Me Esta Mirando.

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Ese dia fue el más feliz de mi vida, hasta que mi esposo e hija llegaron de su paseo.

El llego con una caja, habia pensado que compro algo para Amanda, no lo se.

- Que es eso Sebastian?

- Estaba en la puerta cuando llegamos del parque.

- Que raro, no escuche a nadie golpear.

- Papi, puedo abrirlo.

- No lo creo cariño, no sabemos de donde vino, no viene con direccion, exceptuando la nuestra.

- Entonces es de nosotros.

- Amanda probablemente sea una broma de mal gusto, mejor tener cuidado uno nunca sabe.

- Bueno Mami.

- Bañate y cambiate de ropa, Papá y yo veremos que pasara con la caja.

Al abrir la caja, habia un muñeco viejo y derruido que Sebastian estuvo mirandolo dubitativo y me agarro muy fuerte del hombro.

- Es Blake The Beaver/Blake El Castor, es un personaje de un restaurante que me llevaban cuando pequeño.

- Y por que esa cara? Es solo un muñeco.

- Hoy fuimos al  restaurante que se inaguro hace unos días, pero antes estaba......era el que yo iba y ahora esto. Miralo es horrible -mientras señalaba al muñeco.

- Amor por favor no me coloques nerviosa.

- Hay que botarlo de inmediato a la basura.

- Lo botaremos, pero debes contarme bien que fue lo que te ocurrio, me preocupas.

- Fue cuando tenia ocho, estaba feliz habia estado enfermo y cuando vi que estaba algo mejor, acepte la invitacion de mis papás.

- Quieres un vaso de agua, te veo descompensado.

- Solo quiero terminar esto y quemar esa cosa. En que iba aaaah si, llegamos al restaurante y entre primero. Era algo maravilloso, era mundo 365 días de cumpleaños.

- Te traere algo de comer.

Me fui a la cocina y rapidamente hice un sandwish y un vaso de agua para que tragara con algo de ayuda. Los deje en una bandeja pequeña y me devolvi al living, para que Sebastian me termine de contar su historia.

- Aqui tienes querido, te pido que vayas rapido con la historia, no quiero que Amanda escuche.

- En serio Matilde, esta bien creo que ahora viene la parte interesante. Habia terminado de comer el plato que mis padres me pidieron y unos animatronicos con personal disfrazado estaban haciendo un acto por un niño que estaba de cumpleaños.

Justo vi a Damian un amigo que estaba tambien disfrutando el lugar, no recuerdo mucho pero, no se si les pedi permiso, ya me vi en la parte mas alta del tobogan con Damian y estabamos enojados el uno con el otro, cosas de niños. Y........

- Y que paso? Seba estas bien, Amor si no quieres seguir te comprendo, cerrare la caja y luego....

- Quemala con ese bastardo adentro.

Cerre la caja veía como la cara de mi esposo se contracturaba a una morisqueta sombría e incomoda con solo ver el muñeco.

- Estabamos peleando hasta que el me dio un golpe en el ojo, cerre mis ojos y lo empuje, al escuchar el grito, abri de inmediato mis ojos. Lo observaba caer al vacio, la gente gritaba........su cuerpo cayo sobre una mesa y su cuello se rompio con el costado de la mesa.

- Dios eso es terrible.

- No he terminado, fue cuando de la mesa cayeron varias cosas liquidas, hicieron que uno de los trabajadores se resbalara cayendo sobre uno de los animatronicos, creando un cortocircuito y el traje se comenzo a incendiar por las chispas. El hombre dentro del traje corrio desesperado por el lugar, el traje se desiso en segundos, pegandose a la piel del tipo.

- Sebastian estas temblando, amor.

- Sus gritos fueron algo extraño, la gente huía de las llamas en el lugar, los llantos, gemidos y gritos eran una musica perfecta para ese momento.

- Que tiene que ver el muñeco en todo esto.

- El me dijo que lo hiciera.

- Fue terrible lo que ocurrio, pero como puedes hablar de esa manera, pareces un loco.

- Desde ese día que el me esta mirando, eso es lo que el quiere, crean que yo soy el culpable cuando él fue todo el tiempo.

-Por que ahora llego en una caja a nuestra casa?

- Me trate de deshacer de él hace muchos años asi que lo enterre en el patio de la casa de mis padres.......regreso de la tumba literalmente.

- Mamá que es?

- Noooooooooo!!!

- Querida no lo hagas.

- Que lindo es, puedo quedarmelo?

Entonces fue cuando mi marido se abalanzo sobre nuestra hija y con una brutalidad abrumadora y horrible le quiebra el cuello.

Me mira con esa cara tan incomoda y con el muñeco en la mano.

- EL ME OBLIGO!!!

Sali corriendo sin mirar atras y algo me sostuvo el brazo, era Sebastian, obligandome a tomar un cuchillo, se inclina y apunta el cuchillo a su cuello.

- Por favor solo matame, te lo pido, no lo soporto.

Asi que solo tome la decision correcta. Y ese muñeco aún me sigue mirando.

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