Placer indescriptible

42 2 0
                                    

Puso las manos una en mi espalda y la otra en mi nuca atrayéndome hacia él sin dejar de besarme. Me subí a horcajadas encima suyo en el asiento del conductor y sentí como su erección crecía rápidamente en mi sexo.

En ese momento mi timidez se perdió por completo -debería ser el alcohol que recorría mi cuerpo-. Comencé a levantar su camiseta y al pasar mis manos por ahí él dejó de besarme, me miró con ojos salvajes llenos de deseo y excitación, atacó mi cuello con besos apasionados y torturadores –Que me besaran el cuello me excitaba de una manera atroz-. Pasó sus manos debajo de la camiseta tocando toda mi espalda, me desabrochó el brassier. Yo le quité la camiseta y el la mía junto con el brassier desabrochado, estábamos los dos desnudos de la cintura para arriba, el aire irradiaba tensión sexual y deseo, no podía contenerme más, quería hacerlo ya.

Con un ágil y rápido movimiento me sentó en el asiento trasero, me quitó las zapatillas y seguido el pantalón de un solo tirón. Lo tenía ahí, besándome todo el cuerpo, chupando mis endurecidos pezones y jalando de ellos con sus dientes. Estaba realmente desesperada por sentirlo. 

Abrí el cierre de su pantalón y podía ver su miembro apretando contra los bóxers. Se liberó de ellos y dejó al descubierto su tremenda erección –era demasiado grande, ¿cómo entraría tal atributo en mi?-. Se puso un condón, yo me saqué las bragas para darle acceso a mi entrepierna. En menos tiempo que un parpadeo entró con todas sus fuerzas ahogando un gruñido de placer. -Me dolió, pero era un dolor exquisito.-

Salió y volvió a entrar aún con más fuerza, colmandome por completo. Sus movimientos eran lentos y encantadores. De un instante a otro aceleró su movimiento, yo gemía incontrolable de placer al mismo tiempo que el.

Sentí que una tensión se acumulaba dentro mío hasta que no pude contenerla más. Exploté literalmente con un orgasmo tan delicioso que no podía compararse con nada. Me dio dos embestidas más y se corrió como si no hubiera mañana, con gemidos guturalmente deliciosos deleitó a mis oídos.

Todo el peso de su cuerpo cayó sobre el mío inmovilizándolo con su pene todavía dentro mío. Levantó la cabeza, me miro con esos ojos azules tan profundos y me besó de manera tierna como dando las gracias por el orgasmo.

Se levantó, salió de entre mis piernas y quitó el profiláctico de su ya inexistente erección. Se subió los pantalones y me tendió mi tanga. 

Se sentó en el asiento del conductor con cara pensativa.

**********

Un fin de semana típico de mi, salir con amigos a un recital o un bar para conseguir alguna víctima. Claro que no era un asesino, me refiero a una víctima sexual. Las chicas caían rendidas ante mi. Yo era el adonis que todas esperaban, pero solo las quería para sexo. El noviazgo es algo tonto que te hace perder el tiempo. El amor es eso que se ve en películas o libros y la gente lo lleva a la realidad, sin saber que el amor sirve para que sufras. Pobres ilusos, con esas mentiras siempre sufren. Por eso yo no creía en ello, es más doy gracias por núnca haberme enamorado o tenido sentimientos por alguien ajeno a mis padres o hermana. Sin sufrimientos la pasaba genial.

Salgo de mi apartamento, y me dirijo a la plaza de los buses, allí me espera Trevor que va a ir conmigo. Me subo a mi hermosa Chevrolet Sonic, era mi bebé, mi objeto preferido después del sexo obviamente. En el camino vengo escuchando Coldplay para motivarme un poco antes del recital. Aparco enfrente de la plaza y diviso a Trevor, pero unos tres metros a su derecha se encontraba una chica con pelo violeta largo, de tez pálida, tenía unos enormes pechos, un brazo cubierto de tatuajes con unos jeans negros que por pequeñas partes me dejaban ver su blanca piel, también llevaba una guitarra. No podía verle la cara, ya que su flequillo no me dejaba. Pero ese era el tipo de mujer que me gustaba follar bien duro. Me excitaban demasiado. Cubiertas de tatuajes, pelos de colores, Dios! Me podían. Si mi padre se enterara de cuál es el tipo de mujer que le gustaba a su hijo, de seguro me desheredaría.

Saludo a mi amigo sin dejar de verla de reojo, él me habla pero no sé que mierda me dice. En un instante escucho que balbucéa algo y ya que quería verle la cara me acerqué. Tenía dos opciones, si era linda me ofrecería a llevarla, pero si era fea me disculparía diciendo que la había confundido con alguien más. Eso siempre me servía para tantear el terreno. Lo sé, yo era un jodido gilipollas pero me encantaba.

Me paro frente a ella y cuando levanta la mirada deja ver unos hermosos ojos grises y una cara dulce pero no por eso muy bonita. ¡Cielos!.. Ya estaba pactado, me la llevaría a la cama. Sea como sea, quería oirla gemir de placer por mí. Sus pechos eran más lindos de cerca y tenía los labios de una medida justa para hacerme un oral. Muy fuera de lugar mis pensamientos, pero al fin y al cabo era un hombre y la mayoría pensamos eso.

Me ofrezco a llevarla como todo caballero haría, aunque yo de caballero no tenía un pelo, la noto nerviosa, pero era de esperar yo las pongo siempre de ese modo. Por un momento pensé que rechazaría mi oferta pero aceptó. Listo Lucas, ya tienes la víctima para tu noche.

Ella tocaba en la banda soporte de Coldplay, su voz era muy dulce y su cuerpo muy deseable. No le aparté la mirada de encima mientras tocaron.

Una vez que ellos terminaron bajaron al campo pero había muchísima gente, quería acercarme para ver si podía darle un beso o algo, pero la multitud no me dejaba. Logré safarme y la encontré, me acerqué desinteresadamente y le ofrecí de mi refrezco al cual me dijo que no. Unos idiotas la golpearon y casi cae al suelo, entre tanta gente no era muy bueno caer al piso. La puse delante mío con doble sentido, ya que quería apreciar su trasero. Sus nalgas eran muy lindas, del tamaño justo para su cuerpo. Me excitaba con solo mirarla. Un tonto me empuja y todo mi cuerpo se apoya sobre el de Natalie, mi erección se clavo literalmente ariiba de su culo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 20, 2013 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El amor en los tiempos de la música.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora