El Huésped

Capitulo 6.

—Jimin... ¿Yo... Te gusto?

—Yo...

—¡YoonGi!—¿Quien mierda interrumpe justo ahora?—¡YoonGi!

Fui a abrir la puerta desganado, juro le pateare el trasero a la persona que nos interrumpió.

—¡YoonGi!—Tae...

—¿Que haces aquí, hace una hora te dejo en casa... No hay caso.

—Debo decirte cosas...

—¿Cosas?

—Sobre mi...

—¿Que es Tae?

—Soy completamente Gay.—¿A que se viene esto?

—Lo sé.

—¡Hyung!—Me grito, por lo que yo solo me reí. —Jimin tenia razón... Tu sonrisa es distinta a la de antes... Ahora es genuina...

—¿Jimin te dijo eso?—Él asintió.

—Quiero a J-Hope...

—Debe de estar durmiendo.

—No quiero que piense que estando ebrio me atrevo a besarlo...

—Sabia que te gustaba.

—¡Me siento Gay!

—Lo eres...

—Igual que tu querido amigo... Tu y Jimin se hacen los idiotas...

—Callate.

—Me callas por que sabes que es cierto...

—¡Aish! Callate Tae.

Entro mirando a todos lados, Jimin seguía en la cocina, yo solo venia detrás de Tae.

—¡Hey! ¡Jiminnie!—Grito risueño.

—¿Hyung?

—¿Sabes que eres demasiado bello para ser verdad?—Le dijo juguetona mente.

—¿Ah?

—Ven.—Lo agarro de un brazo, Jimin no alcanzo a reaccionar cuando sus labios ya estaban encima de los del otro.

—Ya vi demasiado... —Suspire cansado.

—Jiminnie... ¿Vamos a tu cuarto?—Que ofrecido...

—Claro...—¿Qué?

—¡Hey Tae! —Grite.—¡Hoseok viene a buscarte!

No fue mas que dijera el nombre de aquel hombre para que soltara a Jimin.

—No me mires así, en verdad viene.

No me demore mucho para enviarle un mensaje pidiéndole que sacara a V de aquí, al parecer le incomodo un poco pero accedió igual.

—¡YoonGi!—Gritaba Tae.

—¡Por la mierda Tae! ¡Calla tu maldita boca!—Grite, ya estaba mas que aburrido.

—Me gritaste...—Sus labios hacían puchero.

—No llores, lloras y te hechare a patadas de mi casa.

Tocaron a mi puerta, la abrí y Hoseok estaba algo cansado al parecer.

—Solo... ¡Tae!—Gritó.

—Lo siento, te devolveré el favor.

—Eso espero...

—¡Hoseok-Hyung!—Tae se tiro encima de este, haciendo que se sonrojara.

—Vamonos...—Agarro la mano de mi ebrio amigo y se lo llevó.