Amor con sabor a fresas (Pearlshipping)

Cap 2: Limpieza con sorpresa

Nuevo episodio! xdd nuevamente me disculpo por las faltas de ortografia, y ademas, intentare que este cap se haga mas largo que el anterior :'DD
Es mi primera historia de Pokemon, no me lo tengais muy en cuenta por favor x'd
Comencemos!~

Cap 2: Amor con sabor a fresas

— ¡Hola! ¿Hikari verdad? — me quedé embelesada con su sonrisa, era... tan dulce — mucho gusto, como te habrá dicho la bruja so-. —
— ¿¡A quien le dices bruja, excremento!? — Kasumi le dio un fuerte puñetazo en la coronilla de la cabeza, el chico respondió con una expresión adolorida y calmandose el dolor con la misma mano.
Entonces se rio por lo bajo y me extendió la mano, yo que ya había salido de mi trance existencial, la estreché vergonzosa y con un claro sonrojo en el rostro.
— Asi es, tu debes ser... ¿Satoshi entonces, no? — intenté hablarle de una manera normal, pero estaba tan conmovida y nerviosa por su dulce sonrisa, que no solo no podia mirarlo a la cara si no que solo me salia un hilo de voz suave.
— ¡Claro! Y, — me revolvió el cabello entre risas y con, al parecer, sumo cuidado me levantó el rostro que hasta ese momento miraba al suelo buscando mi valentía, entonces me miró a los ojos. Caí en una especie de trampa, ahora me cautivaban sus ojos acaramelados — no hace falta que seas tan timida con nosotros, a partir de ahora, seremos tus amigos tambien — me volvió a sonreir, creo que moriré de diabetes y de una grave alergía si sigue así. Mi corazón empezó a latir fuertemente y si no fuera por unos dedos chasqueando delante de mi rostro, me habria quedado todo el día admirando a ese chico.
— ¡Vamos tortolitos, se nos va a pasar todo el recreo y no hemos comido nada! — era la voz de Haruka, maldita sea, siempre estropeando mis fantasias ¡yo no me meto con las tuyas! Y mira que son raras, asi que dejame en mi mundo mujer.
Nos sentamos a comer en la misma mesa donde me los encontré, a la vera del arbol, donde justamente estaba apoyado el chico caramelo ¡A partir de ahora ese sera su mote! Por que es endemoniadamente dulce para mi cuerpo. Pasamos una, casi hora, muy entretenida, me lleve bien con absolutamente todos los del grupo, bueno, descontando al chico raro numero 2 (asi es, casi todos ahi eran raros, pero divertidos) solo que este chico de cabello morado no era divertido. Me miraba durante todo lo que duramos alli, no hablaba casi nada y siempre parecia de mal humor. Tampoco se reia de las tonterias del chico raro numero 1 (el rubio) y del chico caramelo (y era verdad, este chico era un saco de risas), pero bueno, no le presté la minima atención, total, era su vida y actitud.
Entramos a la siguiente clase, dibujo, la verdad no era una clase que me llamara mucho la atencion, pero como casi siempre era una hora casi libre ya que nos dejaban hablar con los compañeros, pues se hacía mas amena.
Algo me llamó la atención. Kasumi se pasó casi toda la clase mirando al profesor (bastante joven la verdad) Kenji y muy de vez en cuando se levantaba para hablar con el o "preguntarle" cosas sobre el trabajo que estabamos haciendo. Esto me pareció altamente extraño, ya que, por si no fuera poco, el profesor le seguia la corriente y le devolvia las miradas.
Me giré hacia Haruka, que era mi compañera de dibujo en ese momento y la miré extrañada.
— Haruka-chan ¿has visto a esos dos? — apunté a las dos personas, que se encontraban hablando, con la mirada. Ella me afirmó con la cabeza — ¿y no te parece extraño que se lleven tan bien? Quiero decir, esta bien que un profesor y un alumno tengan una buena relación y eso, pero... las miradas y tal... —
— Si, si que lo es, pero creeme, llevan asi desde que el profesor entró en el instituto — me dijo con una expresión seria pero su voz tenía un tinte de diversión.
— ¿Y cuanto lleva aqui? — pregunté sorprendida.
— Pues desde que llegó el profesor Okido...3 años si no me equivoco — me respondió, continuando con su dibujo. Por unos instantes me quedé observando al profesor, de alguna manera se me hacía muy joven. Y esa relación, muy rara.
Ultima hora por fin, y a pocos minutos de que toque el bendito timbre. Asi es, estoy desesperada por salir y tirarme en mi cama a dormir, primer dia y estoy cansadisima. El profesor de Historia, Takeshi, a pesar de ser una materia aburrida, sabia darle un toque divertido a su clase y suele bromear bastante, me provocaba bastante risa sus peculiares ojos siempre cerrados por no decir que tambien tiene una apariencia muy joven, realmente aqui los profesores parecen ser muy amigables.
— ¡Chicos, chicos! — dio algunos golpes con la mano sobre la mesa, para llamarnos la atención, era ultima hora y estabamos a poco de terminar, no era de extrañar el jaleo que se habia montado — antes de que os vayais, toca decidir a quien le toca la limpieza del aula — todos en la clase bufamos con desgana y molestos, cruzo los dedos por que no me toque a mi.
— ¡Si, si, ya se que os encanta! — habló divertido — muy bien... el turno de hoy es para... — enfocó la vista en el papel — ¡para nuestro gran amigo Satoshi! — todos en la clase aplaudimos entre risas mientras el chico caramelo dejaba caer la cabeza sobre el escritorio molesto — y la segunda persona será Dee- — carraspeó corrigiendose, hasta el profesor se sabe mi "hermoso" mote ¡Mataré a quien se lo haya dicho! Eché una mirada asesina a Haruka y esta pareció asustarse ¡Te voy a matar querida amiga! — que diga, Hikari, la chica nueva — todos volvieron a aplaudir y pude ver como Satoshi se reia con malicia, a el tambien le asesinaré, pero cuando estemos solos.
Ya todo el mundo se había ido, y quedamos nosotros dos, con un par de escobas y unos trapos humedos. Como odiaba que me tocara este trabajo.
Comenzamos por limpiar la pizarra y el polvo de los borradores, todos sabemos como iba a acabar esto. Estaba yo tranquilamente limpiando con uno de los trapos el pizarrón, cuando de repente siento que me envuelve una humareda blanca, me empiezan a escocer los ojos y toso con dificultad, en ese mismo momento me giro hacía el chico a mi lado y veo que se rie divertido, se iba a enterar. Tomo uno de los borradores y repito la misma acción que el me hizo a mi, y como regalo se lo aviento en su hermo- digo, en su horrible rostro bronceado.
— Vaya, vaya Dee-Dee, con que te apetece jugar con fuego — me mira desafiante y de un momento a otro se abalanza encima de mi y comienza a hacerme cosquillas por todos lados.
— ¡Ah, Satoshi p-para! — intento hablar como puedo pero el aliento se me va por la risa, con la fuerza que me queda lo empujo y me posiciono yo encima de el — Te toca sufrir a ti guapo — sonrio malévola e igualmente, le hago cosquillas por todas partes, mientras me rio divertida.
Acabamos en el suelo, el uno al lado del otro con las respiraciones entrecortadas y sudando. Me giro para mirarle y el hace lo mismo, nos quedamos mirando unos instantes y nos reimos suavemente.
Nuestras miradas se cruzan con profundidad, nuevamente me pierdo en sus ojos de caramelo, el sudor en su rostro hacia que este se viera demasiado...sensual, y sin poder evitarlo, mis ojos se posaron en sus labios, levemente sonrojados y entreabiertos. Dios mio, demasiada tentación.
Poco a poco nos fuimos acercando por impulso, nuestras respiraciones chocaron y un dulce aroma a vainilla invadió mis sentidos, no se si era colonia o simplemente su olor natural, pero me entraron unas horribles ganas de probarlo...me daba igual la alergia, yo queria.
A unos milimetros de juntar nuestros labios, el se separó bruscamente asustandome.
— ¡Que hora es! Rapido Hikari, tenemos que terminar de limpiar, si llego tarde a casa me matan — se puso a abrillantar los pupitres rapidamente, yo suspiré aliviada ¡que locura, estaba a punto de besar a ese chico que ni conozco casi! Si, es atractivo y tal, pero no soy de esas chicas.
Terminamos de limpiar y el atardecer se asomó por las ventanas ¿Tanto tiempo habia pasado? Salimos de la clase hablando animadamente, poco a poco nos haciamos mas cercanos, ya casi podria llamarlo amigo. Pasamos por delante de la biblioteca, hasta que una voz familiar nos llamó la atención, nos miramos extrañados, a estas horas no debería haber ningun alumno en el instituto, excepto los profesores y los que estaban en algun club.
Abrimos la puerta levemente y nos asomamos por esta. Lo que vimos nos dejo sin habla.
— ¿K-Kasumi...? —

To Be Continued...

Si, si, ya se que dije que intentaria hacerlo mas largo, pero es que queria dejar con el suspense e v e
Bueno, eso es todo! Espero que os haya gustado el cap </333