1

1.9K 128 8
                                    


El sonido de la música, las decenas o cientos de cuerpos que iban y venían a la pista de baile, los gritos, los murmullos, todo le estaba fastidiando demasiado

-Me voy- dice L poniéndose de pie sorprendiendo a sus amigos que estaban sentados junto el

-Pero ni siquiera has comido- dice Sungjong tomándolo del brazo para detenerlo -Si quieres te puedo conseguir a alguien-

-No- dice L mirando fríamente al chico de cabello rubio junto a el-No quiero a nadie de este chiquero, toda su sangre sabe horrible, la de todos-

Sin decir nada más camino hacia la puerta, pudo escuchar el jadeo indignado de Sungjong pero poco le importo en realidad, estaba harto de que el mocoso se le ofreciera cada que podía, que es que no entendía que no le gustaban los críos insolentes como el

-¿Dónde podre encontrar a alguien a estas horas?- se pregunta mirando alrededor, debían de ser las 2 o 3 de la mañana y por el frió que hacia dudaba que alguien estuviera afuera a estas horas- Maldición de que sirve ser de uno de los mejores clanes de vampiros sangre pura si no puedo encontrar a una maldita víctima-

Su mal humor estaba llegando y eso realmente no era bueno

Un grito lo alerto haciendo que mirara hacia el otro lado de la calle, había un pequeño parque y pudo ver como un chico corría hacia él, pero de pronto de la oscuridad salió una mano y lo jalo hacia ella, sonrió al escuchar otro grito, sabía que él lo mas probable es que fuera un primerizo, camino sin mucha prisa hacia donde podía escuchar al chico pelear para liberarse, mientras gritaba por ayuda, al acercarse, pudo ver como un chico estaba sobre otro tratando de hacer que se quedara quieto

-Como no lo has mordido ahora es mío- dice L sonriendo y tomando del cuello al chico que comenzó a gritar y forcejear para ser ahora él el que quería que lo soltaran, usando su fuerza lanzo al chico lejos, pero al ver que este regresaba molesto lo tomo del cuello y lo giro hasta que escucho el sonido característico de un hueso romperse, cuando el cuerpo callo L se dio cuenta de que era un Danag, lo cual no le sorprendió, al voltear hacia el chico se dio cuenta de que este estaba en shock mirando el cuerpo del otro vampiro como si no creyera que estaba muerto-Hola-

El chico levanto la vista y lo miro aterrado mientras trataba de hacerse hacia atrás alejándose de él

-Oye ¿A dónde vas?- dice L tomándolo de uno de los tobillos y jándalo hacia él, chico dio un grito y trato de agarrarse de lo primero que pudiera, pero para su desgracia no había nada- No te preocupes no te dolerá-

El chico comenzó a llorar lo cual molesto un poco a L, pero algo en el chico evitaba que le gritara o simplemente hundiera sus colmillos en su cuello

-Por...P-Por f-favor no...me...mates- decía el chico entre sollozos

-Oh, no te preocupes no lo hare - dice L sonriendo mostrando sus colmillos al chico que solo tembló asustado, se colocó a su altura -Si no te mueves será más rápido ¿Cómo te llamas?-

-S-Sungyeol- dice el chico en un jadeo al ver como los ojos del vampiro se volvían de color rojo

-Bueno hola Sungyeol- dice L sonriendo mientras acariciaba el cuello de Sungyeol con su mano, Sungyeol no pudo evitar el jadeo que salió de su boca al sentí la frialdad de la piel del otro contra su cuello- Deberías calmar un poco ese acelerado corazón- sonriendo al escuchar otro jadeo de él se acercó a su oído -No te muevas-

Sungyeol solo pudo gemir quedito al escucharlo y sentir como mordía su lóbulo, L sonrió y bajo poco a poco hacia su cuello rosando sus labios con la sensible piel, no pudo evitar sonreír al escuchar los jadeo y gemidos que salían de la boca de Sungyeol, al mismo tiempo que hacia su cabeza hacia el otro lado dejando su cuello expuesto, de pronto un delicioso aroma pareció brotar de su piel y sin poder evitarlo las lamio esa parte y hundió sus colmillos en la blanca piel, Sungyeol gimió fuerte al sentir como se hundían esos dientes en su cuerpo, L también gimió al sentir la sedosa y deliciosa sangre que salía del cuello de ese chico, nunca en toda su existencia había probado una sangre tan deliciosa como esa, rodeo el cuerpo con sus brazos acercándolo más a él, cuando termino de beber, lamio la herida cerrándola, solo dejando una pequeña marca, aun jadeando miro al humano y la vista casi se le nubla de deseo, Sungyeol respiraba agitadamente sus mejillas inexplicablemente estaban rojas, sus ojos entrecerrados y los labios rojos donde los había mordido para no gemir tan fuerte, de pronto la distancia que había entre ellos desapareció uniéndose en un beso para nada suave, sus lenguas se acariciaban entre ellas, L tomo de la cintura a Sungyeol acostándolo sobre el césped, Sungyeol enredo sus dedos en el cabello de este y envolvió sus piernas en su cintura, podían sentir sus miembros rosarse entre ellos causando que el beso se volviera más apasionado y desesperado, ninguno sabía lo que pasaba, solo tenían una necesitad casi desesperada de entregarse el uno al otro, se besaron hasta que el humano gimió por aire, pero eso no evito que L se alejara en su lugar comenzó a besar y morder levemente el cuello de Sungyeol dejando marcas en él, además de su mordida, Sungyeol gemía casi desesperado, no sabía que pasaba, pero quería más, mucho más, L dejo su cuello y volvió a besarlo, mientras sus manos acariciaban el cuerpo del humano sobre la ropa, así siguieron hasta que el sonido de pisadas alerto a L, haciendo que se separa de Sungyeol de golpe, causando que este soltara un gemido de protesta, L lo miro y no pudo evitar sonreír, Sungyeol estaba sobre el césped con los labios aun mas rojos, sus mejillas aun coloradas, su respiración desecha, con las piernas aun en su cintura y las manos a los lados de su cabeza, tan sexy y adorable

Mi Vampiro~Myungyeol~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora