24.-

17 1 0
                                    

Perder la virginidad arriba de un auto no era lo más romántico, tampoco soy de esas personas en que cree que para perderla uno tiene que conocer bien a la otra persona y hacerlo en un hotel de cinco estrellas, pero lo importante es que fue muy hermoso a mi gusto, hacerlo en medio del camino con un cielo plagado de estrellas y con la persona que estaba empezando a sentir algo realmente lo valía, Tobías fue muy atento y cariñoso en todo me preguntaba a cada rato si yo estaba bien, si realmente estaba segura. Nos fuimos todo el camino de las manos tomadas hasta que llegamos a la casa, aún tenía que hablar con mi papá y Nicolás así que fuimos directo al despacho.
-¿que les pasó?¿por que se demoraron?- pregunto papá
-Me sentía un poco mal y le pedí a Hellen que parara el auto unos momentos- hablo Tobías antes de que yo empezara a tartamudear
-Toma asiento Tobías, bien hija que tenias que contarnos-
-Tengo que contarles algo super delicado a los tres, primero papá Nicolás ya sabe lo de mi situación-
-¿Qué?¿cómo lo supo?-
-Fue un accidente, hoy- miré a Tobías quien me miraba con cara de extrañado- lo segundo es que se quien entró a la casa papá, fue mi prima junto con Cristopher, él atacó a Tobías-
-¿Como lo sabes?-
-¿a quien más le serviría el libro de mamá si no fuera a mi? Por cierto el libro esta a salvo, lo llevo conmigo siempre- dije haciendo una señal a mi cartera- pero hay otra cosa papá Cristopher no es humano- la cara de papá se palidecio
-¿Qué?-
-Es un hombre lobo papá, por eso tuve que llevar a Tobías con los Russell-
-¿Y que tienen que ver los Russell aquí hija?-
-Es que ellos tampoco son humanos, son vampiros- los tres abrieron la boca al decir eso y se pusieron pálidos
-¿Me vas a decir que fuiste novia de un vampiro?-
-Si, pero yo en ese tiempo no sabía nada, el día en que nos fuimos fue el día en que me enteré papá, el caso es que tuve que llevar a Tobías con los Russell ya que eran los únicos que me podrían ayudar-
-¿Entonces Tobías tu eres un lobo?-
-Aún no tenemos que esperar a que ocurra- respondió
-Por eso no dejaré sólo a Tobías papá, es un proceso doloroso y tengo que ayudarlo, los Russell también nos ayudarán, en caso de alguna emergencia-
-¿Estas segura hija?-
-Si papá, tu me apoyaste cuando yo me enteré de lo mío, ahora déjame apoyar a Tobías con lo suyo, no me hará nada malo papá no te preocupes- papá se quedó pensativo unos momentos mientras yo miraba a Nicolás que aún estaba con la boca abierta
-Esta bien, pero mantente alejada de los Russell-
-como tu digas, gracias papá-
-Mandaré a la señora Ana para que te ayude y también contratare más guardias por precaución si tu prima no encontró el libro lo más probable es que vuelva a buscarlo- acenti ahora tenía que hablar con Tobías
-Me pueden dejar a solas con Tobías por favor- papá nos miró a ambos y Tobías se revolvió incómodo en el asiento
-Bien nos vemos abajo- papá agarró del brazo a Nicolás para que se moviera al salir puse seguro a la puerta para que nadie nos interrumpiera
-Hellen ¿qué eres?- directo al grano
-Bueno soy... Soy una bruja- me gané adelante de él
-¿Bruja?-
-Casi bruja-
-No entiendo- me tomó de la mano y me hizo que me sentara en sus piernas puse mi cabeza en su pecho y le conté toda mi historia de como me había convertido en una bruja -me gusta una linda brujita- dijo risueño
-Y a mi un lindo lobito- dije y lo abracé y él depositó un beso en mi cabeza -¿cómo sabías de que existían los hombres lobos?-
-Cuando era pequeño me gustaba salir por las noches a jugar con mis primos y una de esas noches vi a un hombre transformarse en un perro gigante, les conté a todos pero me respondían que sólo era producto de mi imaginacion, cuando ya era adolescente empecé a averiguar más del tema y ahí recién supe que lo que había visto esa noche era un hombre lobo-
-¿Y tienes miedo?-
-Para serte sincero aún no lo creo, pero estoy muy relajado, todos estamos destinados a algo Hellen, no podemos cambiar eso- al parecer se había tomado muy bien todo ojala que cuando llegue el día no piense lo contrario -quien diría que el guardia le gustaría a la hija de su jefe, vez el destino nos tiene preparado muchas sorpresas-
-Si es verdad- dije haciendo círculos sobre tu pecho
-Ven vamos a despedirnos de tu padre- nos levantamos pero no sin antes de darnos un beso. Bajamos las escaleras y llegamos al living, papá estaba calmando a Nicolás que estaba un poco alterado
-¿Que le pasó?- pregunté a papá
-Recién calló en cuenta de que había entrado en una casa llena de vampiros- respondió me acerque a Nicolás para tratar de tranquilizarlo pero temblaba mucho
-Nico ellos no te harán nada si estas conmigo- le mire a los labios porque decía palabras en voz baja, me acerque a él para escuchar lo que decía y ¿estaba rezando? Lo miré a los ojos- somnum- y Nicolás se quedó dormido en el sillón
-Eso fue escalofriante, pero efectivo- dijo papá- bien chicos tengo que trabajar hasta tarde hoy en la empresa, Nicolás se quedará con ustedes y mañana por la mañana les envió a los guardias, cuidense por favor hija- se despidió de Tobías
-Te dejaré afuera- caminamos hasta donde estaban los autos
-Hija cualquier cosa llamenme por favor-
-Si papá tranquilo-
-Mañana trataré de venir a verlos-
-bueno papá adiós- le di un beso en la mejilla y se fue mientras yo fui al auto de Nicolás a sacar la pizza con las bebidas para cenar
-Traje comida-
-¿Que haremos con el?- dijo Tobías apuntando a Nicolás
-Dejémoslo en el sillón no despertará hasta mañana- puse a calentar la pizza en el horno- iré a buscar unas mantas y un cojín- fui a mi pieza y encontré varias dobladas bajé y Tobías sacaba la pizza
-Te ayudó- me dijo, acostamos a Nicolás le puse una almohada y lo arrope bien
-Ven vamos se enfriara la pizza- comimos y al terminar dejamos dos trozos para que Nico comiera en la mañana
-¿quieres que me quede contigo esta noche?- me pregunto Tobías, lo único que quería era pasar las noches con él lo tomé de las manos y lo lleve a mi habitación-veo que eso es un si- dijo risueño, entramos y le di varios besos en el camino, al llegar a mi cama el me agarro de la cintura apegandome más a él para sentirlo, subí mis manos a su pelo que estaba desordenado y lo jale un poco, me tomó en brazos y enrrolle mis piernas a su cintura, me acostó en la cama suavemente sin separarnos, le empecé a desabrochar los botones de su camisa para quitarsela mientras el desabrochaba los botones de mi pantalón para quitarmelos, quedé en bragas, después me quito mi polera, ya estábamos piel con piel, definitivamente esta noche fue la mejor de todas.
Desperté con algo de calor y era porque Tobías me estaba abrazando, pero al parecer estaba otra vez con fiebre porque estaba transpirando me di vuelta para poder verle la cara y aún dormía parecía un niño le di un beso para que despertara
-Tobías ¿te sientes bien?- abrió un ojo y me abrazo más-oye estas sudado- dije risueña
-Buenos días princesa-aaaaw nadie me había había dado mis buenos días así, bueno papá lo hace pero él no cuenta
-Buenos días, ¿cómo te sientes?-
-Algo cansado- dijo con voz ronca
-Al parecer tienes fiebre, lo mejor será que te duches y estés en cama-
-Noo te quiero acompañar al pueblo a comprar algo de comer-
-Pero tienes que descansar- me miró a los ojos y me hizo puchero-¿que te parece si te bañas, me acompañas al pueblo y después descansas?-
-Mmmm esta bien, pero-
-¿Pero que?- me agarro más fuerte y no se como me sacó de la cama como si fuera un saco de papas en su hombro y me llevaba al baño -no Tobías por favor no hace frío- gritaba risueña abrió la ducha y salía agua helada, se metió bajo de ella conmigo en brazos
-No creerias que yo me bañara sólo princesa- ya me había dado por vencida
-Esta muy helada- dije tiritando de frío
-Pareces un pollito- arregló la temperatura y la dejó tibia -ahora si- me soltó para enjabonarse y yo me echaba shampoo en el pelo nos enjuagamos y nos fuimos a cambiar de ropa, el día estaba muy lindo así que me puse un vestido y unas sandalias negras me acomode mi cabello maquille mi cara de gasparin que tenía mientras que Tobías aún estaba envuelto en toalla ya que la ropa la tenía abajo en la habitación de los empleados
-wow estas hermosa Hellen- me miraba embobado sentado en la cama
-Será mejor que te vistas antes de que se nos haga tarde- dije acercandome a el me tomó de la mano y me acercó hacia el nos dimos un beso pero yo ya sabía que era lo que quería con ese beso así que seguí me senté encima de el para quedar a su altura
-Si seguimos así lo más probable es que quede embarazada- dije entremedio de besos y Tobías me miro asustado
-¿Cuando fue tu último periodo?-
-hace tres días- pude notar que había contenido el aire
-Todavía tenemos tiempo entonces princesa- se mordió el labio inferior se veía sexy
- Anda vamos cambiate de ropa iré a despertar a Nico, deben de estar por llegar la señora Ana con los guardias- le di un beso y me levante
-Como usted mande señorita Will- le tiré un beso y fui a ver a mi amigo que estaba en un profundo sueño
-Nico- le toqué con el dedo
-Mmmm- fue lo único que dijo
-Nico despierta tenemos que ir al pueblo- no me respondió, pensé en una idea mejor - Nicolás, los vampiros vienen por ti- le dije en el oído, se levantó super rápido
-Atrás, déjenme soy muy joven para ser chupado por sangre- decía mirando para todos lados -maldita Hellen me asustaste- yo obviamente reía a carcajadas
-Ay perdóname, no lo pude evitar, ven siéntate vamos a conversar- se sentó al lado mío -yo se que todo esto a sido mucho para ti Nico y lo lamento tanto que tengas que pasar por esto pero necesito que un amigo este conmigo apoyando, alientandome diciendo que no decaiga-
-Tranquila Hellen yo no me iré de aquí a no ser de que tu me eches, siempre te estaré apoyando- me tomó una mano y me la acariciaba con su pulgar
-gracias, y bueno ya sabes que los Russell vienen hoy, ellos no te harán nada porque estas conmigo y tenemos a Tobías y tu ya sabes, pero no debemos confiar mucho en ellos, conocí a uno pero no por su naturaleza si no que por su mentira y no se como son realmente, y te pido que por favor no exageres cuando lleguen-
-Te refieres a cabezas de ajo, estacas y plata-
-Exacto- lo miré podría jurar que dudó unos minutos, bueno yo igual haría cualquier cosa con tal de tener mi culo a salvo
-No te preocupes estaré bien-
-ven vamos al pueblo tenemos que comprar algo de comer- vimos que Tobías aún estaba con toalla y abrio los ojos como plato mi cara se puso roja miré a Nicolás que me miraba con la boca abierta
-Pensé que Nicolás aún dormía Hellen- dijo escondiendose en algún lugar
-No no lo estaba- aún me miraba así - hey di algo- le chispie los dedos pestañeo un par de veces
-No puede ser, parece que alguien tuvo una excelente noche-
-Callate, tu tienes un serio problema con tu boca ¿siempre actuas así?-
-Y no lo niegas Hellen Will- se paró y me cerró un ojo -soy una tumba querida- se río y se marchó al baño.
