Capitulo 1

19 2 6
                                    

Cristina

A veces me pasa que en lo único que puedo pensar es  que cuando uno es adolescente todo lo siente como si fuera el fin del mundo. Cuando te abandonan y te rompen el corazón solo podes pensar que es tu fin que ya nada va a ser lo mismo, y no solo estoy hablando de tu novio/a, sucede mucho mas seguido con los amigos. En estos tiempo la gente o es muy falsa y quiere caerle bien a todos o prefiere estar sola porque ya no puede confiar en nadie.

Desde que fui pequeña nunca me gusto estar rodeada de gente, las personas me asustaban. Lo único que veía y oía era como discutían, como se utilizaban mutuamente y como después ellos cambiaban con el tiempo volviéndose peores personas.

Jamás tuve una amiga y mucho menos un novio, tampoco tengo planeado tenerlos. Solo tengo conocidos y tampoco es como si los pudiera llamar así, son mas que nada chicos o chicas con los que salgo a tomar algo para distraerme de todo y todos.

En este momento estoy con ellos, en la puerta del colegio. Es la hora del almuerzo y todos están en el comedor, y yo acá afuera fumando un cigarrillo mientras mi mente divaga con mis estúpidos pensamientos.

- ¡Cris! – Escucho que me grita Yaco

Lo se, suena como un nombre horrible, ni siquiera como un nombre, pero la verdad que tampoco me interesa porque le pusieron ese nombre. Y no es tan malo como el de mi otra acompañante Walerica.

- ¿Si?

- Te estaba preguntando si vas a salir con nosotros hoy a la noche

- Solo si vamos al bar donde trabaja Jerri. Ayer a la noche vino llorando y quiero averiguar porque – Jerri es mi hermana, se podría decir que es a lo único que amo, la protejo como puedo, aun teniendo mis propios problemas. Ella trabaja en un bar de mala muerte y yo no me quedo atrás trabajo de prostituta.

- Esta bien – Dice Walerica – Pero si consigues un poco de éxtasis y después nos vamos a una fiesta, necesito divertirme a lo grande esta noche.

- Ler, estas hablando conmigo, sabes bien que iba a llevar sin que me lo pidieras – Dije casi ofendida. Por la única razón que estamos juntos es porque nos gusta distraernos con las fiestas. Somos 5 en total: Walerica, Yaco, Ventura, Axel y yo.

Al terminar mi cigarrillo entro y me dirijo a mi siguiente clase, puede que sea una inadaptada y que parezca que no hago nada pero en realidad presto mucha atención en clases. Siempre tuve en mente que tengo que estudiar y trabajar para ser alguien en la vida y poder alejar a mi hermana de nuestro estúpido padre que no mira mas allá de una botella de cerveza. Todavía no tengo pensado que quiero estudiar en la Universidad, pero siempre me llamo la atención la psicología.

Entro al salón y me acerco al asiento que esta adelante, pero al lado de la ventana.

Nunca nadie se sienta a mi lado, creo que les doy miedo. Existen chicos que se quieren acercar a mi pero yo ni los miro. Una vez me paso que solo se me habían acercado por una apuesta de cuanto tiempo tardaría en mantener una conversación conmigo o algo así, siendo sincera no me importa lo mande a la mierda y después de eso casi nadie se me acerca. Se bien de todos los rumores que hay de mi, muchos son de que soy una bruja o algo por el estilo, y miren que no me ofende, mas que nada me causa mucha gracias.

Al ver entrar al profesor de matemática me pongo los auriculares. No necesito escuchar en esta clase, lo único que hace es escribir problemas en la pizarra. No lo pienso mucho y pongo G-Eazy – Me Myself and I. Amo a G-Eazy, no tiene miedo de decir lo que piensa y esta canción dice exactamente lo que siento, lo que mas me importa son las fiestas, el alcohol y las drogas.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 07, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

MiserableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora