. Yo nunca seré así, Giu.

Nuestro sushi había llegado, todos felices de la vida mientras la odiosa solo se limitaba a observarnos con una cara de asco JAJAJA, pobre

—¿En serio no piensas comer nada?—Aun no entendía el porque le seguía hablando.

—No—Contesto cortante.

—De lo que te pierdes—Dije metiéndome un rollito de sushi a la boca.

Narra Brooke:

Ahora el era el que no tenia nada que hacer, claro. Pues se gasto su batería hablando con no se quien.

La tarde había pasado rápido, mientras nos dirigíamos a casa de Lauren los chicos no dejaban de tontear, el restaurante al que habíamos ido quedaba a 15 minutos de la casa de Lauren por lo que el camino fue largo. Lo que me pareció raro y de super mala educación fue que el odioso se quedo dormido a mitad del camino.

Luis y Lauren venían hablando de carne y cual carne era mas rica, por lo que sabia Luis no era de aquí sino de Hermosillo Sonora una ciudad de Mexico, ahora entendía el acento que ambos tenían, era demasiado bonito. Seguía muy atenta en su platica pero algo extraño y raro se coloco en mi hombro, el odioso. Se había recargado en mi hombro mientras dormía, sus ojos estaban cerrados y eso dejaba ver sus largas pestañas, me dedique a observar su rostro por completo y observe que sus labios estaban entreabiertos parecía un pequeño bebe, era tan tierno.

Lauren y yo nos encontrábamos despidiéndonos, mi casa no quedaba tan lejos 5 cuadras aproximadamente. Las calles se encontraban solas, no había tantos niños jugando a fuera de su casa como se acostumbraba a ver diariamente, revise mi celular para ver la hora, eran las 10 de la noche, había pasado una tarde ocupada por lo cual no me di cuenta de como había pasado el tiempo tan rápido, aun seguía sin saber el nombre del chico odioso, pero si, a partir de hoy se convertiría en el odioso. Era raro pero disfrutaba molestarlo, su cara era tan graciosa y linda cuando se molestaba, se cruzaba de brazos y hacia un extraño gesto, hacia pucheros.

Las luces de las siguientes dos cuadras no funcionaban bien, la luz que emanaba de ellas era tenue y parpadeante, caminaba a paso rápido, la oscuridad causaba un poco de temor en mi. Escuche algunos pasos tras de mi, esto comenzaba a asustarme, voltee hacia atrás y había un hombre vestido completamente de negro.