De lo Particular a lo Superficial

Capítulo 4. "Mi nueva vida".

Estabamos apunto de llegar a la casa habian comprado mis papás en California, me sentía millonario, no se pero conseguir una casa en una semana, de seguro mi abuela ayudo a conseguir la casa.
Ya no sabia ni en que pensar de lo aburrido que estaba, porqué ya queria llegar.
Mi mamá iba manejando, y yo no sabía ni que hacer.

- Sabes algo mamá, necesito que me compres un celular.
En verdad necesitaba ser más sociable y que mejor que comenzar con un celular.

- Ten.
Ella metio su mano en una caja, yo extendí la mano y me dio mi viejo gameboy.
Me encogí de hombros, y me puse a jugar.

Habia pasado tiempo, no sabia cuanto para ser exactos, estaba tan entretenido tratando de ganar.

- Cody, ¿no vas a bajar?.
Voltee a ver a mi mamá que estaba fuera del auto con los brazos cruzados.
Abrí la boca para preguntar que hacia ahí pero vi que estábamos en la casa de mi abuela, no se como habia pasado, fue magia.

- ¿Como llegamos tan rapido?.

- Ya baja tu abuela quiere verte.
Me baje, y camine hacia la casa, estaba apunto de abrirla, pero la puerta se abrió y vi que era un chica, pero una chica muy sexy.
Yo me le quede viendo seguramente como estupido, porque vamos así soy yo.

- Hola, Cody.
Me saludo de beso y un abrazo, yo no hice lo mismo porque no la conozco y no acostumbro a saludar a extraños.

Voltee hacia atras donde se encontraba mi mamá, para preguntarle quien era ella.
Mi mamá le sonreia a la chica, volví a voltear y las dos se sonreían.

- Cody, no seas modesto, saluda a tu prima.
¿Que?, ¿Yo tenía una prima?, ¿Cuando había pasado esto?.

- Ahh....
No sabia que decir.

Vamos estúpido, deja de ser un jodido imbécil y actúa como hombre.

Callate tu no ayudas en nada, pero creo que tienes razón.

- Hola, prima.
Le sonreí, la besé y creo que me vi como un patán que queria echarse a su propia prima.

Mi mamá entro y yo la seguí, mi "prima" se despidió de mi e hice lo mismo.
Entré a la casa siguiendo a mi mamá.
Vi a mi mamá que platicaba muy entusiasmada con mi abuela.
Mi abuela que ahora me vio alzo sus brazos para que yo la abrazará así que fui a ella y correspondí.

- Oh vaya, estas enorme, miraté. Racuerdo la ultima vez que veniste, querias aprender andar en la bicicleta y Félix te enseñó. Comencé a reír.

- Así lo recuerdo el tío Félix me enseñó.

- Si, ¿Como has estado mi niño?.
Recuerdo que mi abuela siempre me decia así cuando era pequeño, pero ya no lo era.

- Bien abuela, gracias.
Me sente en otro sofa.

- Wow, pero que cortante estas, Cody, cuando venías a ver a tu abuela; corrias hacia ella y le contabas todo lo que te pasaba.

- No quiero ser grosero, pero tenia 6 años y ahora tengo 16, si no me fallan las matemáticas fue hace 10 años cuando hacia eso, creo que he cambiando.
Mi abuela comenzó a reir y mi mamá me miro mal.

- Tienes razón Cody, ya eres todo un hombre, seguramente debiste dejar a tu novia allá en Denver, y por eso estas enojado por mudarte aquí.
No sabía como responder a eso, sentí como se le asomaba el colmillo a mi  abuela, porque me había golpeado metafóricamente con sus palabras, por que la que me dijo fue muy bajo.
Lo unico que hice fue reír fuertemente.

- Estoy más solo que un perro.
Las señoras empezaron a reír uertemente.

- ¿Tienen hambre?.
Mi abuela preguntó.
Y si yo tenía mucha hambre.
Le contestamos que sí, mi abuela nos llevó a la cocina. Ya tenia la comida hecha, y se veia deliciosa.

(...)

Ya eran las 6 de la tarde, mamá y yo pasamos toda la tarde con la abuela, ayudandola con el jardín.
Creo que nos quedaríamos a dormir aquí, ya que solo llego la mitad de la mudanza, mi mama fue a nuesta nueva casa. Ni siquiera tuve tiempo de conocer la dichosa casa. Mi computadora llegaba mañana, junto con mis cosas, y solo significaba una cosa, dormir.
Le di las buenas noches a mi abuela y a mi mamá. Subí las escaleras para ir a la habitación de visitas. No habia notado que la casa de mi abuela estaba muy bonita, remodelada, definitivamente era bonita. Sabía que hoy dormiría con mi mamá. Así que sólo me quite mis tenis, y me acosté quedandome enrollado entre las sabanas, estaban cansado, cerré mis ojos y ya no tuve más conciencia.

(...)

Abrí los ojos recordando que estaba en la casa de mi abuela, por lo que me paré rapido poniéndome en marcha.
No vi a nadie en la sala solo cajas, por lo que fui a la cocina buscando a la abuela.
La vi allí haciendo el desayuno.

- Buenos días abue.
Le di un beso.

- Buenos días, tu mamá dejo las cajas y me dijo que las llevaras a su nueva casa, pero antes de hacer eso dijo que buscaras en ellas ropa y cosas para hacearté.

- Gracias.
Me dirigí a la sala de nuevo, para buscar mis cosas y hacer lo que dijo mamá.

Después de tomar una ducha hacearme y cambiarme, bajé a desayunar. Ya estaba listo para llevar las cajas y conocer la casa.

- Abuela, ya estoy listo. ¿Por cierto, donde esta papá?.

- Oh, tu papá pido un día de descansó para acompañar a tu mamá a Denver por las ultimas cosas pesadas.

- ¿Y porque no me llevo a mi?.
Ella río.

- Tu madre dijo que estabas insoportable cuando venian para acá, así que te dejo durmiendo.
Eso dolió, pero ahora entiendo y tiene razón.

- Bueno gracias Abue, ¿ Y donde esta la casa, que compraron mis padres?

- Toma dos cajas, y salgamos, te mostraré.
Ella salía, mientras que yo tome dos cajas rápido y la seguí.

- Bien abuela, muetreme donde es.
Ella hizo una seña con el brazo y la casa no quedaba tan lejos de la suya, de hecho la casa donde viviría estaba a 4 casas enfrente de la de mi abuela, era bonita tenia un color azul celeste, con un jardín precioso y un arbol enorme.

- Cody, tu vé, yo no puedo andar de allá para acá, ¿si?.
Obviamente que si, mi pobre abuela casi no salía de su casa por la edad, me imagino que las personas que le compraban despensas o cosas para la casa y para ella era mi tío Alfred y mi tía Mary.
Ahora que recuerdo, ¡cierto mi tío Alfred y mi tía Mary tuvieron dos hijos; Luna y Josh.
Las imagenes de ayer en la tarde se ponian en mi mente, la chica que me saludo era Luna. No la recordaba, ella era mayor que yo por dos años y Josh era menor que yo por seis años, que ahora tendran 18 años y 10 años.
Hasta yo me sorprendía de lo ñoño que llegaba a ser.

- Cody, no te quedes viendo, ve.
Mi abuela me hablo sacandome de mis pensamientos y voltee a verla.

- Si, perdón. Ya voy.
Comence a caminar, ¿Que me esperaba aquí en California, tendría una vida mejor que en Denver?.