- ¿Crees qué quede algo por aquí?- me pregunto Jake
Me encogí de hombros.
- Es la única zona donde no hemos revisado. Tal vez, debamos ir a otro pueblo. Ya no queda nada más aquí.-siguió
Acenti.
- ¿Seguirás sin hablar?
No conteste.
Que el silencio responda a tu pregunta.
- Fue solo un hombre.
Te equivocas. Fue una familia.
- Yo mate... Y seguiré haciéndolo. Luego de un tiempo te acostumbras, créeme.
No. No te acostumbras. Solo te conviertes en lo que siempre tratabas de ocultar.
- ¿Quieres sobrevivir?
No.
- Debes acostumbrarte. Así se vive hoy día.
Esto no es vivir.
Es verdad.Respirar no significa vivir.
Seguimos caminando en silencio.
- Sabes... Me da igual. Me rindo. No seguiré con tus tonterías.
Camino sin esperar a que me acostumbrara a su paso y llegamos en 20 minutos aproximadamente...
¿20 minutos? No jodas que no sabes ni que hora es.
....20 minutos aproximadamente y el lugar se veía bastante descuidado.
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Aquí no vive nadie.
No te confíes.
Tienes razón.
Lo sé. Siempre la tengo.
Tampoco te pases, pendeja.
Te acabas de llamar pendeja a ti misma. Tu y yo somos la misma persona.
... Solo cállate.
- Aquí no hay nada- dijo Jake irritado
Al parecer. Pero vale la pena hechar un viztaso.
Camine hacia el pequeño pueblo, dejando a Jake atrás.
- ¿A dónde vas?- me pregunto
Imbécil, ¿No me vez caminando?
Me voltee y le hice un gesto con la mano, indicandole que me siguiera.
- No sabemos que hay.
Puede haber comida, municiones, gente...
También puede haber parásitos, bandidos, nuestra muerte...
Vale la pena el riesgo.
Seguí caminando, ignorando las maldiciones y quejas de Jake. Al adentrarme al pueblo sentí un extraño escalofrío erizar mi piel.
Debe ser el frío.
Miro alrededor y debo admitir que la espesa vegetación se ve hermosa. Le da un toque campestre al pueblo.
Escuche pasos tras de mi, voltee viendo a Jake con el ceño fruncido. Camino en mi dirección con grandes zancadas y paso de mi.
- Pequeña zorra...- murmuró al pasar a mi lado
La zorra eres tu... ¿Pero que digo? El tiene razón, la zorra soy yo. Hago las cosas más difíciles de lo que ya son.
Seguimos caminando, alerta a cualquier sonido. En estos momentos el único sonido era el susurro del viento y nuestras pisadas.
- Deberíamos dividirnos las casas- dijo Jake parando de caminar- Los edificios los revisaremos juntos.
¿Separarse?
Negué con la cabeza.
- ¿Por qué no?
¡No sabemos lo que hay oculto por ahí!
Tal para cual...
¿¡Qué insinúas!?
Los dos son unos idiotas.
- Escuchame bien, Charls- se acerco a mi y me agarro del cuello de mi blusa- No soportare un minuto más tus tonterias. O estas conmigo o estas muerta.
Me límite a mirarle sin expresión alguna.
Quiero matarlo. Quiero acabar con él.
Si.
... Si tu estas de acuerdo, significa que es la decisión equivocada.
... Te odio.
- Habla de una puta vez- dijo entre diente acercándose cada vez más a mi rostro
¡Tu habla bien! ¡No escupas, idiota!
- Charls... No me hagas matarte
¿Por qué deberías?
- Lo haré y lo sabes. No tengo mano temblorosa.
No lo harás. No creo que quieras quedarte completamente solo e indefenso en estos momentos tan críticos.
Quedamos ambos en silencio. Tenía su respiración agitada y el ceño fruncido, mientras que yo solo me quede ahí; sin hacer ningún movimiento o expresión facial.
Te la estas jugando.
Tal vez.
El gruño y me dio la espalda.
- Tienes suerte de que me eres de utilidad, de lo contrario ya estarías muerta.
Gracias, gracias.
- Solo eres algo manipulable para mi
Dicho eso se largo.
¿Manipulable? ¿Yo?
La verdad es que si.
No.
Si.
Estas platicas mentales son una idiotez y perdida de tiempo.
No es mi culpa que tu seas así de retrasada, echale la culpa a tus padres.
Rodé los ojos y mire alrededor. No había mucho a la vista, prácticamente todo estaba destruido. Las casas, calles y edificios parecián que colapsarian en cualquier momento.
No deberíamos entrar.
No.
Pero de todas formas lo harás.
Si.
Sigo caminando, evitando hacer sonidos con mis pisadas. Me pone los pelos de punta el sonido de mis propias pisadas. ¿Y si hay alguien siguiéndome y no le escucho por mis pisadas?
Paranoica.
¡Lo se! ¡No puedo evitarlo!
Di unos pasos más hasta ver una casa casi en perfectas condiciones. Era una casa mediana, rodeada por varías verjas mohosas, podría brincarlás sin problemas.
