"Nunca vuelvo a tomar", la mentira común de la sociedad. Gruño por el irritante sonido desconocido de un celular, sin abrir los ojos, busco torpemente una almohada para tratar de no escuchar ese molesto sonido, pero lo único que sentí fue un cuerpo tapado por una sabana, quite la mano enseguida, el sonido del teléfono por fin desaparece. Abro los ojos y me siento en la orilla de la cama.
-Estupida resaca - Murmuré.
Me sobe la sien y estaba tratando de volver a la realidad, dirijo mis ojos al otro costado de la cama y distingo a una joven, su cabello rubio en una alborotada cola de caballo durmiendo boca a bajo, su respiración tranquila. De manera rápida me revise, si no cometí una locura y pude respirar mejor cuando vi que estaba vestido.
Me puse mis zapatos y salí sin realizar ningún ruido. Camine por el pasillo para bajar a la sala.
-Buenos Dias, dormilón- dijo divertido Josh. Uno de los amigos de James y dueño de la casa o como lo llamo "Mi segundo hogar".
-Callate - hablé - ¿Me puedes dar café? - trate de sonar sutil. El asintió y bajamos juntos hacia el comedor.
Llegamos a la sala, para cualquier persona hubiera pensado "Esto es un cochinero" o "Aquí viven personas, no animales" y muchas cosas mas. Para mi esto es cotidiano, la comida tirada en el suelo, los muebles manchados por las bebidas, los vasos en lugares que no deben estar. Este tipo no tiene el mismo concepto de casa como el resto de las personas.
Todas las fiestas que me invitan son en esta casa, un día le pregunte ¿Qué celebras? el me respondió "no preguntes, solo disfrútalo" la típica frase de el.
Me sirvió el mismo café recargado, tomó asiento frente mio.
-Ahh... - habló -¿Cómo estas? - lo mire detenidamente. Tratando de procesar las palabras de el.
-Nunca creí que haya alguien tan estúpido, de preguntar algo obvio. Pero veo que tengo el gusto de conocerlo - dije sarcástico.
- Idiota - dijo - ¿Cómo esta Jane? - cambio de tema.
- Viva - respondí. Di un sorbo a la taza y mordisqueo un pan que me ofreció. Desde que invite a una fiesta a Jane, cuando casi le robara un beso y ella le dio una buena bofetada. Parece perro en celo atrás de ella.
-Se que esta viva - protestó- no soy estúpido.
-Si lo eres -lo corregí- ¿Sabes que a ella no le importas? - trate de convencerlo - Lo ultimo que conseguiste de ella fue un contacto muy fuerte en tu mejilla y si sigues insistiendo yo tendré que ayudarla.
-Se supone, que eres hombre - me pidió - "Simio no mata simio"- recito la frase del "Planeta de los simios"-. Me tienes que ayudar. Créeme es la primera chica a la cual me atrae y siento que quiero algo serio con ella.
-Josh, estamos hablando de mi mejor amiga, prácticamente es como mi hermana. Me llego a enterar que la acosas, me tocara tomar medidas "No muy buenas" contigo. -advertí.
Se quedo callado, no insistió. Termine el café y me fui de ese lugar.
***
Hoy tengo mi primera presentacion despues del descanso. A muchos artistas, no les afecta volver hacer lo suyo despues de un tiempo libre, bueno yo soy diferente. Uno, porque lo mio no fue un "descanso", estuve terminando de estudiar, asi que no cuenta. Dos, extrañaba hacer lo que me gusta, aunque sea agotador pero vale la pena.
Es una sensacion en la cual estas al final de algo, la llamo "adrenalina divertida", es el efecto que debemos sentir siempre, en algunos casos, arriesgarse. Un dia mi papa me dijo "Tienes que vivir como si fueras a morir hoy", metaforicamente es lo que tengo que hacer eso hoy más que nada.
-¡Nathan! Te necesito listo en 25 segundos - grita Joselyn. Terminon de tomar agua, dejo la botella en algun lugar, agarro mi guitarra -con la que siempre me presento- y corro para estar preparado para salir al escenario.
Estaba a pocos pasos, los gritos de las jovenes, las luces, las personas que estaban pacientes en verme salir. Esto se asemejaba en el momento que realicé mi primera presentacion, los nervios en punta, mis dudas -si hago todo mal-, el nudo de la garganta, el estomago me dolia pero por los mismos nervios y la "adrenalina". Bueno, creo que ahora tengo las mismas sensaciones pero con la diferencia de que me siento un poco más seguro.
Me dieron la señal de mi aparicion y salí. Los gritos fueron aún más fuertes, observe todo, las chicas felices, otras emocionadas mientras saludaban y otras lloraban. Todo era familiar, pero algo agotador. Aunque ahora no quiero pensar en eso, solo quiero hacer lo que me gusta y que a otras personas disfruten lo que hago.
"Esto es lo que soy, ahora"
