Todo comenzó cuando los espíritus eran aun mortales, en un antiguo pueblo de Xcaret, vivieron dos princesas Ixtab que era la mayor e Ixchel que era la mas pequeña. Ambas jóvenes eran pretendidas por una gran cantidad de guerreros, pero ambas ya se habían decidido por el indicado, por desgracia eligieron al mismo guerrero. Sin embargo Izamma que era el nombre del guerrero ya había echo su elección también y decidió por Ixchel.
Un día llego un príncipe de otro imperio, para rendir tributo por la victoria en batalla de la gente del pueblo de Xcaret y en cuando conoció a Ixchel se enamoro de ella. Ixtab en un arranque de celos por su hermana que era tan codiciada le dijo a Izamma que el nuevo príncipe Exab pretendía a Ixchel y que al parecer ella empezaba a caer ante el. Ixtab como la hermana mayor, decidió que pelearían hasta que uno de los dos muriera, el sobreviviente quedaría con Ixchel.
Izamma estaba por vencer pero Exab intento atacarlo de ultimo momento por la espalda, en ese momento Ixchel al ver aquel acto y en un intento por salvar a su amor, se puso entre ambos y fue asesinada por el príncipe Exab. Izamma al ver morir a su amada en sus brazos encomendó sus almas a Ixab la hermana mayor y se quito la vida con su ultimo aliento. Ixab entendió entonces que el amor que su hermana e Izamma se tenían era realmente autentico y su alma ensombrecida busco venganza; Tomo la espada de un guerrero y atravesar el corazón de Exab y lo maldijo para que su alma estuviera siempre sedienta de batalla y muerte convirtiéndolo en el espíritu de la guerra y venganza.
El alma de ixab se ensombreció aun mas con aquel acto provocando la perdida de la misma y condenándose a vivir por siempre como el espíritu de la muerte.
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Los ruegos del pueblo permitieron que el alma de los enamorados fueran guiadas al cielo y así Izamma pasó a ser el Dios Sol quien era el espíritu protector de la justicia y valentía y Ixchel, pasó a ser su esposa y la Diosa Luna. espíritu protector de la vida y el amor.
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En agradecimiento y como una prueba de su amor por su pueblo, le dio a la noche brillo con las almas de su pueblo que son las estrellas más brillantes. Se dice que en cada Luna Nuevo la diosa Ixchel renace del fuego y permite a las doncellas enamorarse y dar como fruto de ese amor un hijo, es por eso que también es considerada diosa del parto y la fertilidad.
La gente del desaparecido pueblo de Xcaret dictamino que cuando un alma de noble corazón muriese se convirtiera en una estrella, para esto en cada Luna llena le ofrecerían a la diosa luna una ofrenda para que la diosa perdonara todas las ofensas cometidas en vida y así poder aspirar a convertirse en una de las estrellas que iluminan su camino.
Regreseee. pequeña edición. Me retire por un pelin de falta de inspiración pero ya regrese uffa espero estén al pendiente de las actualizaciones, la historia continua.
