Parte 3

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Sungmin se sentía humillado con todo lo ocurrido, no estaba muy seguro de lo que había pasado pero de lo que si estaba seguro era que no se iba a dejar tratar como un simple tapete y menos por ese estúpido

- Oppa!- le llamo su hermana, había vivido toda la infancia con su madre en los estados unidos y queriendo pasar tiempo con su hermano y padre quiso viajar a corea- me acompañaras al centro comercial? Quiero comprarme unos vestidos

- No quiero

- Pero...

- No escuchas que no quiero?!- le grito Sungmin- no molestes

Dejándola sola en la sala se encerró en el cuarto, Lee Hana, tenía ya 20 años; era la princesa de su madre y sabía que no la quería dejar ir porque sabía que tipo de persona era su padre y en lo que se había transformado su hijo. No dejándose mostrar débil salió de la mansión rumbo al centro comercial

No tenía mucho ánimo, iba mirando las vitrinas como si nada, tampoco era que tuviera muchas ganas de comprarse ropa puesto que ya tenía. Iba tan metida en sus pensamientos que termino por tropezar con un pequeño que paso por su lado corriendo, sin embargo antes de caer fue recibida por unos brazos fuertes que evitaron su caída

- Estas bien?- esa voz la hizo sonrojar, al elevar la mirada pudo notar unos ojos tan negros y cautivadores

- S-si- aquel joven sonrió con amabilidad

- Debería tener más cuidado, puede lastimarse

- Lo tendré- murmuro bajo

- No creas que soy atrevido pero, te apetece tomar un café conmigo? La verdad es que no me gusta mucho tener que comer solo

- M-me encantaría- afirmo Hana sintiendo sus mejillas arder

Hablaron de varias cosas allí sentados, la chica se sentía en el cielo cada vez que aquel joven le sonreía. Era demasiado apuesto y sentía que la suerte estaba de su lado

- Disculpa pero me tengo que ir- hablo aquel joven bajando de las nubes a Hana

- Eh? n-no te disculpes, está bien... bueno...

- Fue un placer hablar contigo Hana- le respondió tomando suavemente su mano y depositando un beso sobre esta

- Y-yo...

- Me encantaría salir a tomar nuevamente contigo en alguna otra ocasión, no quiero que pienses que soy un acosador así que...- aquel chico saco un papel del bolsillo y se lo paso- este es mi número, llámame cuando puedas... estaré esperando

- Fue un gusto conocerte... e-esto...

- Yesung... Kim Yesung- completo sonriéndole de lado y poniéndose de pie para irse de allí- hasta la próxima

- Hasta la próxima- susurro ida, su corazón no dejaba de latir.

Ese chico la había enamorado sin hacer nada en especial, solo mirándola fue suficiente

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Borrando la sonrisa que traía consigo vio la foto de la familia de Sungmin, si quería hacer que sufrieran tenía que ir poco a poco, solo con matarlos no era suficiente, cuando iba cruzando por el parqueadero para subir a su auto vio una persona apoyada sobre este con los brazos cruzados

Kibum había visto al mayor entrar al centro comercial y aunque tenía deseos de seguirlo no lo hizo y prefirió esperar apoyado sobre el auto de este a que saliera, Yesung se acercó con una sonrisa ladina y cuando estuvo frente al menor hablo

Sweet RevengeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora