Capítulo 5. "¡¿Qué diablos haces?!".

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Estaba a unos pasos para llegar, pero me de tuve viendo el árbol.

- Lindo árbol, ¿no?.
Volteé para ver a la persona que me hablaba.

- Así.
Luna estaba cruzada de brazos viendo la casa.

- ¿Vas a entrar o te quedaras a fuera?.

- Claro que sí, solo me distraje.
Le sonreí.

- ¿Ok?, así que, ¿ya me recuerdas?.
Reímos.

- Si, Luna.

- Vaya, pensé que tendría que presentarme.

- Como olvidaría a mi prima favorita.
Camine hacia ella baje las cajas que traía y la abracé como cuando eramos pequeños.

- ¿Quieres acompañarme?.
Me separé de ella y señale la casa.
Asintió.
Comenzamos a caminar, me sentía raro en mis últimos años en la escuela cuando hablaba con una chica terminaba dando vergüenza o ponerme completamente nervioso, creo que hablar con Luna será un buen paso para hacer amigos de una buena vez.
Entramos a la casa y dios santo si que era hermosa por dentro y fuera, no sabía que mamá ya había traído casi todos los muebles.

- Cierra la boca.
La mire y me reí.

- Me parece bien la casa, ¿No crees?.

- ¿Te parece bien?. ¿Qué quieres decir con eso?.
Seguía cruzada de brazos, pero ahora mirándome juguetona.

-Bueno, que esta linda, yo que se. Mi mamá me dijo que trajera unas cuantas cajas para acá. Y apenas llevo dos con estas, tengo que regresar por más a la casa de la abuela.

- Vamos te ayudo.
Salimos de nuevo para ir por más cajas....

Después de una hora habíamos terminado, si que eran bastantes cajas. Luna y yo ya habíamos entrado en confianza, al menos eso creo. Nos pasamos diciendo chistes o jugando, fue divertido.

- Bien ya terminamos, y gracias por ayudarme. ¿Qué quieres hacer ahora?, si quieres ir a tu casa o la de la abuela o no se.
Sonreí por cortesía.

- ¿Exploramos tu casa?.

- Oh si, quiero ver las habitaciones de arriba, ¿quieres venir conmigo?.

- Vamos.
Subimos las escaleras, el pasillo de las habitaciones era extenso, abrí la primera puerta a la izquierda y no parecía una habitación, era pequeña.

- Es una bodega, me parece.

- Si, eso creo.
Ella continuó y abrió la puerta de la derecha.

- Creo que esta es tu habitación, ven a ver.
Camine a donde ella entro y vaya que es grande el cuarto.

- No creo, han de ser de mis padres.
Exploraba el cuarto con la mirada.

- No las de tu papas es la otra al fondo.

- Oh, bueno si tu lo dices.
Creo que ya no teníamos tema para hablar y yo ya no sabía que decir.

Como siempre todo un idiota.

- Si, bueno solo esperemos a que lleguen mis papás y así te enseño mis cosas y no se, si quieres sa.......
Luna se lanzó contra mí besándome.
Yo no sabía que hacer, solo la separé de mí, tan rápido como pude.

- ¡¿QUE DIABLOS HACES?!.
Le grité enojado y me limpiaba la boca. Me miro asustada.

- Yo... Lo siento.
Partió en llanto y se sentó en el suelo.
No sabía que hacer era mi prima, yo, yo no podía besarla.
Me puse a su altura. Ella había parado de llorar y se tapaba la cara.

De lo Particular a lo SuperficialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora