He decidido a viajar a los Estados Unidos para tener más oportunidades de trabajo, pero hay algo que se me hace difícil dejar, es dejar a los que más amo en la vida, a mi familia y a mi novio Esteban. Él me dice que continué mis estudios aquí en México, porque tiene miedo de que allá me enamore de alguien más y lo deje y finalmente ya no regresar.
—Allison, ¡Por favor! ¡no te vayas! ¿Que no me amas?
—Esteban, Claro que te amo, pero quiero superarme en mis estudios y vida, quiero ser alguien importante para el día de mañana. Si me voy, te prometo que regresare.
—Allison, Promételo que regresaras y final mente casarnos y tener 2 niñas como lo soñamos.
—Te lo prometo, recuerda estas palabras, Te amo demasiado y regresare para tener la familia que tanto soñamos.
Al siguiente día tengo mi vuelo a Estados Unidos, mi familia y Esteban fueron a despedirse, con lágrimas en los ojos Esteban se acerca a mí y me dice:
—Aquí te estaré esperando, sabes que te amo buen viaje.
Aborde el avión y él se quedó a ver como el avión despejaba, no se hace la idea que por un largo tiempo no, nos vamos a ver
Solté el llanto en el avión pues sabía que de hoy en adelante enfrentaría a la vida sola que tendría que hacer nuevos amigos y adaptarme a una sociedad ala que no estaba acostumbrada.
Después de haber volado unas cuantas horas, llegue al fin a los Estados Unidos, lo primero que hice al bajar del avión fue llamar a mi familia solo para avisar que ya había llegado y que todo está bien, después de haber colgado, le llame a Esteban.
—Hola, amor al fin llegue a penas baje del avión y no aguante las ganas de decirte que al fin llegue y que todo está bien y que ya te extraño demasiado.
—Me alegro que hayas llegado bien y me alegro más por haberme llamo, sabes sonara algo absurdo, pero también te extraño, hace unas horas te fuiste y siento que algo me falta y sabes ese algo eres tú, te amo.
—Hay tonto me harás llorar con tus cursilerías, sabes que te amo demasiado y también sabes que será difícil para mi adaptarme aquí sin ti, sin mi familia y amigos, pero te lo prometí pronto volveré.
Bueno amor tengo que colgar, ya que tomare un taxi para que me lleve al departamento que alquile, adiós te amo al rato hablamos.
—Adiós amor cuídate, cualquier cosa que pase llámame, te amo.
Tome un taxi; mientras llegaba a mi destino, fui contemplando la ciudad
Al bajar del taxi me tropecé, pero un chico me alcanzo a agarrar, lo vi a los ojos y le di las gracias.
—Hola, creo que no te figaste bien donde pisaste verdad.
—¡Que gracioso! bueno adiós y gracias.
—¡Espera! No me dijiste tu nombre, y no sabía que una chica tan bella como tu viviera en este lugar.
—Me llamo Allison, y gracias, apenas me ando mudando para acá, disculpa y tú ¿Cómo te llamas?
—Me llamo, Sebastián mucho gusto, a bueno creo que nos frecuentaremos mucho, puesto que vivo en este edificio.
—Mucho gusto Sebastián, fue un placer conocerte pero me tengo que ir tengo mucho por hacer, hasta pronto.
Después de a ver entrado en mi departamento no dejaba de pensar en Sebastián pues sus ojos
azules eran como mirar el cielo, pero me decía a mí misma no te puede gustar aquel chico apenas lo conociste y recuerda tu amas a Esteban.
Decidí marcarle a Esteban, para decirle que ya me estaba instalando en el departamento,
mientras platicábamos decidí contarle que ya había conocido a alguien.
—Hola, solo llamaba para decirte que ya estoy instalándome en el departamento y te quería
pedir disculpas por colgarte hace rato sin decir nada.
—Qué bueno que ya estés instalándote, ojala estuviera allá para ayudarte y no te preocupes por lo de
hace rato sabía que tenías que colgar.
—Si lo se ,por cierto al bajarme del taxi me iba a caer pero un chico me alcanzó a sostener
para no caerme por cierto se llama Sebastián, es mi vecino, es un buen chico se ve que es muy
carismático y amigable.
—Qué bueno que no te paso nada y agradécele a Sebastián de mi parte por a ver impedido que te
haya pasado algo.
—Claro yo le digo, bueno tengo que colgar alguien está tocando la puerta seguramente es Sebastián.
—Esa bien, mas al rato hablamos por Skype adiós te amo
—Claro más al rato me conecto. Adiós.
Cuelgo y no dejo de pensar en Sebastián no sé qué pasa todo fue tan rápido, de un día para otro me mudo de ciudad dejo a mi familia a mi novio, tantos cambios en tan pocas horas me están volviendo loca. En eso tocan la puerta de mi departamento en mi mente digo «Es Sebastián, claro que debe ser él es al único que conoces que estúpida soy ».
Corrí hacia la puerta y abrí y obviamente era él, no sé pero cuando abrí la puerta y vi a él de tras de ella sentí como mariposas en mi estómago es absurdo lo sé solo llevo un día de conocerlo y no puedo enamorarme de él porque yo ya estoy enamorada de Esteban.
—Pasaba para ver si va todo bien aquí —Dijo
—Pues aun no me instalo totalmente pero ahí la llevo poco a poco.
—Quizás te pueda ayudar pero si me haces un favor
—Ni 24 horas tenemos de conocernos ¿y ya me estas pidiendo favores?
—Si lo supuse no aceptaras mi ayuda a cambio de un favor.
-Acepto tu ayuda pero mientras el favor no sea como matar al vecino o algo así.
—Bueno yo te ayudo, a cambio de que tú me dejes bañarme aquí en tu departamento en el mío no hay agua y me urge bañarme.
—Claro terminamos de acomodar todo este desastre y al final del día tú podrás ducharte.
Pasamos casi 4 horas acomodando todas mis cosas aclarando que no me lleve mucho pero siempre cuando me mudo de casa hago un desastre, no soy muy buena mudándome de casa, al final del día Sebastián se metió a darse una ducha y yo prendí mi laptop para platicar con Esteban como habíamos quedado por teléfono.
