El timbre sonó... y recordé que me encontraba en un colegio, estaban dando clases de matemáticas y los demás no dejaban de tirarme papeles. No necesitaba leerlas para saber que eran papeles que decían que les pasara los chicles que tenía, pero yo ya me los había comido y si les decía eso me mataban.
La verdad me encontraba muy asustada porque sabía que me pegarían y estaba tan desesperada que lo único que hice fue ponerme a llorar. Lloré y lloré hasta más no poder que de la nada me empezó a salir mucha sangre de los ojos hasta que me enojé y me empezó a salir por la boca.
La sangre era tanta que me fui transformando en una bestia que los primeros momentos era irreconocible pero después me miré en un espejo y era un "unicornio".
Agonicé cual cucaracha atentada por un insecticida y vomite arcoíris a todo el mundo por lo cual fui al hospital para poder asesinar gente que ya estaba herida y para eso usé un martillo de hule creyéndome Thor, una salamandra verde y fea come popó y que tomaba mucho chichi para refrescarse, pero ya no podía orinar así que secuestraba gente para tomar chichi, le rompía el pipi a los hombre, les sacaba la vejiga y se tomaba el pipi y otras cosas más que habían por ahí.
Como no quedaba satisfecha con eso, le siguió con el de animales. Un día fue por un canguro y se lo comió y lo cocinó con su orina y lo vendió en el mercado negro, pero no le pagaron, la echaron y justo cuando pretendía volver al mercado negro escuché un grito y me caí de la silla, cosa que a mis compañeros les causó mucha gracia, ya que al parecer todo había sido un sueño (muy asqueroso y horrible) por suerte el timbre sonó por última vez.
F I N
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Historias.
عشوائيVarias historias que fueron desarrolladas en mi salón de clase por medio de una actividad de filosofía. (Actividad que consistía en iniciar una historia y que cada uno de mis compañeros la continuara a su gusto.) Estas fueron las historias que todos...