Los esperé en el jardín, estaban peor que mujeres se demoraron un mundo sentí unos brazos que me rodeaban mi cintura
-Lo siento princesa, no fue mi intención...pensé que aún no estaba despierto Nicolás- me di vuelta y se había puesto una polera blanca con jeans y zapatillas blanca
-No te preocupes, de todos modos Nico igual se hubiera dado cuenta y él nunca dirá nada descuida, por cierto ¿donde está?-
-En el baño ya estaba por salir- lo miré a los ojos y le di un beso
-¿como te sientes? aún estas como afiebrado- le toque la frente con una mano
-Estoy bien princesa-
-Ya estoy listo- gritó Nicolás desde la puerta
-ya era hora- dije poniendo los ojos en blanco -yo conduzco- nos subimos y emprendimos viaje al pueblo fuimos a un almacén que por suerte tenía todo lo que necesitamos. Guardamos todo en el auto y nos devolvimos a casa, al llegar notamos que los guardias nuevos habían llegado y supuse que la señora Ana también
-¿pueden llevar esto a la cocina chicos? tengo que hablar con los guardias- le dije a Nico y a Tobías
-Esta bien- dijeron ambos caminé hacia un guardia y le dije sobre las personas que estaban autorizadas a entrar a la casa y las que tenían prohibido entrar, al entrar a la casa pude notar que la señora Ana estaba preocupada me acerque a ella para saludarla
-¿Podemos ir a hablar a mi habitación?- le dije en el oído asintió con la cabeza -venimos en seguida, si quieren coman antes de nosotras no se preocupen- lleve a la señora Ana a mi habitación cerré con llave para que no nos molestara nadie
-¿Usted cree que es buena idea de que Tobías este aquí señorita?-
-Yo se que va a ser muy complicado, pero Tobías no tiene a su familia aquí señora Ana, y lo que le sucederá en dos noches más no es muy común que digamos y él necesita de nuestro apoyo como usted con papá lo hicieron conmigo-
-Ya veo, tendremos que preparar el sótano, ese es el único lugar más seguro para esa noche- asenti sólo una noche y un día entero faltaba para que Tobías se convirtiera -usted tiene que estar preparada para lo peor señorita, uno nunca sabe que es lo que sucederá y no queremos que ocurra doble desgracia debido a su situación mi niña-
-Si, si lo sé señora Ana, no se preocupe estaremos bien con ayuda de mamá va a salir todo bien- la abracé y le conté que iban a venir los Russell a nuestra casa y también le conté sobre sus verdaderas identidades si se le puede decir así
-Valgame Dios, mi niña creo que no será una buena idea tener tantas mezclas aquí, pero si usted cree que es lo mejor, bueno usted sabrá más que mal usted los conoce mejor que yo-
Dijo agarrándose su delantal todo esto ya me estaba asiendome sentir mal, salimos de ahí y bajamos a la cocina donde estaban los chicos guardando todo lo que venía en la bolsa, me apoye en el respaldo de la puerta para mirar a Tobías como sonreía de las estupideces que hablaba Nicolás, me miró y le hice una seña de que me acompañara afuera, nos sentamos en el patio, en el pasto y miramos hacia la nada en el bosque
-¿Que sucede princesa?- me dijo arreglandome un mechón, suspire profundamente
-No quiero que te pase nada malo Tobías, siento que es mi culpa lo que te esta pasando ahora, si te hubiéramos informado de mi prima capaz que esto halla sido otra historia y tu no estarías pasando esto-
-Pero ya paso Hellen y no es tu culpa, más que mal yo estaba haciendo mi trabajo, tu nunca hubieras pensado que tu prima volvería a buscar ese libro o ¿si?- Negué con la cabeza -¿ves? Quédate tranquila princesa ya todo esta escrito y nada malo me pasará, bueno caminare en cuatro patas, tendré un hocico, olere a perro mojado- eso me hizo reír y a él igual - pero en el día volveré a ser yo Hellen el chico de 20 años que le encanta a la hija del jefe-
