El poder de un Fénix

II. "La bruja"

Introducción de Fénix

No soy un monstruo, no miento cuando digo que la gente siempre me ve como un engendro. He ido un par de veces al mercado de la aldea, trato de ir lo más cubierta posible porque tengo prohibido entrar en ese lugar. Siempre escucho balbuceos, rumores sobre el bosque oscuro de Failure.

"Bosque oscuro", así le dicen pero es un lugar hermoso, lleno de luz y vida durante el día. Es en la noche que se vuelve solitario y tenebroso pero no por culpa de mi tío Jonnathan ni tampoco por mí, es culpa de La Guardia Nocturna del clan, ellos son los encargados de vigilar el bosque y su presencia, su orgullo y su violencia, destruyen todo destello de luz y hermosura del bosque. Son asesinos de poemas, asesinos de melodías, asesinos de la naturaleza.

Mi nombre es Fénix y soy una "bruja". Desde que tengo memoria he intentado ir en contra de lo que soy, he intentado ser una persona común, alguien que pueda actuar y hacer lo que los otros hacen, vivir como otros viven pero sin importar cuanto me esfuerce, la gente me odia, incluso mi propia familia.

Supuestamente, el día en que nací toda la magia desapareció y, como señal de respeto al nuevo poder, un eclipse tuvo lugar en el cielo. ¿Por qué si yo era el milagro, mi papá me echó de la aldea como si nada importara? Nunca le importé, posiblemente porque yo maté a mi mamá el día en que nací. Nunca me perdonó, ¿quién podría perdonar eso? Fue gracias a mi tío que sobreviví, él me educó y me enseñó a entender mi destino, mi magia.

Lo único que sé del día que nací es gracias a Arthur, un aldeano que conocí una tarde en el bosque. Estaba asustada, tenía la oportunidad de hablar con alguien pero tenía miedo de ser juzgada otra vez. Era claro que él también estaba asustado. Jamás olvidaré ese día, el día en que reí con alguien más, el día en que hice un amigo.