Infiltrada en la Arena ||Gaara|| TERMINADA

Matenla

El ambiente estaba tenso...muy tenso. Kitsune estaba entre Gaara y yo, el peliblanco fulminaba al oso panda con la mirada, si las miradas mataran de seguro Gaara acababa diez metros bajo suelo. En cambio el pelirrojo miraba al frente, de vez en cuando miraba a Kitsune de reojo.

-¿En donde queda la cabaña, Kitsune? -le pregunte para aliviar el ambiente.

-A una semana de aqui, creo...

-¿Como que crees?- dijo Gaara.

-Nunca he viajado de aqui hasta mi cabaña ¿Que esperabas mapache?

-Que al menos supieras algo, cabeza de nieve.

Los dos se miraron con odio, yo solo rodé los ojos y mire al frente, seria. Me molestaba la actitud de ambos, luego dicen que las mujeres son las complicadas.

Estos días no serán como yo creí.

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-Buenas noches -les grite desde mi tienda.

-Buenas noches -me respondieron.

Reí bajo al imaginarme a Gaara y a Kitsune durmiendo juntos.

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-Cerca de aquí hay un lago, para que se bañen, no huele muy bien, Katarina-sama - me dijo y luego miro a Gaara- Tu apestas como cerdo.

Me golpee la frente, esto debe ser broma. Ya habían pasado dos días y la actitud de ambos no ha cambiado, me tienen harta.

Pov Gaara.

Katarina se estaba lavando en el lago, en cambio Kitsune y yo estábamos de tras de una roca, esperando nuestro turno.

-No espies -me dijo Kitsune.

-Lo se -respondí de mal humor.

Vi la ropa que tenia el demonio en sus manos, era la ropa de la cuatro ojos.

-¿Por que tienes su ropa?

-Se la entregaré cuando me llame -dijo.

Frunci el ceño.

-No la veras desnuda -tome la ropa y se la quite.

-Tu tampoco -me la quitó- No volveré a dejar que la vean sin ropa.

Frunci el ceño ¿A que se refería?

-¿Que quieres decir con eso?

-Esos niños llamados Kaito y Nagato la vieron desnuda -apretó sus puños.

"Y tu no, Gaara" rió Shukaku "Friend Zone jajaja"

"Tu no te metas"

-¡Kitsune, mi ropa! -grito Katarina.

El peliblanco y yo nos vimos, le quite la ropa.

-Se la daré yo -susurre.

-No- me trato de quitar la ropa.

No se cuanto tiempo estuvimos tirando de las prendas, hasta que una pequeña mano mojada tomo las ropas y nos las arrebato.

Con Kitsune giramos nuestra cabeza encontrándonos con Katarina envuelta en una toalla, su pelo estaba desordenado y húmedo y su rostro mostraba enojo.

Antes de que Kitsune y yo abriéramos nuestra boca, ella se dio vuelta y se dirigió a su carpa.

Pov Cata