-Siempre estaré contigo-
-Y yo contigo princesa- me dio un beso y me abrazo nos quedamos así por un largo rato- ven vamos a comer algo aún falta para que la señora Ana haga el almuerzo y tu no has desayunado- se levantó me tendió la mano para ayudarme, entramos a la cocina y Nicolás estaba preparando unos sándwiches para todos y la señora Ana estaba haciendo jugo natural de frambuesa, mi favorito, nos sentamos en la isla Tobías al lado mío y Nicolás al frente de nosotros
-Aquí tienen tortolitos, los mejores sándwiches echo por mi- la señora Ana me miro sorprendida y a la vez feliz por lo que había soltado mi amigo Tobías y yo la quedamos mirando atónitos y después a Nicolás
-Descuiden yo no diré nada- dijo la señora Ana y al parecer Nicolás no se había percatado de lo que había dicho porque abrió los ojos como plato y empezó a ruborizarse
-Lo...lo...lo siento chicos, no fue mi intención- dijo apenado
-No te preocupes Nico, tarde o temprano la señora Ana se iba a enterar, quédate tranquilo, ahora ¿comamos?- al decirle esto pude notar que se relajo, empezamos a comer los sándwich que había preparado y estaban riquísimos
-Esto está increíble Nico- dijo Tobías
-Gracias, es una receta que me enseñó mi mamá- nos comimos todo y eso que eran muchos sentí que la puerta de la casa se abría
-Es tu papá- dijo Tobías en un susurro
-¿Como lo sabes?-
-Soy un lobo- dijo bajito y me tiro un beso, su sentido del olfato estaba mejorando, eso quería decir que ya no faltaba nada para que él se transformara, me paré y fui corriendo a encontrarme con papá
-¡Hija!- Dijo abriendo sus brazos
-¡papá!- corrí donde él como cuando era niña se que sólo anoche lo vi pero siempre necesito a papá
-Estaba super preocupado por ti mi amor, ¿como estas?¿como sigue Tobías?¿y Nicolás?-
-Están bien, están en la cocina con la señora Ana, ven a saludarlos- lo lleve a la cocina y saludo a todos
-¿como te sientes Tobías?- le pregunto preocupado
-Bien, en algunos momentos me sube la fiebre, pero estoy bien-
-Que bueno, cualquier cosa que necesites sólo dilo ¿y tu Nicolás?-
-Más calmado- dijo riéndose
-Así veo, no te preocupes por el trabajo Nico, se te pagará todos los días que estés aquí y a ti también- apuntó a Tobías
-Pero señor...- dijo Tobías
-Pero nada, ya esta todo listo- yo ya presentía que Tobías quería renunciar, me miro unos segundos
-¿Papá podemos hablar en privado?- los ojos de Tobías se abrieron más y los de Nicolás también
-Esta bien hija, vamos a mi despacho- subimos mientras yo me debatía por contarle o no mis sentimientos hacia Tobías -¿que sucede Hellen?-
-Tengo que decirte algo y es muy importante para mi-
-Me estas asustando hija-
-Es que no se como decírtelo- lo miré unos segundos- me gusta a Tobías- solté de un sopetón
-¿A Tobías?¿pero si a ti te caía mal con sólo verlo?-
-Eso era antes papá, del odio al amor...-
-¿pero estas segura?-
-Sip-
-¿Y él lo sabe?-
-Sip-
-¿Y que te dijo?-
-Que yo también a él, sólo nos estamos conociendo papá, pero con él me siento segura y...-
-¿Y sobre su situación que hija?¿como lo van a superar? Yo no quiero volver a ver a mi hija con el corazón roto-
-Mira sobre su situación, sabremos como llevarla sólo es cosa de estudiar como lo hicimos con la mía, yo de verdad lo quiero papá y se que él también me quiere y también sé que el quería renunciar porque estamos juntos-
-Ya veo- se sobo la barbilla unos segundos -¿podrías decirle que suba por favor?-
-¿No le harás ni dirás nada malo?-
-Confía en mi hija- salí super nerviosa de ahí me dirigí al living donde estaban los chicos
-Tobías-
-Dime- me miró nervioso
-Papá te necesita arriba-
-¿Sabe lo nuestro?- Dijo bajito
-Si, si lo sabe-
-Bien princesa, todo estará bien- me dio un beso en la frente y subimos al despacho él entró primero y después yo
-Tobías toma asiento-
-gracias-
-Mi hija me contó la relación que están teniendo ustedes-
-Así es señor Kevin- podía notar que el ambiente estaba muy tenso
-sólo prometeme una cosa-
-Lo que usted diga-
-Quiero que hagas feliz a mi hija- ¿que? No puedo creer que papá halla dicho eso
-Será la mujer más feliz señor Kevin, eso no lo dude- dijo con una sonrisa
-pero seguirás siendo mi guardia por el periodo en que podamos controlar tu situación, hasta que veamos que podemos hacer, será como si tuvieras una licencia médica, es decir, no trabajarás pero si se te pagará tu sueldo-
-Eso sería aprovecharme de usted señor-
-No si yo lo sentencio, si quieres tu puedes, después de varios meses, buscar un trabajo o yo te puedo asignar a otro puesto, eso lo veremos a futuro ahora sólo concentrate en ti y en Hellen-
-Gracias señor, no se preocupe Hellen nunca le pasará nada malo- fui corriendo a donde papá, me impresiona lo bueno que es este hombre
-Gracias papá-
-De nada hija- dijo bajito abrazandome-ahora, si me disculpan tengo que llamar a la empresa para ver si todo esta bien-
-Bueno, nosotros estaremos en la cocina- salimos de ahí y caminamos un poco por el pasillo
-Estaba super asustada- dije bajito
-Yo también- susurro Tobías mientras me abrazaba por la cintura-te extrañare esta noche-
-¿Quien dijo que no dormiremos juntos?-
-Pero y tu papá, la señora Ana y los chicos, acuérdate de que desde hoy vienen-
-De eso yo me encargo- dije cerrandole un ojo y me besó.
En medio del beso tuve un mal presentimiento, como si algo o alguien estaba haciendo algo malo, de repente en mi mente apareció la imagen del bosque, me separe de Tobías y corrí a mi habitación
-¿Que sucede Hellen?- dijo detrás de mí, abrí la puerta y mire por la ventana, salí corriendo al patio de la casa
-¿Hija que sucede?- dijo papá
-Hellen calmate esta temblando- dijo Nicolás cuando me vio bajar las escaleras
-Señora Ana, que nadie salga- fue lo único que dije iba echando humos por la cabeza al llegar al patio la vi caminé más rápido hacia ella
-¡Maldita perra bastarda!- grite mientras me dirigía hacia ella
-Wow Hellen esas son formas de saludar a tu prima- dijo burlona
-¡Cállate!¡yo no tengo prima!- de pronto empezó a temblar más y más fuerte el cielo se nublo y empezaron a caer relámpagos
-¡¿Que quieres?!-
-Sólo vine a ver como estaba todo por aquí y a ponerme al día, veo que tu noviesito se convertira en lobo dentro de poco- se rió y no se como pero me lancé hacia ella como león a su presa me subí arriba de ella y le di varios golpes en la cara hasta que sentí que alguien me agarró de la cintura y me sacó de ahí mientras veía que otra agarraba a Samantha y la amarraba, al verle la cara pude ver que no era la cara de ella si no que era de otra chica
-Sueltame- le dije a la persona que me estaba sujetando, me acerque a la chica que botaba sangre de nariz
-¿donde mierda está samantha?- la chica hizo un gesto hacia su chaqueta, metí mi mano y saqué un papel

Falta poco prima:)

A que se refiere con eso
-¿Thomas que haremos con ella?-¿Thomas? Miré a la persona que estaba atrás mío y efectivamente era Thomas después miré a la persona que había amarrado a la supuesta Samantha y era Adam
-No lo se Adam, se ve mal-
-La llevaré a que la revisé tu papá-
-No yo la llevo tu lleva a Hellen adentro- Adam asintió y se cerco a mi
-Espera- dije me acerque otra vez a la chica y le revisé los bolsillos en busca de algún lápiz que para mi suerte encontré uno y le mandé un mensaje a Samantha y guardé el papel en la chaqueta, -procura que lo lea niñita- dije mirandola otra vez y pude notar que tenía un ojo hinchado, la ceja rota, la nariz con mucha sangre y el labio hinchado, realmente se veía mal. Me paré y camine a varios metros adelante de Adam al entrar estaban todos preocupados
-¿Hellen estas bien?- asenti con la cabeza -¿quien era princesa?-
-Mi prima, bueno era otra chica con la cara de Samantha, al parecer es mucho más fuerte que yo- dije sentandome en el sillón con una mano en la frente
-¿Ella puede hacer eso señora Ana?- pregunto papá como si no lo creyera
-Claro que puede papá, si es una maldita bruja-
-Ella ya le respondió señor, como vera Hellen sólo lleva dos meses con el tema, ella aún es débil en comparacion con su prima-
-Pero valla que golpea duro- dijo Nicolás-casi dejaste inconsistente a esa chica con cara de Samantha- Tobías se arrodilló al frente mío
-¿Estas bien?- negué con la cabeza me tomó de las manos y vio que mis puños estaban con sangre -ven acompañame- nos paramos y me llevo al baño, saco el botiquín de primeros auxilios y me limpio mis nudillos que tenian pequeñas heridas -te ardera sólo un poco- dijo antes de poner un algodón con alcohol-¿que es lo que te pone mal princesa?-
-Tengo rabia con mi prima Tobías, y tengo rabia de que siempre soy yo la débil-
-Yo no creo que seas débil, después de la paliza que diste, uff nunca te haré enojar si golpeas así-
-no, yo me refiero a lo otro-
-A ver mira, en mi opinión con el tiempo que llevas con esto eres super fuerte, solamente tienes que aprender a controlarte y no ser taan impulsiva y también tienes que concentrarte mucho en lo que quieres-
-Esto será un caos- dije con aire desanimada
-Todo saldrá bien- me dio un beso en la frente- y pensar que en este baño comenzó todo- reí con lo último
-Vamos al living-
-Pero antes...- me agarro de la cintura y me dio otro beso pero en los labios -te quiero Hellen- ¡¡¡¡¡EL ME QUIERE!!!!!
-Yo igual te quiero Tobías- le di besos cortos y salimos de ahí
-Hija ¿cómo estas?-
-Más calmada, Tobías me hizo algunas curaciones, pero estoy bien sólo fue un impulso-
-amor trata de evitar esos impulsos necesitas estar tranquila, sin odio en tu corazon, ya no te queda nada para que cumplas tu mayoría de esas hija, no quiero que seas una de ellas- papá tenía razón ya no quedaba nada para mi cumpleaños y no podía tener odio ni rencor en mi corazón ya que eso afectaría en mi cambio
-Esa es una gran prueba señorita Hellen, tiene que poder lograrlo-
-Tranquilos, se que a esa fecha podré lograr no sentir odio con ayuda de ustedes- Tobías me abrazo y puse mi cabeza en mi pecho, justo en ese preciso momento llegó Thomas y todo se volvió super incómodo, hasta papá se dio cuenta
-Creo que está lista la comida chicos, pasen a la mesa por favor- todos fuimos al comedor, Thomas no dejaba de mirarnos, ¿no estará pensado en hacer una guerra?
-Chicos quiero darles las gracias por venir a ayudarnos-
-Señor Will nosotros hemos venido a asegurarnos de que la transformación de Tobías no cause ninguna desgracia y también vinimos a decirle ciertas reglas- lo que en realidad quiso decir Thomas :" señor a nosotros no nos interesa ayudarlos, sólo vinimos a ver que Tobías no se mandara un cagaso" por lo que interprete yo
-Tobías no hará nada malo- interrumpi
-Nadie lo sabe Hellen, cuando Tobías sufra la primera transformación no se acordará de lo que hizo y también será muy difícil controlarlo por la fuerza que tendra-
-¿Y que sugieres que hagamos?-
-Lo mejor será de que nosotros nos quedemos abajo en el sótano junto a Tobías encerrados y ustedes aca arriba- ¿qué? Ni loca dejaría que Thomas y Adam se queden solos con Tobías después de todo esto de los lobos y los vampiros, tendría que pensar en un plan para la noche siguiente.

MoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora