Capítulo 11 - Parte II

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Kylie estaba sentada enfadada en el pasillo fuera de la biblioteca, dónde todo el Cónclave de Madrid estaba reunido. Ella era la única que no podía estar, ya que no era parte de ellos.

Estaban todos reunidos por petición de Patrick para debatir lo que Kylie había propuesto sobre hacer olvidar a su familia y amigos. Y por ello estaba molesto, se estaba decidiendo el futuro de ella y sus padres, ¿y no la dejaban estar? Kylie bufó resentida. Ya llevaban ahí casi una hora.

Siguió pensando en los sucesos de ese día. Por una parte estaba Dom, en quien no quería pensar aún. Y por otra sus padres. Se les veía bien, felices, sabia que si creían que ella moría no iba a ser así. Por eso prefería quedar en el olvido aun que le doliera. Era lo mejor.

Cuando antes dijo que si hacían eso, ella se quedaría, no lo decía de verdad. No del todo al menos. Sabia que si no le concedían su petición, volvería a su vida totalmente mundana, pero si la decían que si... Aun no lo sabia. Faltaba horas para que retransmitiera su decisión al director y aun no había claro nada. Estaba harta de tanta decisión.

Seguía pensando en ello cuando la puerta de la biblioteca se abrió y ella se levantó rápido cuando Dominic se asomó por ella.

-Entra - le abrió la puerta para que pasara. Dentro había entre veinte y treinta cazadores de sombras, entre ellos todos los que habitan en el Instituto. Miró a Meredith pero su cara no rebelaba nada. Dom la dirigió hasta quedar enfrente de la mesa ante todos.

-Kylie. - Patrick la llamó - Dices que quieres que tu familia y amigos olviden que alguna vez exististe, que borremos todos los recuerdos que tienen que ver contigo a lo largo de toda tu vida. ¿De verdad lo deseas?

-Si. - dijo con seguridad. Era de las pocas cosas de las que estaba segura.

-¿Eso quiere decir que te quedarás con nosotros y serás una Nephilim? - todos la miraban expectante.

Le costó mucho no mirar a Dominic. En cambio miró a Jamie, probablemente el único que la entendía aquí. Él la sonrió levemente, infundándola ánimos y apoyo. Volvió a mirar al director.

-Me queda aún un día mas para decir mi decisión. No diré nada aun.

-¿Y si te digo que no haremos tal cosa a tus padres?

-Me iré ahora mismo. No haré sufrir con mi muerte a mi familia.

Patrick la miró de una manera muy extraña.

-Está bien. Kylie, si decides quedarte aquí, te concederemos lo que quieres. Borraremos todo recuerdo tuyo en tus seres queridos mundanos.

Kylie soltó el aire que no sabia que estaba conteniendo.

-Puedes irte, debemos comentar otros asuntos y no puedes estar aquí. Meredith, tu también, sigues teniendo 17 años.

Ella puso los ojos en blanco pero siguió a Kylie al exterior de la biblioteca. Antes de que se cerrara la puerta, Kylie captó una mirada esperanzada en Dominic. Siguió a Meredith por los pasillos hasta la sala de entrenamiento.

-¿Te apetece entrenar un poco? - Kylie sólo se encogió de hombros indiferente - Oye, ¿estás bien? - la miró.

-No lo se. - su voz apenas era audible.

-La Clave seguro que aprueba tu petición, ¿no es lo que querías? - Mer la miraba fijamente intentando comprenderla.

¿Era lo que quería? Ni ella misma sabía que quería. Odiaba estar tan indecisa. Apenas se reconocía, antes era alguien segura de si misma y sus decisiones, en cambio llevaba un mes metida en ese lío y estaba igual que cuando empezó.

¿De verdad? No. Ya nada era igual. Físicamente era mucho más fuerte, y le gustaba ese cambio en su cuerpo, se sentía bien con el entrenamiento. Había conocido a nuevas personas que poco a poco se han metido bajo su piel y no se imagina vivir sin la compañía de Meredith, sin sus horas de entrenamiento con Jamie, y sin Dom. Incluso echaría de menos a Jordan y sus peleas con Kat. Estaba tan abrumada por todo lo ocurrido hoy que no pudo evitar echarse a llorar. Mer se acercó a ella y la estrechó entre sus brazos.

-Es tan difícil... Ojalá pudiera quedarme aquí sin renunciar a mis padres. Los quiero mucho.

-Lo se Kylie, yo perdí a mis padres, se lo que es echarles de menos. Pero no tuve que elegirlo. Si tanto los echas de menos, tal vez... - prosiguió insegura - tal vez debas irte. - Kylie se alejó de ella para mirarla a la cara.

-No quiero dejaros tampoco.

-Debes elegir. Sólo te puedo asegurar que aquí no te faltará nada, te consideramos de nuestra familia, ya te lo dije un día. - le quitó las lágrimas de la cara - Te he cogido mucho cariño en este último mes, Kylie. Eres como la hermana que siempre quise tener. - Kylie volvió a abrazarla, sobrecogida por la sinceridad de su amiga.

-Yo también te quiero como una hermana, Mer. Aún que aún este dudosa, cuando mañana tenga que elegir, se que elegiré la opción correcta. - Meredith la sonrió y se alejó de ella hacía las armas de la pared.

-Bien. Ahora demuestrame todo lo que has aprendido.

* * * *

Kylie estaba saliendo de la ducha cuando oyó unos golpes efusivos en la puerta de su dormitorio. Cogió rápido la toalla para cubrirse y fue a abrir la puerta. Se alejó un paso ahogando un grito de sorpresa.

Shadowhunters: Ser NefilimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora