Capítulo 2: Plan

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Narración

Kagome llega empapada a su apartamento donde vive con dos amigas.

Es un apartamento espacioso de tres habitaciones de concepto abierto, con muebles modernos, cuadros estilo pos moderno, ventanas grandes, cortinas lujosas y floreros bellamente arreglados ya que Sango,  una de sus compañeras de piso es decoradora.

Rin su otra compañera, la menor de las tres, es camarera en un restaurante tres estrellas, así que, de vez en cuando lleva comida exótica.

Higurashi abre la puerta y pone su mojado abrigo en el perchero cerca de la puerta.

-Hola Sango- saluda.

-Hola Kagome- sonríe desde el sofá donde está sentada la castaña.

-¿Dónde está Rin?- pregunta echando un vistazo rápido por el apartamento.

-Con su nueva conquista

-Pero si apenas ayer rompió con... ¿Cual era su nombre?

-No me preguntes ni siquiera ella puede recordar

-Eres muy mala- sonrie Kagome poniendo en una mesita de centro hecha de cristal su bolso y tomando asiento en el sofá al frente.

-¿Qué tal te fue hoy?

-Vi a Inuyasha

-¡¿El idiota que te dejó plantada en la boda de tu amiga Yuka, y terminó contigo por Facebook?!- exclama sorprendida.

-Ese- afirma.

-¡Cuéntame!- Sango se sienta en el sofá donde está Kagome.

-Llegó como paciente

-¡Uuuuuh drama!- interrumpe divertida Rin, acaba de llegar, aún está en la puerta.

-Llegaste- sonrió Sango.

-Estaba... tu sabes- dijo Rin caminando hacia la cocina- Sigue contando

-El tipo se me insinuó

-¡Noooo....!- dicen las amigas al unísono.

-¿Por qué fue a tu consultorio?- pregunta Rin con un trozo de pizza a medio masticar en la boca.

-Eso es confidencial, no puedo decir nada- niega la azabache con la cabeza.

-Tiene razón Rin no preguntes si sabes que no puede decir- regaña Sango.

-El hecho es que fue un completo descarado, me dejó pensando en lo que me hizo y me pregunté ¿Qué sentiría si ahora fuera yo quien lo dejara?

-Interesante sabes.... espera déjame tragar...- Rin traga lo que hace unos instantes era comida -Si regresaras con él podrías tratarlo mal y después abandonarlo como él a ti

-No creo que sea buena idea, Kagome dile que es una idea absurda- dice la castaña.

-No sé... sí me gustaría poder darle una lección pero... está casado, con Kikyo- baja la mirada.

-¡Qué importa....!- dice Rin atragantadose de pizza- A ella la moral no le impidió... salir con él... cuan...do estaba contigo

-Pero yo no sé- duda por un instante -Sí quisiera hacerlo pagar pero... yo no soy así.

-Es fácil sólo deja que llegue a tu consultorio y lo seduces

-¡No puedo hacer eso es contra la ética profesional!, además le pedí que llegara con su esposa la siguiente sesión

-Pues deja de ser su terapeuta y dale tu número él te buscará- afirma la menor de las amigas.

-Podría hacer eso...- acaricia su mentón pensativa.

Un Día Mientras Te Perdía (Sesshome) (Historia Corta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora