Salgo del hotel en busca de un taxi, lo cual no fue complicado al ser una zona comercial, le indique mi dirección, esta vez jugaba con mi celular, agradecí tanto los diez minutos que dure cargando en el hospital mientras que platicaba con las chicas y mi padre; solo trae el veinte por ciento, pero con eso me basta para llegar a mi casa y volverlo a poner.
Esta vez no hubo una charla con el conductor, al parecer solo se dedica a su trabajo que es manejar y listo. En su estéreo sonaban canciones esas que no sabes el significado de sus letras, pero te deja algo... una sensación magnifica, como de Frank Sinatra, Jimmy Fontana y unos cuantos más que no pude reconocer. El trayecto se hizo corto al escuchar su música, una vez que me dejo en mi casa y le pague me baje.
Abrí la puerta y entre, dejo caer las llaves y camino a la sala dejando caer todo mi cuerpo en ese sillón tan cómodo. Recargo mi cabeza en el borde del sillón y cierro mis ojos. Ha sido un pesado día como para poder tener más noticias; creo que con esto se confirma que si me levanto contenta tendré un pésimo día.
Creo que dure en esa posición durante unos cinco minutos lo que fueron para mi una eternidad, una vez recargada mi energía me levanto y comienzo a guardar un poco de ropa de los tres, primero de mi tío, un par de pantalones y cuatro camisas, a mi papá un pantalón deportivo y una playera para que cuando saliera estuviera cómodo. Y bueno para mi, guarde desde maquillaje, cepillo dental y para mi cabello, laptop, libros, ropa y zapatos. Pongo a cargar mi celular mientras me preparo y me doy una ducha.
(...)
Camino por el pasillo hasta llegar a la habitación donde se encuentra hospitalizado mi padre, al parecer las chicas lo dejaron solo al rededor de las nueve y media. Yo llegue a las once de la noche, conversamos y le dí de cenar, en realidad solo puse la bandeja de comida en una charola movediza y se la acerque. A las doce mi padre se durmió como un bebé, no se despertaba con nada, al parecer mi tío fue a la cafetería y se quedaría en ese lugar toda la noche para que yo pudiera dormir en el sofá que esta en la recamara.
Saco una sabana, me acuesto y pongo en mis piernas mi portátil, coloco mis auriculares mientras que escucho canciones e ingreso a mi perfil de Facebook, tengo tanto tiempo que no ingreso a este. Vi unos cuantos perfiles de mis amigas de New York del como continúan con su carrera de modelos, mis ojos se comienzan a cerrar. Apago el portátil y lo dejo en la mochila color morada con negro.
-¿A donde vamos, William?
-Es una sorpresa- posa su brazo por mis hombros juntando más nuestros cuerpos - puedes quitarte ya la venda-
Quito aquella venda que me puso desde un inicio William, tomamos su avión privado y al parecer llegamos a Italia, una descarga eléctrica en todo mi cuerpo ¿que pasa? Pasa que puedo volver a ver a los chicos. -¿Que hacemos en este lugar?
-Primero haremos una parada en un restaurante llamado 'Nando's dicen que es muy bueno-
El chófer de la limousina nos abre la puerta, entramos y quedo cautivada por lo espaciosa que es. Salimos por el quema-cocos y veíamos todo. Me siento un poco tranquila al saber que Valle D'Aosta queda a unos treinta minutos del centro de Italia.
-¿Quieres visitar a tu abuela?- lo miro
-No, no quiero verla sé lo que me dirá:'hija, eres una deshonra para esta familia' - imito la voz de ella
-¿No la extrañas?- niego con mi cabeza, esa señora solo se la pasa diciendo todas las malas decisiones que he tomado - Bueno, eso no importa tanto, quiero comer contigo y luego vamos a un lugar secreto-
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¿enamorada de Los cinco? |one direction y ____(tn)
FanfictionUna venganza, cinco corazones en juego, un sentimiento real. ¿Que más puede pedir ella en la vida? Que tener enamorados a los cinco, a One Direction. Todo iba bien en su plan de vengarse, pero algo fallo, se enamoro, solo que no sabe si es esta ¿ena...